Agrios edulcorados…

Caso 246: Picaditos para un viernes de julio

Jul.15.2016

Los Leones de Santo Domingo tiraron por debajo de la puerta el anuncio de que definitivamente jugarán en la cancha del Club San Carlos, y ello debió celebrarse, en caso de ser positivo. No se por qué algunas cositas tienen que desarrollarse con tal sincretismo, como si fuera pecado. Voy más lejos, como un primer paso para asegurar la permanencia de la Liga Nacional de Baloncesto (LNB) debería de armarse una estructura donde la gerencia del equipo rojo coparticipe en el desarrollo del baloncesto de la populosa y tradicional barriada.

Además sería la única forma de enrostrar que efectivamente están interesados en el desarrollo del baloncesto dominicano. Ojo, no estoy diciendo que la directiva de San Carlos tenga que involucrarse en los negocios de Eduardo Najri, que por lo visto se quedó solo en esta aventura, ni que los sancarleños tengan que ceder la administración de su estructura. Hablo solo de la rama del baloncesto.

Lo mismo debería ser emulado por los demás equipos del circuito. Veo muy difícil, aunque no imposible, que Titanes por ejemplo puedan aterrizar en San Lázaro o en El Millón, estos últimos han demostrado un buen manejo económico; o que Soles hagan definitivamente nido en Mauricio Báez, en este caso, la familia Chalas está hasta la coronilla de las promesas ofrecidas y siempre incumplidas del que pretende hacerse llamar el zar del sector, Leonardo de Jesús Heredia Castillo, también conocido por el alias de Leo Corporán.

San Lázaro, otrora la joya favorita del baloncesto dominicano, hoy en ruinas, por las malas administraciones, el irrespeto a la institucionalidad y por supuesto, el castillo de naipes que pretende construir sobre sus ruinas el presidente de la Federación Dominicana de Baloncesto (FEDOMBAL), Rafael Fernando Uribe Vásquez, también conocido por el mote de Rafelin.

Por supuesto, ello implicaría la restructuración de la propia LNB que ha alegremente permitido que la ciudad capital tenga tres equipos, pero no soporta a ningún, con una sede común, y en el andar dejó huérfanas las plazas de Santo Domingo Este y San Pedro de Macorís. De otro lado, el sur nunca ha existido y como dice Felipe Polanco, el popularísimo Boruga, es más cerca y divertido correr la autopista Duarte que atravesar la ciudad de Santo Domingo. Para ir a San Cristóbal ya no hay que llegar a la capital y Santiago bien podría albergar una segunda franquicia.

Precisamente los Leones jugaron anoche (Jul.14.2016) contra los Huracanes y perdieron como dueños de casa; hay que inscribir al dirigente Carlos Medina (Puerto Plata) entre los más infames de este negocio. Su equipo ganaba cómodamente en el último cuarto y estuvo a punto de perder, ventaja de 11 a los 4:18 para el cierre. Inclusive el marcador se igualó a falta de seis segundos para el tiempo vencido. Los Leones de fabricaron 9 unidades en un abrir y cerrar de ojos y el tipo ni se inmutó. El cacareado partido de 4 tiempos adicionales, de la semana pasada, que perdieron los Huracanes se debió a las malas decisiones de Medina.

El dirigente local David Díaz, de quien estoy por creer todo lo que se dice de él en su lar nativo,  apenas usó la banca, pasó el juego con apenas seis jugadores, y así no se puede. De las reservas apenas José –Tongo- Corporán, quien ha recibido una excelente ayuda mediática.

En las gradas de San Carlos el presidente federado dándole cotorra al presidente de la LNB, Antonio Mir. Desde lejos se veía al doctor Merengue… ¡saludos!... mientras conversaban detrás de el beato Rafelin se apreciaba una aureola de odio, violencia, destrucción, como si fuera el Estado Islámico. A Mir que recuerde que Uribe Vásquez no ha desistido de sus deseos en presidir la institución y una puñalada trapera sería poca cosa.

Alrededor del terreno, la reina del bochinche, Fausto Julián Suero Bueno, vestidito de blanco pero el hábito jamás le quitará el corrompido y descompuesto nimbo (apúntelo: acaba de salir a buscar un mataburro). Tenía un vigilante que decía que había cuatro tipos de hombres: hombres, hombrecitos, monicaquillos y buena mierda. Cuando la cosa se puso buena y se acercaba el final del encuentro la insulsa reinita se levantó de su silla y no resistió ver ni el empuje de su equipo y los malabares del contrario; voy entendiendo pasito a pasito el porque de sus repetidos fracasos. ¡Se hizo pupú y corrió a los baños!

No se por qué coño disfruto cada caída de los Leones. Ello no es de ahora, es así desde el primer año donde se juntaron Najri, Leo López, Frank Prats y ya no recuerdo más.

Los Indios de San Francisco de Macorís no jugaron, pero no dejan de ser noticias, aunque no salgan en la prensa. Nombraron al buen amigo Martín Lajara como gerente de operaciones… ¡a mitad del torneo!... ¡otro más que tendrá diferencias con Melvyn López Guillen, El Pingüino!... Lajara es de esos seres que siempre quisieran el bienestar del baloncesto, preocupado por la actividad, pero este país lleno de mediocridades, limpiasaquismos, de eternos genuflexos, que los que tienen callos en el abdomen de tanto arrastrarse (guatitas de callos se les dice en Chile), no se si soportará batallar contra tantas mezquindades y raterías.

Los Indios recibieron en calidad de préstamo al tirador y delantero pequeño Dagoberto Peña (6’06, SG/SF, 1988), un excelente prospecto que ha debido recibir mayores oportunidades en este circuito tan incomprensible, a quien también le van pasando los años; Peña hijo de la inmortal Cristina Montilla proviene de los Soles de Santo Domingo, un equipo que arrastra un pesado lastre económico.

Anunciaron además que no vendrá Francisco García, porque la señora está embarazada y desea estar en el momento del alumbramiento. ¡Francisco García!... si, si, el mismo Francisco García, de la selección nacional, de la NBA y más recientemente de los Vaqueros de Bayamón. Pero, ¿fue alguna vez Francisco García de los Indios?... ¿despedida con broche de cacao y brindis de las aguas del Jaya?

Los Indios suman municiones por doquier, lo que no es malo, pero el responsable apuntar y dar en la diana mira hacia otro lado; la directiva quiere recuperar nuena parte de su inversion, Fabio Rojas quiere salvar su pellejo, pero a El Pingüino no el importa na’, basta con cobrar y hacer travesuras. De eso ya he hablado bastante.

En el otro partido, los Cañeros de La Romana viajaron hasta La Vega para perder a manos de los Reales. Un partido accidentado que pudo haber pasado a mayores.

El dirigente Derek Baker-López inició con los reservistas John García y Joan Mercedes y no le dio ni un minuto de juego al estelar delantero Bobby Pandy Paulino.

¡Que bakebol más bueno se juega aquí!

obras del famoso pintor mexicano Diego Rivera (1986-1957), a 130 años de su nacimiento, quien falleció exactamente el día que un servidor cumplía un mes de nacido.