Luces, cámaras, CERTV

Abril 06 del 2022

Dos lagrimas estuvieron a punto de rodar por mis mejillas después de leer: “Iván Ruiz un creativo tímido que muchos creen es pedante”, de la autoría de Cristina Liriano en El Dia (Jul.02.2018). Ruiz acaba de ser nombrado como director de la Corporación Estatal de Radio y Televisión (CERTV), el canal oficial.

¿Viviremos los tiempos de J. A. Bruno Pimentel (Juan Altagracia Bruno Pimentel) en el canal 4?… era en esa época su indefinición entre lo público y lo privado. A favor del abogado dire que era más culto, más versado, menos jactancioso, a pesar de que nunca fue una figura que seguí. Su sórdido y sequisimo¡hola!… ¿qué tal?, aún resuena en mis oídos, simpáticamente.

Ruiz es una réplica apocopada de Yaqui Nuñez Del Risco, que lanza unos destellos no constantes de conocimiento; no tiene la frescura para estar permanentemente frente a una cámara de televisión, y no llega al gran público por más que lo intente. Que se haya mantenido, lo resumiré con que “ojos vemos, corazones no sabemos”.

Sentarse a mirar El Show del Mediodía, su refugio, hoy denominado también como La Tele Realidad, es una constante decepción. El programa que una vez fue de variedades se convirtió en un espacio radial televisado. De los colaboradores, cuál menos impresentable. 

Hacer causa solo con Abigail Soto (Leónidas Abigail Soto), un corcho con vocación depredadora, figurante en todas las banderías que han ocupado el Palacio Nacional, incluyendo la administración del Instituto Nacional de Estabilización de Precios (INESPRE) en época de Joaquín Amparo Balaguer Ricardo (Ago.22.1994 a Jun.26.1995) es para revisarse muy exhaustivamente, aunque de momento rompieron vínculos.

Ruiz produce también Énfasis, lo vi en una ocasión, entrevistaba a Kiko El Presidente (increíblemente no hay biografía disponible de este artista dominicano en las redes sociales, y su apodo llena todos los espacios), un hombre con historias muy fértiles para llenar varias puestas en escena. Caí de bruces ante la falta de rigor del entrevistador.

Los dominicanos no tenemos muchos motivos para sentarnos frente a los canales de televisión domésticos; un amasijo de programas de opinión interesada, sin parcialidad ni objetividad; todas las telenovelas de cualquier lugar, verdaderos culebrones insulsos, lacrimógenos; variedades sin vuelo ni trama; comedias sin sabor, ni color, inodoras e incoloras. No tocaré personajes porque casi todos producen emesis.

República Dominicana es un país que vive en guerra permanente, un conflicto no bélico de baja pero permanente intensidad, creado por los llamados “poderes fácticos” y los políticos de ocasión. Estos últimos se han traicionado cada vez, todos los días, y apuñalan rastrera y  constantemente a sus connacionales. Nuestra violencia es tan dilatada y prevalente que ocupa nuestro eje vital. 

Tenemos mucho de servilismo y complicidad. La emisora estatal ha callado de manera tan horrenda todas las manifestaciones culturales que nos olvidamos de otras manifestaciones.

CERTV, Radio Televisión Dominicana, Radio Santo Domingo Televisión, La Voz Dominicana, todas esas versiones, han vivido en permanente desconexión con el pueblo dominicano. La radioemisora solo ha servido para privilegiar a los acólitos del momento. La programación más llana, más simple , y también la más absurda de nuestra pésima oferta televisiva.

Abro paréntesis, como decía José Francisco Peña Gómez, el más grande líder de masas de República Dominicana; abro paréntesis para preguntar por la brevísima administración de Hatuey de Camps Jiménez (Jun.29.1947 en Cotui; Ago.28.2016 en Santo Domingo)… seria interesante despejar cualquier sospecha sobre aquel permanente rumor de que desmanteló la videoteca para provecho personal. Cierro paréntesis.

“He venido aquí con la firme convicción de sumar… asumir este reto es un gran desafío y nuestro objetivo es hacer todo lo posible para dejar un legado”, manifestó Ruiz al tomar posesión del cargo. Durante el acto estuvieron presentes miembros del Consejo Administrativo de CERTV, que encabeza Ellis Pérez, Milagros Germán, ministra de Cultura; Roberto Fulcar, ministro de Educación; Franklin García Fermín, ministro de Educación Superior; Miguel Ceara Hatton, ministro de Económica, Planificación y Desarrollo; Samuel Pereyra Rojas, administrador general de Banreservas; Samuel Antonio Conde, presidente de Acción Empresarial por la Educación (Educa) e Ynalda Mercedes Castillo Sandoval, pasada presidente del Colegio Dominicano de Periodista, así como directores y encargados de la institución.

¿Conoceremos alguna vez que un trabajador de la planta radiotelevisora asuma la dirección de la misma?… potencialmente seria un nombramiento histórico, pero ahí nadie hace carrera. Solo se ha mantenido a través de diferentes administraciones es espacio de noticias de farándula de Zoila Puello.

¿Responde esta designación a alguna convicción programática existente en el Gobierno Dominicano?… aquí nadie se ha comprometido von que los trabajadores tengan presencia en los directorios de las poquísimas empresas estatales que nos restan.

Detener la mirada en nombres como Pérez, Germán, Fulcar, García Fermín, Pereyra Rojas, y Castillo Sandoval, es colocarse a la entrada de cualquier parque jurásico.

No sé si será cierto que Jose Arismendy Trujillo Molina, Petán (Oct.04.1886 en San Cristóbal; May.06.1969 en Puerto Rico) aún recorre los pasillos de la institución, pero más allá de su bestialidad, analfabetismo, prepotencia, etiquetado como depredador sexual, adornado por el rango de teniente general, doto a La Voz Dominicana de sus mayores glorias.

El comunicador Carlos Batista Matos en su espacio Con Los Famosos (Abr.06.2022) comentó, después que Ruiz anunciara que continuará con sus espacios en Color Visión, que no existían choques entre ambas atribuciones. “Una es una labor política, y administrativa, y la otra laboral, técnica, profesional”. Esta vez a Batista Matos, por quien guardo una discreta admiración, por motivos muy personales, se le fue la mano.

Quizás nunca conoceremos los vínculos de Ruiz con parte de la cúpula gubernamental del momento, si las tiene; no tenemos legislación sobre los sujetos y sus relaciones contractuales con la emisora, lo que invalidaría sus designaciones.

La proliferación de tantas voces sin sentido, que tanto dinero entregó la administración del Partido de la Liberación Dominicana (PLD), la proliferación de noticias falsas, y una cultura medial, propia de los tiempos pretéritos de El Conde Lucanor, al servicio de intereses privados, por lo que vuelve vital y urgente recuperar una televisión pública autónoma, formativa, crítica, capaz de acompañar a la ciudadanía. 

Hasta donde sabemos, la cultura no se transmite genéticamente; lo que nos hace seres humanos es la cultura. Por consiguiente, éste es el efecto principal de un medio como la televisión: la transmisión de la cultura y la formación de una sociedad más humana.

Nuestros niños son los mayores televidentes y las mujeres en una sociedad retratada como la nuestra, tienden a mirar más televisión. En este tipo de sociedades, la casa es el principal lugar para las mujeres y niños. Además, los niños son los mayores televidentes en todas las sociedades, dado que ellos adquieren su cultura a través de los medios masivos de comunicación. Deberíamos saber que, comparativamente, el proceso de socialización ocurre a través de los medios de comunicación.

Es tiempo de aspirar a la dignidad de todo el pueblo dominicano, y sus comunidades. A mayores accesos a la educación, la cultura, la diversidad.

Es tiempo de otra televisión