domingo, 27 de octubre de 2013

Pequeños debates (uno)


Si usted me preguntara cual ha sido el jugador que más me ha impresionado a primera vista le diría que Michael Brooks, selección de los Estados Unidos a los Juegos Panamericanos de 1979 efectuado en San Juan (Puerto Rico), egresado de La Salle University en Philadelphia y quien resultó electo con el noveno pick del sorteo de novatos del año 1980, seleccionado por San Diego Clippers. Iván Brea, periodista ido a destiempo, siempre me decía: “impresionante, majestuoso, si tu crees que Aldo (Leschhorn) es fuerte, imagínate, este es dos veces más y se mueve como Winston (Royal)”.

Brooks, quien jugó hasta el 2008, a los 40 años, promedió en la cita de San Juan 17.4 puntos, 6.1 rebotes y 1.0 asistencias y estaba designado para ser el capitán de la selección de Estados Unidos para los Juegos Olímpicos del año 1980. En su momento fue apenas de duodécimo jugador del baloncesto universitario en la suma de puntos y rebotes con 4,000. Un verdadero portento que vivió bajo la sombra de dos lasallistas famosos, Tom Gola y Lionel Simmons.

Brooks
Al terminar en La Salle jugó 6 campañas en la NBA (Asociación Nacional de Baloncesto, por sus siglas en inglés) y en su temporada de novato promedió 14.7 puntos, 5.4 rebotes, 2.5 asistencias y 1.2 balones robados en apenas 30.2 minutos con 47.9 por ciento desde el campo y 70.6 por ciento desde la línea. En esa ocasión, 1980-81, el equipo de novatos terminó conformado por Kelvin Ransey (6’01, PG, Portland Trail Blazers, 15.2 puntos, 2.4 rebotes, 6.9 asistencias), Darrell Griffith (6’04, SG, Utah Jazz, Novato del Año, 20.6, 3.6, 2.4), Larry Smith (6’08, PF, Golden State Warriors, 9.6, 12.1, 1.1), Kevin McHale (6’11, PF, Boston Celtics, 10.0, 4.4, 0.7) y Joe Barry Carroll (7’00, C, Golden State Warriors, 18.9, 9.3, 1.4).

Al año siguiente, 1981-82, Brooks fue titular en 73 de los 82 partidos en que participó y reunió 15.6 puntos, 7.6 rebotes, 2.9 asistencias, 1,4 robos, con porcentajes de 50.4 desde el campo y 75.7 desde la línea. En la 1982-83 jugó en 82 jornadas, pero sólo 26 como titular y sus puntos se redujeron a 12.2 y los rebotes a 6.4; para 1983-84 apenas intervino en 47 juegos, 30 de ellos en el quinteto y promedios de 11.3 puntos y 7.3 rebotes.

El hombre que al salir la secundaria estaba destinado a ser una deidad, un semidiós, por sus extraordinarias condiciones atléticas se desapareció por 3 años de todos los escenarios. La ruptura de los ligamentos cruzados de una de sus rodillas lo inhabilitó; después la operación, la reeducación, el olvido, para regresar en 1988 con Albany Patroons de la CBA (Asociación Continental de Baloncesto, por sus siglas en inglés); pasó brevemente por Indiana Pacers (10 partidos en 1986-87) y Denver Nuggets (16 juegos en 1987-88).

Recaló en el Limoges francés donde se encontró con el alero Don Collins (6’06, Universidad de Toledo, ex-NBA), a quien apodaban La Cobra, para formar un dúo excepcional. Estuvo 4 campañas en la capital de la provincia de Lemosín, famosa por sus porcelanas, ganando la liga en 1989 y 1990. Jugó tres temporadas con el Levallois y se retiró en 1996 con el Strasbourg.

Las actuales generaciones no tienen ni puta idea de Brooks y sus desempeños.

En el país se ha empezado a debatir sobre equipos y grandes jugadores de naciones europeas, después de la clasificación dominicana al Mundial del año venidero a realizarse en España. Pero el tratamiento de los temas produce escozor. No hay sustancia ni vivencias entre quienes lo tratan, buscan enfocarlo y pretenden edificar a la opinión pública.

Basta mencionar los siguientes nombres: Humberto Rodríguez, Candido Antonio –Chicho- Sibilio, Héctor Jacinto
Guante
Báez Pérez, Leandro De La Cruz y Rolando Guante. Después no busque más nada. Podría aparecer algún chico de la nueva prensa deportiva dominicana que esté ligeramente a caballo del tema, pero nada más. Después de ahí, no busque más nada, eso lo puedo asegurar hasta la saciedad. Nadie maneja el tema del baloncesto europeo, nadie. Todo lo demás es cháchara, locuacidad, parloteo, retahíla y perder el tiempo.

Me ha causado extrañeza como se habla a la ligera de que Želimir Obradović, también conocido como Željko Obradović (Čačak, Serbia, Mar.09.1960) es señalado alegremente como el mejor entrenador fuera de la NBA en estos momentos, sin ton ni son; sin referencias, sin historias. Se irrespetan nombres como Ettore Messina (Catania, Italia, Sep.30.1959), Jasmin Repeša (Čapljina, Yugoslavia, Jun.01.2961), Daniel Lowell "Dan" Peterson (Evanston, Illinois, Ene.09.1936), Alessandro "Sandro" Gamba (Milano, Italia, Jun.03.1932), Ranko Žeravica (Novo Milosevo, Yugoslavia, Nov.17.1929), sólo para mencionar algunos vivos.

Preguntar a seguidas por Fraqiskos Alvertis, Sergei Belov, Miki Berkowitz, Dejan Bodiroga, Wayne Brabender, Juan Corbalan, Kresimir Cosic, Drazen Dalipagic, Pedrag Danilovic, Mirza Delibasic, Sasha Djordjevic, Nikos Galis, Saras Jasikevicius, Eadivoj Korac, Cliff Luyk, Pierluigi Marzorati, Dino Meneghin, Bob Morse, Aldo Ossola, Theo Papaloukas, Manuel –El Indio- Raga, Antonello Riva, Emiliano Rodríguez, Juan San Epifanio, Walter Szczerbiak o Panagiotis Yiannakis sería letra muerta. Esos son algunos de los más
Marzorati
sonados.

Alessandro Abbio, Marco Bonamico, Roberto Brunamonti, Carmelo Cabrera, Ben Carnevale, Danko Cvjetičanin, Fabrizio Della Fiori, Pedro Ferrándiz, Pini Gershon, Aleksandr Gómelski, Dragan Kićanović, Mirko Novosel, Giancarlo Primo, Ratko Radovanović, Fernando Romay, Cesare Rubini, Romeo Sacchetti, Zoran Slavnić, Damir Šolman, Ignacio Solozábal, Jordi Villacampa, Stojan Vranković y Rajko Žižić. Son nombres con lo que crecí dentro del baloncesto, pues muy temprano supe que había otros mundos y fronteras más allá de las nuestras.

Blondet
Pero si miramos más de cerca, Ralph Abraham, Billy Baum, Charlie Bermúdez, Héctor –El Mago- Blondet, Elnes Bollings, Nelson Bompart, Luis Brignoni, Pedro Chape, Ron Charles, Mario Butler, Charles Claxton, Teofilo –Teo- Cruz, Raymond Dalmau, Víctor David Díaz, Rolando Frazer,   Arturo –Mano Santa- Guerrero, Joe Hatton, Ruperto Herrera Tabio, Tomas –El Jabao- Herrera Martínez, Cruz Lairet, Alfred –Butch- Lee, Ian Lockhart, Freddy Lugo, Flor Meléndez, Alfredo Monachesi, Rubén Montañez, Mariano –Tito- Ortiz, Raúl Palma, Davis Peralta, Sterling Quant, Neftalí Rivera, Ramón –Tulo- Rivero, Juan Roca, Rubén Rodríguez, Elvis Rolle, Ángel –El Cachorro- Santiago, Luis Sinclair, Arthur Solomon, José –El Galgo- Sosa, Charles Thompson, Mychal Thompson, Jimmy Thordsen, Leon Trimmingham, Alejandro Urguelles, Juan –Pachin- Vicens, entre tantos, tantos que temo faltarle a mis amigos.

En los extremos del continente: Ismael Machado Andrade, Ângelo –Angelim- Bonfietti, Alberto Cabrera, Héctor –Pichi- Campana,  José Geraldo –Ze Geraldo- de Castro, Adilson de Freitas Nascimento, Gilson Trindade de Jesus, Esteban De La Fuente, Marcel De Souza, Juan Espil, Atilio Fruet, Ernesto Gehrmann, Lars Hansen, Ken McKenzie, Marcos –Marquinhos- Leite, Ubiratan Maciel, Carlos Domingos-Mosquito- Massoni, Marcelo Milanesio, Fernando Kuhn Minuci, Hernán Montenegro, Amaury Pasos, Adolfo Perazzo, Emil Rached, Carlos –Chocolate- Raffaelli, Helio Rubens Garcia, Hugo Sconochini, Oscar Schmidt, Milton -Carioquinha- Setrini, Joao Jose –Pipoka- Vianna, Phil Tollestrup y Jim Zoet.

Milanesio
Necesariamente para hablar de baloncesto hay que apoyarse en el recuerdo de los otros, tratar de hacerlos coincidir entre si, y apoyarse en los propios, imprescindible para el buen conocimiento, alguna vez nos asaltará la inquietud, el dolor o trataremos de embellecerlos, para dibujar la historia lo más cerca posible de la verdad.

Antes de perdernos en la más estupida de las comparaciones: ¿quién fue mejor. Francisco García o Hugo Cabrera?... en eso se debate la prensa deportiva dominicana, y dar por saldada la interrogante con un “Hugo jamás ganó 36 millones de dólares que le dio Sacramento Kings a Francisco”… a ese, hay que fusilarlo en el parque Independencia, a las 12:00 del mediodía y sin último deseo.


¡Todo un sainete!

Muñecas de silicona


El hombre usa complementos sexuales desde hace unos dos mil quinientos años. Los antiguos egipcios fabricaban consoladores y los romanos fabricaban velas con forma de pene para autosatisfacerse. En cuanto a las muñecas, articulos de consumo de hoy en dia, primero se utilizaron las fabricadas con tejido de paja, mucho tiempo después llegaron las chicas de plástico, más tarde las de látex, y ahora se desató el reinado de las nuevas e increíbles diosas de silicona.

Desde el centro de marketing de Orient, la fábrica nipona, son categóricos: “muchos de nuestros clientes las prefieren de siliconas porque no hablan y permiten satisfacer todo tipo de fantasías; otros las usan porque temen contraer enfermedades de transmisión sexual”, aseguran.

Desde hace diez años, Japón es el principal productor de muñecas sexuales hechas a imagen y semejanza de mujeres reales. A pesar del extraordinariamente alto costo de sus productos (5,700 dólares o más), algunas empresas fabricantes de muñecas inflables, como, por ejemplo, Oriental Industries y Doll No Mori, multiplicaron por veinte sus ingresos en los últimos cinco años.

Tal es la aceptación que las “nenas” tuvieron en el mercado, que los nipones ya las apodaron “Dutch wives” (esposas holandesas), en alusión a la similitud estética que las emparentan con sus colegas de carne y hueso, siempre expuestas en las vidrieras de Ámsterdam.

Entre las últimas innovaciones, las nuevas muñecas se pueden armar a gusto del consumidor. Existen cinco tipos de cuerpos diferentes, que van desde los 88 a las 120 libras, de 4’11 a 5’11 de estatura, con cinturas que oscilan entre los 55 y los 66 centímetros, caderas de 86 a 91 centímetros y bustos chicos, medianos o gigantes. La pelvis también es opcional: vello natural o cavado, lacio o enrulado, rubio o moreno... y aunque tienen sus envases, que son tan grandes como un ataúd, también “cobran vida”: tienen sensores en los pechos que responden a estímulos verbales, son capaces de succionar, imitar una respiración agitada y hasta humectarse.

Todas las muñecas son entregadas con: 
- una cabeza

- estuche de transporte/embalaje
- kit de mantenimiento (talco, peine, borlita)
- kit de reparación para los pequeños desgarrones (silicona líquido + endurecedor)
- lencería
- peluca
- vagina extraíble (o realista integrada según opción elegida)
- lubricante
- manual de uso


En nuestros países es mucho más fácil tener una relación casual. En cambio, en el mundo, las sociedades son más solitarias, los hombres viven más solos y tienen más temor al contagio de enfermedades de transmisión sexual. Las ventas de estas “barbies” aumentan, no solo porque todo lo que provenga de países desarrollados nos llama la atención, también podemos reparar en otras razones. A las muñecas no le gustan las joyas, no usan tarjetas de crédito y siempre están dispuestas a todo.

¿Vale la pena la inversión?... al menos, a ellas nunca les duele la cabeza...
La Federación Dominicana de Baloncesto (FEDOMBAL) ha recibido una invitación para efectuar un partido de exhibición en el Madison Square Garden de la ciudad de Nueva York, justo antes del Mundial que se efectuará en España el verano venidero. Como siempre, desde tiempos inmemoriales, la callada es la respuesta.

José José
Lagrimas… el lenguaje mudo de tu pena  / lagrimas… la callada voz de tu tristeza / lagrimas… la expresión mojada de tu alma. Como canción de José José, los días pasan y nada en el firmamento de la selección nacional absoluta.

Señalé la pasada semana que México ya tenía todos sus cabos atados. También el interés de varias naciones europeas de enfrentarse a la escuadra dominicana. Como siempre, jugaremos a tratar de impresionar en el último minuto en un mundo donde no hay espacio a las especulaciones.

Todos nuestros potenciales adversarios están dándole seguimiento a sus jugadores, a los posibles contrarios, a las novedades de los jugadores a integrar los equipos nacionales, a los contactos para batir el cobre de alguna manera. Hasta Finlandia trató de comunicarse con la FEDOMBAL, pero nadie hablaba finés en el Palacio de los Deportes. Aquí nos damos el lujo de estar viviendo, dentro de la actividad, un periodo llamado “la España boba” y así no vamos a llegar a ninguna parte.

Quizás todo este escrito: “iremos a España con la misma plantilla que asistió a Caracas”,
Madison Square Garden
sentenció Yack Michael Martínez y puso los colores: sale Ricardo Greer que pasará a ser asistente y entrará Gerardo Suero.

Después sólo Eduardo Najri, gerente de la selección nacional de baloncesto, declaró “de mal gusto y decepcionante” con respecto a las condicionantes que Martínez a puesto para asistir o no al Mundial de Baloncesto 2014 en España. Aunque exageró un poquito al señalar: “A España vamos a competir, no de paseo; si hay cinco jugadores que tienen que ser cambiados, pues lo vamos a cambiar, lo que queremos es ganar el Mundial”. “Tendrá que aceptar cualquier decisión que tomemos con respecto a la conformación del equipo; los mejores 12 jugadores que estén disponibles son los que conformarán la selección, de eso que no le quepa la menor duda a nadie. Mientras yo sea el gerente de la selección, jugarán los que estén en mejores condiciones, sin importar que haya estado o no en eventos anteriores”.

El efecto de los anuncios pasa rápido y el riesgo de los seguidores se mantiene y se mantendrá en ascuas.

La vida nos enseña la importancia de las acciones oportunas, porque casi todos los grandes males comienzan por un pequeño deterioro, salvo raras excepciones. Ese gran bache en la calle o en la carretera, en el cual cabe un carro completo, se inició por un minúsculo huequito, al que nadie se le ocurrió tapar y el banco destartalado del parque empezó por un brazo arrancado.
La parada llena de escritos de lápiz tuvo su génesis en un mensaje aislado e inescrupuloso hecho con grafito y la pared recién pintada, copada de huellas de zapatos, arrancó su historia con alguien que puso sus pies sucios y se recostó sin mirar trascendencia.

Si obramos tan desfasadamente lo que podía ser un simple mantenimiento, lo convertimos en una reconstrucción completa necesitada de muchos recursos. Al pupitre se le cayó un tornillo y lo dejamos hasta hacerlo una pieza inservible.

Por ello, las muñecas de silicona también traen su kit de mantenimiento, para la reparación de desgarrones y la permanencia de la inversión.

Quizás terminemos como aquella escena de “Cinco horas con Mario” de Miguel Delibes, donde reconstruye el largo soliloquio que una mujer recita junto al cuerpo de su marido apenas fallecido, el Mario que da nombre al título. Toda una vida de desencuentros, de mutuas incomprensiones, de silencios, de frustraciones y de módicas alegrías desfilarán entonces en esa suerte de monólogo en plena madrugada de despedida.

Delibes, recién fallecido, alumbró, entre muchos otros, un libro no muy voluminoso, pero decididamente entrañable, “Señora de rojo sobre fondo gris”. A través de la historia del protagonista, un pintor, y Ana, la novela recrea, en realidad, la relación entre el propio Delibes y Angeles, su mujer y madre de sus siete hijos, y cuya muerte, con apenas 48 años, sumió al escritor en una melancolía y una tristeza que lo acompañarían las más de tres décadas de vida que aún tendría por delante. De Angeles solía decir que era su equilibrio, la mejor mitad de sí mismo. ”Estábamos juntos y era suficiente. Cuando ella se fue todavía lo vi más claro: aquellas sobremesas sin palabras, aquellas miradas sin proyecto, sin esperar grandes cosas de la vida, eran sencillamente la felicidad”, escribió en Señora... e hizo suya la definición que de Angeles una vez dio su amigo Julián Marías: “una mujer cuya sola presencia aligeraba la pesadumbre de vivir”. ¿Es posible pedir epitafio más hermoso?

Mientras terminaba estas líneas, me enteré del fallecimiento de la mamá de Juan Alberto Espil, el más fino tirador que ojos humanos hayan visto; así de simple. A Juancito lo conocí en su Bahía Blanca natal en 1990, donde jugaba para el Club Estudiantes; jugó también para GEPU de San Luis y Atenas de Córdoba. Saltó el charco y militó en el TAU Baskonia, Juventut de Badalona, Roma (Italia), Manresa, Bilbao, hasta regresar a Argentina para cerrar con Boca Juniors, Obras Sanitarias y de regreso a Estudiantes. Se retiró al final de la campaña 2011-12.

Juan Espil
Fue el mejor anotador argentino en los Mundiales de 1994 (Toronto) y 1998 (Grecia), además participó en los Juegos Olímpicos de 1996. Estando en San Juan, Puerto Rico, donde Argentina terminó con la medalla de bronce del Pre-Olímpico de 1993, a la salida del hotel para la cancha recibió una llamada donde se le participaba la muerte de su papá; se disputaba el pase a la final… como aún no había la liberación de la comunicaciones, como en la actualidad, fue difícil comunicarse a Bahía Blanca. Todo fue una broma de mal gusto para tratar de afectar su estado anímico. En el camino se recompuso, para ser la estrella ofensiva de ese equipo que manejaba Walter Garrone y donde Rubén Magnano estaba de asistente. Así de grande es el bahiense.

Como les fascina decir a los dominicanos, lo describiré plenamente: “ese es de los míos; mi amigo personal”.





domingo, 20 de octubre de 2013

¿Dónde estas corazón?


Conocí el Huapango de José Pablo Moncayo (1912-1958), pianista, percusionista, compositor, maestro de música y director de orquesta mexicano, para convertirla en una de mis piezas favoritas. La he escuchado en diferentes versiones y cada vez me agrada más; por lo menos una vez a la semana permito que mi alma viaje a lugares recónditos junto a esos bellos paisajes recreados en la excelsa partitura.

Moncayo
Muy temprano mi mamá empezó a enseñarme a escuchar la música a la que muchos llaman clásica, quizás sería mejor señalarla como aquellas cadencias cultas, académicas o simplemente como las que logran trascender el tiempo y permanecen en el gusto de las mayorías pese a las imposiciones de la moda. Mi médico de cabecera, Franklin Betances Vargas, fallecido en agosto de este año 2013, me presentaba como el melómano más grande que tenía República Dominicana, sólo para hacerme sonrojar. Nunca le agradecí esos elogios, inmerecidos.

Huapango es una corrupción de la palabra fandango, o un término proveniente de la lengua náhuatl que quiere decir “lugar donde se coloca la madera”, o sea, la tarima para el baile, o es una contracción de las palabras Huasteca y Pango, siendo éste el nombre alternativo del río Pánuco, o es el equivalente del llamado son jarocho, o un aire popular en décimas rimadas, o un tipo de canción popular mexicana que existe en dos variedades, el huapango jarocho y el huapango ranchero. En realidad, y aunque el asunto parezca muy complejo, todas estas definiciones tienen algo de útil para acercarnos a la esencia del huapango. Y este acercamiento no deja de ser interesante, necesario quizás, si consideramos que el Huapango de Moncayo es la obra musical más notoria de México. Es llamado también el segundo Himno Nacional Mexicano.

Para esta espléndida, brillante, siempre luminosa obra orquestal, Moncayo elaboró y transformó los temas de tres huapangos alvaradeños, citados en una nota por el musicólogo Otto Mayer-Serra: El Siquisirí, El Balajú y El Gavilancito.
Gustavo Ayon

El Huapango de Moncayo también recrea el México de los buñuelos con miel, de las torrejas con piloncillo, del agua de chia, el del café del piloncillo, la capirotada, los tejocotes en miel, el champurrado de chocolate, del pan del muerto, el de los niños jugando en las calles, la fiesta popular del día de los muertos, las charrerías, las pastorelas. Es una versión de sol, de unión, de trabajo, de lucha positiva, de pueblos risueños; de mexicanidad. Moncayo junto a Silvestre Revueltas y Carlos Chávez representan los máximos exponentes del arte musical de la nación azteca.

México, invitado a la Copa de las Américas de este 2013, en versión Pre-Mundial de Baloncesto, resultó el equipo campeón contra todos los pronósticos.

buñuelos con miel
Apenas, un mes y día de aquel memorable triunfo los mexicanos ya han armado todo el andamiaje para tener un buen desempeño en España el año venidero. Conocen la fecha de su concentración, el lugar donde se reunirán y climatizarán en España, para más detalles lo harán en tierras catalanas, están finalizando los contratos de los partidos previos a la cita mundialista, casi todos con naciones del viejo continente, y marchan organizadamente y decididamente a realizar una gran faena.

Algunos de mis lectores preferirían que estas líneas terminaran aquí. Inclusive mis propios hijos me lo agradecerían. Pero la dinámica del baloncesto me impide poner un punto final. Como me señaló un miembro de la Federación Dominicana de Baloncesto (FEDOMBAL): “cada vez que leo un agriodelimon termino con una acidez increíble. Pero hay que reconocerte que jamás te has equivocado y eso, que no sabes o no quieres mencionar todo lo que pasa ahí adentro”.

Estar al tanto de lo que están finalizando los mexicanos me hace evocar la propuesta que le sometí en diciembre del año 2009 al entonces presidente de la FEDOMBAL, ingeniero Frank Herasme, y de la que me señaló nunca tuvo conocimiento. Días después, el propio ingeniero Rafael Uribe Vásquez me llama para hablarme de esos ofrecimientos, partidos de exhibición en España, Alemania, Italia y Lituania; recuerdo que me señaló que iba a insistir sobre la correspondencia en el Comité Ejecutivo de entonces, pero que él en lo particular se iba a dedicar exclusivamente al baloncesto femenino.

Para ese entonces estaba en el ambiente todo el sabor amargo que quedó de la no clasificación al Mundial de Turquía (2010) y la desacertada actuación del equipo dominicano dirigido por Julio Toro en la cita de San Juan.

He sabido que España ya planteó un partido de exhibición a República Dominicana en Madrid, que imagino sería un lleno completo y que los franceses, campeones del Euro-Basket también estarían interesados en jugar con los nuestros. El único inconveniente es que esas naciones cierran sus programas mucho antes de que este año se
vaya; a este 2013 le quedan menos de 75 días.

Los españoles creo sólo tienen una fecha más disponible para jugar antes de llegar a servir como anfitriones y quizás aún esperan por nosotros. No me extrañaría que mañana se me dijera que a las oficinas de FEDOMBAL nunca ha llegado invitación alguna. “Argunas veces se pierden las correspondencias”, diría un amigo, productor de un programa de radio, que me envía mensajes apócrifos.

Después de las declaraciones de Yack Michael Martínez a su regreso de Caracas, la selección nacional de baloncesto quedó en un limbo mediático, nadie la menciona y volverá a convertirse en el estío próximo en un asunto de temporada. El reality show del verano dominicano, donde todos aplauden como borregos y pocos nos colocamos en la acera de enfrente.

No me extrañaría que lleguemos a España sin partidos de exhibición, sin juegos de fogueo, o sólo habiendo jugado con universidades que se encuentren en el país, generalmente sin mucho oficio. Con las mismas mediocridades de años recientes. Hace tiempo que FEDOMBAL debió tener su trompo armado, pero como he señalado antes, importa más la búsqueda de los satélites de Uribe Vásquez que el interés de la nación dominicana.

Para terminar les contaré que Uribe Vásquez se mandó a hacer una encuesta donde se muestra que su imagen está en pleno apogeo, que cada vez tiene más aceptación y que ya está listo para tomar nada más y nada menos que el Comité Olímpico Dominicano (COD); que su permanencia en la FEDOMBAL deberá concluir en el mismo instante que deje de respirar, dentro de muchos años, cuando ya ande con bastón y bombita; y que nada ni nadie lo calentará con los medios. Hace rato que tiene la bendición de Franklin Mirabal y Leonardo de Jesús Heredia Castillo (Leo Corporan).

Después de publicar este texto me buscaré algún libro del brasileño Sérgio Sant’Anna para perderme entre la inconsistencia de la razón y el mandato de los hechos; de las relaciones que navegan entre el deseo y la perversión pero que terminan en trampas; de los personajes construidos a partir de la memoria de los mismos, que explican sus pulsiones y sus perversiones desde el autoanálisis; textos de antihéroes que son transgresores natos, que viven al limite.

Sin lugar a dudas, interpelado en cada letra, me cuestiono enormemente.



sábado, 19 de octubre de 2013

La vida en el infierno de Victor Page, el mejor socio de Iverson en Georgetown

Por considerarlo de interés, reproduzco el siguiente texto de Igor Minteguia, originalmente publicado en Solobasket.com, con el atractivo de que sirva de ejemplo a las generaciones del baloncesto dominicano que van subiendo y sólo atinan a copiar los estereotipos que les llevan a olvidarse de estudios, familia, civismo, moralidad.
Victor Page, asistió a Georgetown, una universidad católica de enorme tradición académica y deportiva, pero las carencias lo hicieron tomar decisiones equivocadas.


Por Igor Minteguia


·                                 Ha sido encarcelado 9 veces desde 2010, acusado de 33 delitos.
·                                 Acaba de ser condenado a 10 años de prisión


Esta es una historia más de bajada a los infiernos de un jugado que apuntaba alto. Un cúmulo de terribles circunstancias han llevado a que otro juguete roto más del basket acaba en el peor de los agujeros del que será muy complicado salir. 

Nuestro protagonista es Victor Page. Nacido en 1975, este ex jugador de 1.90 (6'03 de estatura) de estatura era a mediados de los noventa una promesa de gran jugador que conformaba el backcourt de Georgetown con el ya mítico Allen Iverson.

En su año freshman (1995-96), firmaría 12.5 puntos por encuentro como lugarteniente de Iverson y los Hoyas conquistarían la Big East y alcanzaría nada menos que el Elite8, quedándose a las puertas de la Final Four de la NCAA. Una temporada después, ya sin Allen, Page se convertiría en el líder de su equipo, llegando hasta nada menos que los 22.7 puntos por actuación (undécima mejor media de todo el país). 

Tras solo dos años en Georgetown (bajo la tutela del experimentado capataz John Thompson), Page (zurdo de impresionantes habilidades) no se pudo resistir a la tentación y, tal como hizo Iverson un año antes, dejaría la NCAA en 1997 para intentar dar el salto a la NBA. Le aconsejaron continuar en Georgetown, pero la necesidad de ayudar económicamente a su familia pesó más en su decisión.

Se crió en uno de los peores barrios de Washington DC, vio como perdía a su padre por culpa de las drogas e
Pague número 44
incluso nuestro protagonista tuvo sus escarceos con la cocaína en su época de high school. Tras una dura lucha contra su entorno y salvar muchos obstáculos, para Page era el momento de empezar a recoger los frutos de su esfuerzo.

Sin embargo, no tendría la suerte de su predecesor. Las peores previsiones se cumplieron y no fue drafteado. Su conducta errática, de la que dio buena muestra en las pruebas previas al draft, creaba muchas dudas entre las franquicias de la NBA. A pesar de participar en el training camp de los Wolves, se tendría que conformar con enrolarse en los Sioux Falls Skyforce de la CBA. En ese equipo permanecería hasta 2001, dejando para el recuerdo la calificación de mejor jugador de la historia de los Skyforce y siendo su camiseta retirada. 

Su vida cambiaría de arriba a abajo en 2003. En un tiroteo en el conflictivo barrio de Farm Community de Washington DC, en el que se crió y donde perdió a su padre por culpa de una sobredosis, sería alcanzado por una bala que le haría perder por completo su ojo derecho. Esta circunstancia le obligaría a dejar el basket antes de cumplir la treintena. 

John Thompson con Patrick Ewing
Tras años sin saber nada de Page, en 2009 conocíamos a través de un reportaje televisivo como Victor Page, con un parche en su ojo derecho, hablaba sobre la posibilidad de que su carrera pudiera relanzarse. Se refería incluso al objetivo de poder debutar, por fin, en la NBA. Su agente, el ex ACB Jerrod Mustaf, le intentó guiarle hacia la luz. Su intención era que dejara sus sueños de volver al basket profesional y recondujese su carrera hacía las charlas motivacionales en las que podría dar testimonio de su dura vida y de como poder superar las trabas que te pone delante la vida. Pero no lo consiguió. Page insistía en el basket.

Ese intento de volver a relanzar su carrera, de sacar la cabeza del agujero, no tuvo éxito y fue la antesala de la caída al abismo de Page. Una bajada a los infiernos que el Washington ha relatado con todo lujo de detalles. 

Desde 2010, Victor Page ha visitado la cárcel nada menos que en 9 ocasiones siendo acusado de
Iverson
hasta 33 diferentes cargos en el Estado de Maryland (incluyendo robo, posesión de marihuana, asaltos sexuales...), sumando hasta 700 días en prisión. Y parece que en los próximos años sumará muchos más días privado de libertad. El ex jugador acaba de ser condenado a nada menos que 10 años de cárcel por asalto en segundo grado. El golpe definitivo para otro juguete roto, una víctima de su entorno. 


domingo, 13 de octubre de 2013

La ausencia de El Teacher


Busqué los borradores que aún no he publicado y me encontré con más de una docena. Habrá que irlos subiendo en sazón. Después, me fui al muro de Facebook de Ramón Rodríguez, a quien todos conocemos por El Teacher, presidente de la Asociación de Baloncesto del Distrito Nacional (ABADINA) y llegué hasta el 26 de junio del presente año; por lo menos desde esa fecha a esta parte no ha subido ningún comentario. Semanas atrás vi unos trabajos que habían sido publicados en las páginas del vespertino El Nacional, pero no me llamaron la atención.

Pero El Teacher se ha quitado de toda la vida que regularmente hacía. De momento, ha abandonado la ABADINA y no se tienen noticias de el. Lo último que se supo es que tomó el ferry para unas vacaciones en Puerto Rico.

En el país dejó más cabos sueltos de los aconsejablemente prudentes y eso ha dado motivo a comentarios muy desafortunados.

Pese a mis enormes diferencias con Rodríguez, dejaré establecido que no creo todo lo que de él se dice. Hay demasiada inquina entre sus cuestionadores y mucho veneno que se vierte contra su figura. Entonces, se abren las interrogantes de siempre, la calidad moral de los que alzan la voz en contra, la búsqueda de estos por escalar posiciones, las mentiras ocultas en el accionar de algunos, inclusive de aquellos que sin capacidad también se inmiscuyen en los espacios de comunicación.


Todo dirigente de clubes del Distrito Nacional busca llegar a la ABADINA, todos sin excepción, para luego terminar aplastados por la institución. Apenas se llega a la posición, mucho más si es a la de presidente de la misma, llueven los improperios, las acusaciones veladas, las objeciones, las impugnaciones, el jugar con dignidades ajenas, las advertencias; así todo el mundo cree que es una tacita de plata, que por demás, evacua en cada sorbo de café una monedita del mismo metal.

Que Rodríguez haya sido tan descarado que se atrevió a montar un evento superior sin todos los cabos atados, es una cosa; que haya llegado a la institución sin un programa ni una hoja de propósitos, es otra; que se haya rodeado de toda la crápula del deporte capitalino y escogiera unos asesores que ya no dan para más, es también otra vaina; pero que sea un vulgar ladrón como se quiera decir, así no; eso no lo creo a menos que se le declare culpable en los tribunales de la república.

La única vez que Rodríguez levantó una observación sobre mis artículos fue por una discrepancia ortografía; después calló ante todas mis observaciones. Sabía que tenía mis ojos sobre sus espaldas, pero sólo encontró ese resquicio para hacerme una llamada de atención. Todo los que lo conocemos sabemos que tiene sobradas horas de lecturas y le gusta el quehacer cultural.

Esa misma discrepancia fue tomada como punta de lanza por el entrenador Melvyn López, principal asesor en aspectos técnicos del presidente de la Federación Dominicana de Baloncesto (FEDOMBAL) y presidente del Colegio Dominicano de Entrenadores de Baloncesto, que de asuntos de inspiración humana, letras y bellas artes no sabe ni un cuesco. Un carajo que debería besar el suelo que yo piso, y él sabe perfectamente porque. Pero esos mismos desafueros me han servido para cuestionarme muy íntimamente si el señor López, está en condiciones de trazar pautas al baloncesto dominicano… ¿a dónde se fue El Señor de los Anillos?... FEDOMBAL anda cuestionando a un chico dominicano que funge como agente de jugadores… ¿sabía FEDOMBAL de la relación de López y ese joven?... ¿sabe FEDOOMBAL que ese mismo muchacho maneja la página electrónica de López?

Hablar graciosamente de 8 (ocho) millones de pesos es algo que mueve a la risa en un evento de capa caída, cuestionado hasta los tuétanos por la Federación Dominicana de Baloncesto (FEDOMBAL), que de paso, ha hecho todos los esfuerzos por desmembrar este clásico del deporte capitalino desde hace más de 20 años, para quedarse la entidad con el mismo y procurarse los pocos centavos que produce. Cada día los ataques al Superior del Distrito Nacional por parte de la FEDOMBAL son más abruptos, punzantes, intolerantes, ácidos, desorejados, hirientes, torcidos. Tampoco la actual administración ha desistido en este empeño, seducida por cantos de sirenas.

A Rodríguez se le vio de brazo con mucha gente, le sobraba empeño y ganas de sentirse importante, pero aún así no hizo un buen desempeño y para peor abandonó las categorías formativas y por completo la rama femenina, al punto de entregarle el Superior de damas a Roberto Ramírez, o como realmente se llame, el mismo de la Federación Dominicana de Clubes (FEDOCLUBES), sobre quien no abundaré, pero todo el mundo sabe mi posición sobre este nefasto, aciago, lúgubre, desdichado, trágico, calamitoso, deplorable, sombrío, y luctuoso personaje… lo dejaré hasta ahí para ser considerado con su figura.

Ninguno de los remedios que intentó, con sus famosos y ya seniles asesores, Alejandro Asmar Sánchez (Chito) y Leonardo de Jesús Heredia Castillo (Leo Corporan), ha logrado sacar del pantano a la entidad que con tanto empeño buscó presidir. En algún momento de Feel like going home alguien menciona un proverbio africano: “las raíces del árbol no dan sombra”. Es misterioso su sentido, aunque podríamos conjeturar que se refiere a que no conocemos las profundidades y los orígenes de aquello que nos satisface. Esta frase el amigo Rodríguez la entenderá perfectamente; con su administración ha pasado lo mismo, nos dejó a la espera de un verdadero relanzamiento del baloncesto capitalino.

Más de uno de los propios miembros de ABADINA me han ofrecido datos para desprestigiar el nombre de El Teacher, los mismos que aspiran a posicionarse dentro de la misma para hacer las mismas indelicadezas de muchos de los antecesores.

Los últimos datos disponibles arrojan una cosecha muy magra para la necesidad de sumar recursos, y la entidad no ha sido capaz de crear estrategias firmes para superar las crisis; desde hace más de tres lustros repiten la misma dosis, dedicarle el Superior a los políticos de ocasión para que estos desembolsen algún dinero; estos también han visto la necesidad de retener sus propias porciones del pastel.

ABADINA padece una renguera insostenible. La historia es apenas una muestra del embrollo y de las luchas feroces que hace rato abundan entre los que deberían hacer baloncesto en la ciudad capital.

Los directivos de los clubes han terminado convertidos en una orquesta que desafina en toda las líneas, aunque el reparto de culpas debería incluir o comenzar por quienes los han puesto y mantienen en ese lugar. Siempre lo mismo, aspiraciones sin formación sólida.

La repentina salida de la actividad de El Teacher, los pormenores de su viaje al exterior y los detalles de los
manejos administrativos en ABADINA, vuelven a recordarnos que el baloncesto dominicano es esencialmente dramático.

Nos enfrenta, otra vez, con opciones cruciales que, con toda la historia a cuestas, despliega un abanico de especulaciones tropicales, suspicacias y aprovechamientos. La concentración del poder y la subestimación de las instituciones, aún cuando formalmente se cumplan sus prescripciones; acrecienta esa sensación de equilibrio en una cuerda floja.

Rodríguez ya ha sido crucificado por FEDOMBAL y los suyos: la “traición” ha sido perpetrada y el daño al baloncesto busca destruir el mito de su invulnerabilidad; en el camino sólo Yack Michael Martínez, quizás sin proponérselo, ha sido su más ferviente defensor. Señaló a su regreso de Caracas, hace poco más de un mes, que el verdadero baloncesto dominicano, el de más nivel estaba concentrado en el Superior del Distrito Nacional. El Teacher ahora tiene una duda cruel: cuales lealtades mantiene. Ya conoció que sus amigos lo habían abandonado.

Todo el mundo especula si Rodríguez mantiene el mismo poder de fuego que logró meses atrás.

Para saberlo, tiene que dar la cara y convencernos que es así. De lo contrario, sus propios compañeros de aventuras se lo cenaran en los parqueos del Palacio de los Deportes.


jueves, 10 de octubre de 2013

Reminiscencias y Premio Nobel


Siendo muy joven y más inquieto, cuando aún no había salido de las manos de Andrés Sallent Jurgensen, profesor meritísimo y director  de la Escuela de Química de la Universidad Nacional Pedro Henríquez Ureña (UNPHU) alguien me recomendó: “tienes que dedicarte al estudio de las proteínas… ahí está el futuro de la humanidad”. Aquello me pareció tan lejano, tan etéreo, tan intangible, que resultaba más que una quimera; deje pasar la ocasión, me quedé en el campo farmacéutico.

En la UNPHU me encontré con un grupo lleno de afectos, que resulta inmemorable. Además del doctor Sallent recuerdo como profesores a doña Dulce Garrido de Camilo, Kirsis de Pezzotti, Lourdes Asjana, Roberto Rodríguez, y compañeros Mireyita Alou Medina, Rebeca Gómez Jiménez, Luisa Quezada Pérez, Ana María Baco, Quirico Elpidio Pérez, Luis Carbonell, Ramón Antonio Soto, Ramón Sánchez Berliz, Ángel Rodríguez (Titico), Tony Sánchez Coll, Miguel Castellanos (Pichi), José Fernández Bonilla (Tuto); Ivette Bassa, Elizabeth Portalatin… y aunque no fueron mis profesores Ulises Pérez Placido, Consuelo Mejía de Vanderlinder y Jaime Viñas Román.

Años después, el Instituto Dominicano de Tecnología (INDOTEC, hoy convertido en Instituto de Innovación en Biotecnología), donde laboraba el entrañable Ángel Iván Brea Jiménez, presentó un curso sobre biotecnología impartido por un mexicano. Aquellas exposiciones nos dejaron a todos boquiabiertos. El expositor era brillante, calzaba al dedillo con los nuevos procesos que se abrían al mundo, pero nos dejó claramente establecido que la tecnología es como un tren que pasa, si usted no toma el primer vagón, se estará quedando atrás.

Esa vez me llamó la atención una exposición sobre la producción de ampicilina, antibiótico de moda esa vez y aún muy usado, algunas veces de manera irresponsable. Acontecía que la disponibilidad de esta materia prima cambiaba según la época del año; había temporadas en que duplicaba su precio inmisericordemente. Uno de los íntimos amigos de mi padre era el mayor importador de esa substancia farmacéutica.

Era también la época en que empezaron a ser desmontados los ingenios azucareros (nada más triste y desolador que el desmonte de un ingenio azucarero); los mares de caña que echaban sus olas en las interminables llanuras, inmensas en el naciente prado oriental, surcadas por las líneas de los ferrocarriles, en que a cada rato se veían los blancos y alargados penachos de las locomotoras, que iban y venían, por ríos que plateaba el sol que caía y así, todo orlado, por los bosques que se perdían en el horizonte. El kilogramo de azúcar estaba a ocho (8) centavos de dólar en los mercados internacionales y la ampicilina, según la estación, variaba entre 35 y 65 dólares el kilogramo.

Aprendimos que con 5 (cinco) kilogramos de azúcar se producía un kilo de antibiótico, con la cepa de algo tan común como E. coli. Creo que aquella cepa era la 312 según los parámetros de la Administración de Alimentos y Drogas (FDA, por sus siglas en inglés).

E. coli es la abreviatura de Escherichia coli, un tipo de bacteria que vive en el intestino. La mayoría de las E. coli son inofensivas. Sin embargo, algunos tipos pueden producir enfermedades y causar diarrea. Es más, una variedad denominada 0157:H7, causa una diarrea hemorrágica, y a veces puede provocar insuficiencia renal e incluso la muerte, especialmente en niños y en adultos con sistemas inmunológicos debilitados. En 1982 se identificó el primer brote de E. coli O157:H7  por comer carne de hamburguesas contaminadas con la bacteria. Desde entonces, las epidemias de E. coli O157:H7  han sido asociadas con otros tipos de alimentos, tales como espinacas, lechuga, repollo y, ahora, también pepino. Se pueden adquirir infecciones por E. coli al consumir alimentos que contienen la bacteria. Para ayudar a evitar la intoxicación por alimentos y prevenir infecciones, es preciso manipular la comida con seguridad, cocinar bien las carnes a alta temperatura, lavar las frutas y verduras antes de comerlas o cocinarlas, y evitar la leche sin pasteurizar. También se puede adquirir la infección al tragar agua en una piscina contaminada con desechos humanos. La mayoría de los casos de infección por E. coli mejoran espontáneamente en 5 a 10 días.

Había un solo problemas para implementar esa industria en República Dominicana. El proceso que dilataba varias semanas no podía quedar sin servicio de energía eléctrica, necesaria para mover las aspas de los fermentadores, por un lapso no mayor de 8 (ocho) segundos. Ninguna planta en el país, antes o ahora, entra en tan breve tiempo.

En un país donde apenas en el año 2012 se demostró que uno de sus principales soportes calóricos, algo que los dominicanos erróneamente llamamos salami, está saturado de E. coli no hubiera sido difícil el manejo de una planta de producción de antibióticos.

El anuncio de los Premios Nobel para este 2013 arrancó premiando a tres investigadores que lograron desentrañar un proceso tan complejo como básico para la vida: el transporte que se produce dentro de las células, un hallazgo clave para poder entender las causas de enfermedades tan disímiles como la diabetes, el Alzheimer y la fibrosis quística. El Nobel de Medicina lo recibieron los estadounidenses Randy Schekman y James Rothman, junto con el alemán Thomas Südhof. Los tres investigan en Estados Unidos y, si bien realizaron sus estudios por separado, “cuando se encontraron comprobaron que investigaban los mismos mecanismos, las mismas proteínas y el mismo resultado final. Hay que imaginarse el descubrimiento como un proceso. Comenzó en 1980 y finalizó en algún momento de 2002”, explicó Jan Andersson, miembro del Comité Nobel de Estocolmo.

¿Qué es el transporte celular?... es el mecanismo mediante el cual cada célula del organismo conduce constantemente una cantidad de moléculas al lugar preciso. Cada célula es una fábrica que produce y exporta moléculas. Tiene que suministrar energía, “empaquetar” proteínas, eliminar desechos. Los errores que se presenten en este proceso pueden causar diversas enfermedades hereditarias, trastornos inmunológicos y problemas metabólicos, como por ejemplo la diabetes. Los tres investigadores explicaron que las células completan este proceso a través de pequeñas “burbujas” llamadas vesículas, que actúan como un transporte de carga intracelular. Sus trabajos ayudan a explicar de qué modo esta carga es entregada al lugar adecuado en el momento justo.

“Imaginen a centenares de miles de personas circulando por cientos de miles de calles. ¿Cómo van a hallar el camino correcto? ¿Dónde parará el micro para abrir sus puertas y dejar salir a pasajeros? Existen problemas similares en la célula”, graficó el secretario del Comité Nobel, Goran Hansson. Un ser humano está formado por entre 10 y 100 billones de células, que tienen miles de tareas diferentes porque, por ejemplo, una célula renal no es comparable con una neurona o un espermatozoide.

Con semejante complejidad, parece increíble que el transporte de sustancias funcione de manera tan precisa. Y cada uno de los investigadores premiados hizo su aporte para desentrañarlo.


Usando levaduras, Schekman identificó diferentes genes sin los cuales el transporte en las células terminaría en un caos. Rothman descubrió en células de mamíferos que pequeños sacos denominados vesículas pueden transportar diferentes moléculas y que existen proteínas especiales sobre ellas y que encajan en determinados lugares de la membrana celular, como si fuera un cierre, para que sólo al dar en el lugar exacto liberen el contenido. Las instrucciones para ese tipo de marcaciones estaban en los genes detectados por Schekman. Y, por último, Südhof investigó la forma de comunicación de las neuronas y vio que las sustancias mensajeras en el cerebro, los neurotransmisores, también son transportadas en vesículas.
Las fallas en este sistema pueden determinar diversas enfermedades.

En la diabetes, por citar un caso, hay errores en el proceso de liberación en la sangre de la insulina. Por ejemplo, la insulina es fabricada y luego liberada en la sangre, y hay señales químicas llamadas neurotransmisores que son enviadas de un nervio al otro. En el Mal de Alzheimer, fibrosis quística o tétanos, también hay fallas en ese sistema. Ya varios enfoques terapéuticos para el tratamiento de estas patologías se basan en el trabajo de este trío de investigadores. Hay intentos de dominar las infecciones de VIH/Sida con sustancias que puedan inhibir determinadas fusiones en las membranas, y médicos dedicados al cáncer investigan la importancia de la comunicación entre células para el crecimiento tumoral. En cuanto a la diabetes, uno de los posibles objetivos es el control de la secreción de insulina.

Así, gracias a sus hallazgos, se pudieron comprender procesos como la liberación de insulina en la sangre, la comunicación entre células nerviosas en el cerebro y la entrada de virus para infectar células. “La gente común puede beneficiarse gracias a estas investigaciones fundamentales sobre el modo en que funcionan las células, que tiene consecuencias inesperadas y espectaculares sobre sus vidas”, destacó Schekman, profesor de la Universidad de California en Berkeley. Y fue optimista en sus anticipos y posibles aplicaciones: “La ciencia avanzará. Somos entusiastas por lo que hacemos en nuestro laboratorio”.

Rothman
James E. Rothman
 (nació en Haverhill el 3 de noviembre de 1950), hijo de un obrero metalúrgico, es biomédico e investigador científico norteamericano. Obtuvo una licenciatura de Yale University en 1971. Inicialmente se matriculó en Harvard University para estudiar medicina, obtuvo un doctorado en Bioquímica en 1976. Fue luego, hasta 1978, becario posdoctoral en el Instituto Tecnológico de Massachusetts (MIT).

Rotman comenzó su carrera en el departamento de bioquímica de la Universidad de Stanford en 1978; en 1984 fue nombrado allí como responsable de una cátedra. Estuvo vinculado como profesor de biología molecular a la Universidad de Princeton entre 1988 y 1991 y posteriormente fue uno de los fundadores del departamento de bioquímica y biofísica celular del centro médico para el cáncer Sloan-Kettering, que luego llegaría a dirigir. En 2004 fue nombrado en la Universidad de Columbia como profesor de fisiología y biofísica celular y director del Centro de Bioquímica. En 2008 se convirtió en profesor de Ciencias Biomédicas de la Universidad de Yale, actualmente dirige allí esa cátedra y es el jefe del departamento de Biología Celular.

Rothman en el año 2002 ganó el Premio Lasker de investigación médica básica. En 2010 recibió el premio Kavli de Neurociencia junto a Richard Scheller y Thomas C. Südhof por "el descubrimiento de las bases moleculares de la liberación de neurotransmisores". Rothman en particular, descubrió cómo funciona una proteína que permite que las vesículas celulares se fusionen con sus objetivos, para luego lograr la transferencia de la carga. Las diferentes proteínas se unen solamente en combinaciones específicas, asegurando así que la carga se entregue a una ubicación precisa.

Randy Schekman (Saint Paul, Minnesota, Estados Unidos; 30 de diciembre de 1948) es biólogo celular e
Schekman
investigador científico estadounidense. Hijo de inmigrantes alemanes, pasó sus primeros años en la ciudad de Saint Paul, donde ejerció diversos oficios para pagar sus estudios. Realizo un pregrado en biología en el campus de Truckee (Estados Unidos) de la Universidad de California. Posteriormente un doctorado de la Universidad de Stanford, institución en la que también realizó una tesis posdoctoral sobre la duplicación del ADN y actualmente es profesor de la Universidad de Berkeley. Desde el 1992 es miembro vitalicio de la Academia Nacional de Ciencias de Estados Unidos.


Thomas C. Südhof (Gotinga, Alemania; 22 de diciembre de 1955) es biólogo, neurólogo e investigador científico. Fue doctorado en la Universidad de Harvard y discípulo de los ganadores del premio Nobel de Medicina en 1985 Michael Stuart Brown y Joseph Leonard Goldstein, cuyo trabajo sobre la mecánica de transmisión de los fluidos celulares serían el punto de partido de su tesis posdoctoral. Actualmente es profesor de la Universidad de Stanford.
Sudhof