Póquer para quemar

Semanas tras el candidato del Partido de la Liberación Dominicana (PLD), licenciado Danilo Medina Sánchez, hizo galas de su visita a Brasil, donde entre otras minucias se entrevisto con la presidente Dilma Rousseff y el ex-presidente Luiz Inácio Lula da Silva, quien ostentó el ejecutivo entre el 2003 y el primer día del 2011.

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Aquello pasó por lo medios como ráfaga fugaz, como crónica social, como relumbrón, que es lo que se busca en una campaña sin contenidos. La visita se efectuó semanas antes de lo publicitado, esperando el momento oportuno, pero sus compromisarios se encargaron de señalar el momento justo. Después, el candidato del PLD no ha dicho cuales fueron los alcances de la misma, los beneficios que República Dominicana obtendría de esa aventura y los programas a implementar de las enseñanzas obtenidas.

Como la prensa nacional trabaja tan poco, todo lo que se publica son notas de relaciones públicas. Investigar sobre este hecho o cualquier otro, jamás encontrará un comentario, un instante de brillantez, una opinión certificada. En ese sentido, el matutino Hoy está entrevistando a los más experimentados exponentes del oficio y todos coinciden en este renglón.

Me encantaron unas líneas escritas por Guarionex Rosa para el Listin Diario: “la importancia de ese impulso radica en la acogida calurosa que tuvo el político dominicano y en las expresiones de pleno respaldo, pese a que se sabe en el mundo que Brasil cuida mucho su estilo de política exterior y su acostumbrada neutralidad. Lula da Silva le dio a Medina el tratamiento que no le acordó a la secretaria de Estado, Hillary Clinton, cuando ella visitó Brasilia en marzo del año pasado, en el marco de una gira latinoamericana que la llevó a Chile, Argentina y Uruguay”.

Medina anunció que tenía pautados encuentros con funcionarios del gobierno brasileño “de quienes asumirá ideas para su programa de gobierno”, si esas llegaron a efectuarse, sus resultados no se conocen. Incluía autoridades del Banco Nacional de Desarrollo de Brasil (BNDS), el Ministerio responsable del Programa Brasil sin Miseria, así como los directivos de la iniciativa Seguridad Pública de Río de Janeiro, reuniones de trabajo para conocer las experiencias exitosas en áreas como educación, energía, transporte, seguridad ciudadana, financiamiento a pequeñas y medianas empresas y programas puntuales para elevar las condiciones de vida de los dominicanos.

Mientras eso se confesaba en República Dominicana, la presidente Rousseff participada en la apertura de la trigésima cuarta Exposición Internacional de Animales, Máquinas, Implementos y Productos Agropecuarios (Expointer) en el Parque de Exposiciones Assis Brasil, en la ciudad de Esteio, Río Grande do Sul (RS) donde defendió las inversiones del gobierno federal en la agricultura y ganadería y garantizó que Brasil no sufrirá con la crisis de créditos que sacude a Estados Unidos y Europa.

"Vamos a vencer a esa crisis consumiendo, invirtiendo, impulsando las empresas, disminuyendo impuestos y también, plantando y recolectando los frutos del trabajo de la agricultura del país". Destacó el papel de la agricultura y de la ganadería en el enfrentamiento de la turbulencia que amenaza dispersarse por el mundo con la crisis de endeudamiento en los Estados Unidos y en Europa. Agregó que el país es “una potencia agropecuaria capaz de atender al mercado interno y al externo, si vamos a ser la quinta economía del mundo en breve, se debe a la potencia agropecuaria que somos".

"La cadena de éxito que tenemos aquí  la conquistamos gracias al trabajo de los productores, pero también a las políticas del gobierno federal", afirmó Rousseff. Sostuvo que el gobierno privilegiará a agilización de la concesión de crédito para agricultores y ganaderos y el límite de crédito único por productor y no más por producto. Y aprovechó para recordar las medidas del gobierno federal para ayudar a los productores de arroz en Río Grande do Sul.

En la campaña presidencial dominicana, ninguno de los candidatos enarbola proyectos para el impulso industrial, el acceso al crédito bancario, el regreso de una mirada al campo y la agricultura, la reducción de impuestos y en la reactivación de la nación dominicana, que se muestra ahogada, magullada, amilanada, desmoralizada.

Rousseff además de elogiar a Expointer, que según ella, “revela lo que mejor hay en calidad, producción y tecnología”, habló de las medidas de su gobierno en el incentivo al agro negocio. Destacó que el gobierno puso a disposición US$ 65.134 millones para financiamientos y US$ 97.397 millones en el Plan Cosecha. "Los vientos que llegan desde otros países desarrollados no son muy buenos, tenemos condiciones plenas para enfrentarlos. Pero en el 2008, el gobierno del presidente (Luiz Inácio) Lula (da Silva) enfrentó el principio de la crisis. En ese momento, Brasil tenía sus bancos bajo el control del Banco Central y solucionamos la crisis sin usar recursos fiscales: usamos depósitos obligatorios y nuestras reservas. Hoy, las reservas son mayores aún. Tenemos R$420.000 millones (US$ 255.670 millones) y cualquier problema de crédito tenemos como enfrentarlo".

Muy rosa resulta leer cosillas como: “la presidenta de Brasil, Dilma Rousseff, afirmó ayer  que América Latina precisa de líderes como Danilo Medina, que es un hombre que procura unir en su pensamiento y en sus acciones, el crecimiento económico con el mejoramiento de la vida de todos los ciudadanos”.

El dominicano desde hace larguísimos años ha perfeccionado un sistema de vida que se apoya en la desconfianza. Dicho de otro modo: ya nadie cree en lo que se dice, han pasado a otras instancias frases como “tranquilo con Danilo”, “primero la gente” y “e’pa’lante que vamos”. No creemos en el futuro porque ese porvenir se dio prisas y se hizo presente sin mostrarnos paraíso alguno. No hay Edén soñado sobre la Tierra, menos en estas playas perdidas en el Caribe, hipotéticamente.

Medina necesita buscar un impulso mayor que una foto con los brasileños, la candidatura oficial ha salido maltrecha en todos los escrutinios donde se ha medido la intención de voto de los dominicanos para el torneo electoral venidero. Además, todo el mundo tiene la percepción de que los sudamericanos han venido hasta el país para ser parte del botín gubernamental.

El empujón que se espera de Leonel Fernández no acaba de producirse y la gente se cansa de ver siempre las mismas caras: Francisco Javier García, Félix –Felucho- Jiménez, Jaime David Fernández Mirabal, Euclides Gutiérrez Félix, Alejandrina Germán, y tantísimos funcionarios del aparato estatal, con tiempo para todo menos para solucionar los graves problemas de la nación.

La corrupción es una valla enorme, el deterioro de la calidad de vida de los dominicanos, el acceso restringido a una alimentación cada vez más costosa, salud, educación, inseguridad galopante. Calla el licenciado Medina ante temas tan soberanos.

En términos del béisbol, la curva del candidato del PLD no se mueve, no surte los efectos esperados en los contrarios, no abanica a nadie.

Medina se ha llenado de los mismos compañeros de siempre, ello lo invalida para tomar acción alguna contra el gobierno y cada vez aparece más apegado al estado, al mismo que lo derrotó en las internas de su organización camino a las elecciones del 2004. Nada dice sobre los constantes aumentos a los precios de los combustibles, desde hace tiempo, los más caros del continente, ni de la tarifa eléctrica, ni de las nuevas cargas impositivas, todas impuestas administrativamente.

Por demás, entró en la asquerosa carrera de comprar tránsfugas. Luce que en su fuero interno está resignado a una suerte que parece segura, ha perdido las luces casi en el mismo momento en que empezó, depositado a los deseos de Leonel Fernández a quien entregó el manejo de sus aspiraciones; no exige una sola garantía para que el Gobierno Dominicano con su desafortunado andar siga otorgando el triunfo al opositor Hipólito Mejía.

En lo más interno de si, Medina debe saber que de volver a perder unas elecciones de Mejía quedaría condenado por los siglos de los siglos, exiliado de su propia organización política. ¿Será este el juego del Presidente de la República?