Rondan diablos come candela

Hay cosas que no entiendo, pero además de no concebirlas ciertamente me causan escozor. Rescoldo, quemazón, y resentimiento. La República Dominicana tiene un equipo participando en un Mundial sub-17 y la Federación Dominicana de Baloncesto (FEDOMBAL) no ha dicho ni una sola palabra. Como si no existiera. Las competencias transcontinentales no han sido nuestra especialidad, no pertenecemos a esa elite por falta de trabajo, nos cuesta mucho estar presentes, pero el azar y la baja en la calidad técnica en nuestra área de competencia nos permitieron estar en tres en estos últimos años.

Justin Minaya

¿Contará la historia, versión FEDOMBAL, que solo estuvimos en el Mundial de España en el 2014 de selección absolutas y en el Mundial sub-19 de Grecia?

Acéptese o no la selección sub-17 que está en España es parte de todo ese cuerpo que se llama baloncesto dominicano. Todo el mundo en su sano juicio sabía que no había muchas expectativas, pero tampoco se hicieron las labores de manera honesta para asistir con todas las de la ley. Eso si, muchos campamentillos de poca monta para el beneficio de esa versión corrupta y distorsionada del baloncesto que se hace llamar “la nueva era”.

Ninguna argucia de esta gente  me hace perder el sueño. Cada día se pretende sumergirnos en un mar de mentiras y todo se muestra en un mar calmo, sin brisas, sin nubes, que asusta. Interpretaciones deformadas que usan desde oficinas en el Palacio de los Deportes y tienen bocinas repetidoras en todos los medios.

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Correr a España con un equipo a las ordenes de Juan Matos, también conocido por el mote de Juancito, era anticipar el fracaso. Todos conocemos la cadena de infortunios que han vivido los equipos que se le han entregado a este caballero. Esta vez no sería la excepción. Dos derrotas por más de 100 puntos en las jóvenes femeninas, deberían prender las alarmas, pero su único merito es ser quien le carga los bártulos a José Mercedes Del Rosario, también conocido por el mote de Maita, segundo al mando en el Colegio Dominicano de Entrenadores de Baloncesto (CODEBAL).

Rowan Barrett (hijo)

Merecía una oportunidad Juan Pablo Brito que ya estuvo con este equipo en el Panamericano del año pasado efectuado en la ciudad argentina de Bahía Blanca.

República Dominicana cayó en sus tres compromisos en la fase regular, Bosnia (84-59), Corea del Sur (77-71) y Francia (78-48). Por veleidades de esta justa está aún en carrera, y deberá enfrentar a Canadá en su próximo compromiso, dentro de la ronda de 16.

En las semifinales del evento en Bahía Blanca los canadienses de llevaron a los dominicanos con un contundente 95-49, finalmente el equipo criollo perdió la presea de bronce a manos de los argentinos con pizarra de 74-59. El paso de Canadá en Zaragoza ha sido más que adecuado, vencieron a Australia (81-78), continuaron derrotando a Finlandia (92-68) y le propinaron un revés a China (105-54), con la misma base de hace un año.

Ningún equipo le ha marcado 80 puntos a los canadienses, República Dominicana sólo ha podido encestar 178 enteros para una media de 59.3. ¿Con qué recursos afrontará Matos el choque de este martes?... ¿cómo explica los cambios en la selección dominicana?... ¿por qué quedaron fuera los nombres de Lisandro Berroa de San Pedro de Macorís, Erick Valdez de San Cristóbal y Luis Herrera de Puerto Plata?

Tres de los ingresos dominicanos han ido a pasear a España: John Vargas apenas ha ingresado 9 minutos, no ha marcado como tampoco se la llevado un solo rebote pese a sus 6’09 de estatura; Jeffrey Hernández de los Delfines del Mirador ha marcado 2 puntos en 20 minutos de juego; e Ismael Valdez lleva solo 2 puntos anotados en 20 minutos de juego, 3 rebotes con 6’09 de estatura.

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Selección dominicana

¿Asociación de cómplices alrededor de FEDOMBAL?

Esta llamada “la nueva era” cae irremediablemente hacia la descomposición a velocidad sorprendente; como hemos repetido por la falta de trabajo honesto, por el interés hacia lo mercurial de directivos y entrenadores y ahora por los malos resultados. Hará más que la medallita del Centro-Basket de Panamá para explicar esas falencias. Muchos de los que antes no se atrevían están desempolvando papeles antes los hechos sombríos que ha tejido la administración de Rafael Fernando Uribe Vásquez, también conocido por el mote de Rafelin, antes relegados a cajones que se han llenado de polvo.

Es aún temprano para saber si la sociedad del baloncesto dominicano, donde existen muchos cobardes, empujará y presionará contra una impunidad que ha dejado de ser sellada. Ya hay muchos pensando en las oficinas del Palacio de los Deportes.

Uribe Vásquez le está haciendo un daño terrible al baloncesto, empezando por la renovación de las asociaciones provinciales, manejando a los entrenadores, amordazando a árbitros y anotadores, y tratando de erigirse en manager de jugadores y además crear una mostrenca asociación de jugadores, manejada a su antojo, que jamás ha emprendido una causa y que como cabeza tiene a uno de sus tantos títeres. 

Hace falta una nueva FEDOMBAL que necesariamente tire piedras hacia atrás, sin contemplaciones. Ello se hace urgente. El final de Rafelin será un infierno, entre otras razones porque hay más y más de sus acolititos que ya están buscando saltar de la nave y poniendo a la vista de todos la existencia de un sistema que no le interesa el baloncesto y está diseñado para la corrupción a gran escala dentro de la actividad. El mismo Rafelin que en sus inicios trató de mostrarse como una alternativa para recuperar la credibilidad de la disciplina mostrando una versión saneada de la dilatada administración de Frank Herasme como eje del proceso.

Esa mancha negra y maloliente tiñe a todos los que están cerca. Ya sabe que no le alcanzará esta gestión para recomponerse, porque de perros hueveros hablamos.

¿Sacará mañana las uñas Juancito frente a los canadienses?... lo único seguro es que Uribe Vásquez estará comiéndose las suyas donde quiera que se encuentre.

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