La descripción de Nate White sobre Donald Trump
Noviembre 09 del 2020
Me remiten el articulo Why do some British people not like Donald
Trump? de la autoría del periodista inglés Nate White, publicado en
diferentes medios, y cuya fecha más alejada encontrada por un servidor ha sido Feb.
17.2019 en el London Daily News.
Usted puede encontrar una de su replicas en: https://timpanogos.blog/2019/06/24/nate-whites-stunning-answer-to-the-question-why-do-many-british-people-not-like-donald-trump/.
Respondió White: « Algunas cosas
me vienen a la mente…»
«Trump carece de ciertas
cualidades que los británicos tradicionalmente estimamos».
«Por ejemplo, no tiene clase, ni encanto, ni frialdad, ni credibilidad, ni compasión, ni ingenio, ni calidez, ni sabiduría, ni sutileza, ni sensibilidad, ni conciencia de sí mismo, ni humildad, ni honor y ni siquiera gracia, toda cualidades, curiosamente, con las que su predecesor Obama
(Barack Hussein Obama II) fue
bendecido generosamente».
«Entonces, para nosotros, el
marcado contraste arroja más bien las limitaciones de Trump a un relieve
vergonzosamente agudo».
«Además, nos gusta reír. Y aunque
Trump puede ser risible, nunca ha dicho nada irónico, ingenioso o incluso
levemente divertido, ni una sola vez, nunca».
«No lo digo retóricamente, lo
digo literalmente: ni una vez, ni nunca. Y ese hecho es particularmente perturbador
para la sensibilidad británica: para nosotros, la falta de humor es casi
inhumana».
«Pero con Trump, es un hecho. Ni
siquiera parece entender qué es una broma; su idea de una broma es un
comentario grosero, un insulto analfabeto, un acto casual de crueldad».
«Trump es un troll». Un trol (del nórdico troll),
originalmente es un temible miembro de una mítica raza antropomorfa (atribución
de características y cualidades humanas a los animales de otras especies,
objetos o fenómenos naturales. Es considerada una tendencia innata de la
psicología humana. Se trata de una forma de personificación parecida a la
prosopopeya) del folclore escandinavo. Su papel en los mitos cambia desde
gigantes diabólicos, similares a los ogros de los cuentos de hadas ingleses,
hasta taimados salvajes más parecidos a hombres que viven bajo tierra en
colinas o montículos, inclinados al robo y el rapto de humanos que, en el caso
de los infantes, eran sustituidos por niños cambiados. También se les puede
llamar «gente de la colina» o «gente del montículo». También reciben el
calificativo de troll todo aquel, con identidad desconocida, que publica
mensajes provocadores, irrelevantes o fuera de tema en una comunidad en línea,
con la principal intención de molestar o provocar una respuesta emocional
negativa en los usuarios y lectores, con fines diversos. De acuerdo a estudios
de la Universidad de Indiana son una comunidad en aumento. El trol puede crear
mensajes con diferente tipo de contenido como groserías, ofensas, mentiras
difíciles de detectar, con la intención de confundir y ocasionar sentimientos
encontrados en los demás.
«Y como todos los trolls, nunca
es divertido y nunca se ríe; él solo canta o se burla».
«Y, aterradoramente, no solo
habla con insultos toscos y tontos, sino que en realidad piensa en ellos. Su
mente es un simple algoritmo parecido a un robot de mezquinos prejuicios y
maldades instintivas».
«Nunca hay una capa subyacente de
ironía, complejidad, matiz o profundidad. Todo es superficial».
«Algunos estadounidenses pueden
ver esto como algo refrescante».
«Bueno, nosotros no tenemos esa percepción.
Lo vemos como un personaje sin mundo interior, sin alma».
«Y en Gran Bretaña
tradicionalmente estamos del lado de David, no de Goliat. Todos nuestros héroes
son valientes desvalidos: Robin Hood, Dick Whittington, Oliver Twist».
«Trump no es valiente ni
desvalido. Él es exactamente lo opuesto a eso».
«Ni siquiera es un niño rico
malcriado, ni un gordo codicioso».
«Es más una babosa gorda y
blanca. Un Jabba el Hutt privilegiado».
«Y lo que es peor, es la más
imperdonable de todas las cosas para los británicos: un matón».
«Es decir, excepto cuando está
entre matones; luego, de repente, se transforma en un compinche llorón».
«Él rompe todas las reglas de la
decencia básica. Hay reglas tácitas para esto, las reglas de la decencia básica
de Queensberry, y las rompe todas. Golpea hacia abajo, lo que un caballero
debería, haría y nunca podría hacer, y cada golpe que apunta está por debajo
del cinturón. En particular, le gusta patear a los vulnerables o sin voz, y los
patea cuando están caídos».
«Entonces, el hecho de que una
minoría significativa, tal vez un tercio, de los estadounidenses miren lo que
hace, escuchen lo que dice y luego piensen».
«Sí, parece mi tipo de chico».
«Esto es motivo de confusión y no
poca angustia para los británicos, dado que: primero, se supone que los
estadounidenses son más amables que nosotros, y la mayoría lo son. Y segundo, no
necesitas un ojo particularmente agudo para observar todos los detalles y para
detectar algunos defectos en el hombre».
«Este último punto es lo que
confunde y consterna especialmente a los británicos, y también a muchas otras
personas; sus faltas parecen bastante difíciles de pasar por alto».
«Después de todo, es imposible
leer un solo tweet, o escucharlo decir una oración o dos, sin mirar
profundamente al abismo».
«Convierte el ser ingenuo en una
forma de arte; es un Picasso de mezquindad; un Shakespeare de mierda».
«Sus defectos son fractales:
incluso sus defectos tienen defectos, y así hasta el infinito».
«Dios sabe que siempre ha habido
gente estúpida en el mundo y mucha gente desagradable también. Pero raras veces
la estupidez ha sido tan desagradable, o la maldad tan estúpida».
«Hace que Nixon (Richard
Milhous Nixon, Ene.09.1913 en Yorba Linda, California; Abr.22.1994 en New York,
New York; trigésimo séptimo presidente de los Estados Unidos de América) parezca digno de confianza y que George W. Bush
(George Walker Bush, Jul.06.1946; cuadragésimo tercer
presidente de los Estados Unidos de América) parezca inteligente».
«De hecho, si Frankenstein
decidiera convertirse en un monstruo ensamblado completamente a partir de
defectos humanos, haría un Trump».
«Y un doctor Frankenstein
arrepentido se agarraba a abundantes mechones de cabello y gritaba angustiado:
"Dios mío... Dios mío... ¿qué... yo... he... creado?"».
«Si ser un idiota fuera un
programa de televisión, Trump sería una serie sobre un boxeador».
Robin Hood, citado previamente, es un arquetipo de héroe y forajido del
folclore inglés medieval. Inspirado por Ghino di Tacco, su personaje es un
hombre llamado Robin Longstride o Robin de Locksley, quien sería de gran
corazón y viviría totalmente fuera de la ley, escondido en los bosques de
Sherwood y Barnsdale, cerca de la ciudad de Nottingham; desde el siglo XII la
tradición hizo de Robin Hood un popular personaje que encarnaba las demandas de
justicia de las clases oprimidas en Inglaterra. Lo único cierto es que en los
documentos de los siglos XIII y XIV se hallan varias referencias a cazadores
furtivos, salteadores de caminos o criminales en fuga llamados Robin Hood o
algo parecido. Una de las más antiguas procede de un registro judicial de
Yorkshire, en el norte de Inglaterra, que cita la expropiación en 1226 de los
bienes de un tal Robert Hod, a quien se describe como fugitivus.
Dick Whittington y su Gato es una leyenda del folklore inglés que rodea
al verdadero sir Richard Whittington (alrededor de 1354; 1423), rico mercader y
más tarde alcalde de Londres. La leyenda, recogida por primera vez en
1605, describe su ascenso desde una infancia
pobre por la fortuna que hizo con la venta de su gato a un país infestado de
ratas. La leyenda parece inspirada en un cuento persa del siglo XIII
protagonizado por un huérfano que consigue una gran fortuna gracias a su gato.
Oliver Twist o The Parish Boy's
Progress'
es la segunda novela del autor inglés Charles Dickens (Charles John Huffam Dickens, Feb.07.1812 en Landport, Portsmouth, Inglaterra; Jun.09.1870 en Gads Hill Place, creó algunos de los personajes de ficción más conocidos en el mundo y muchos lo consideran el mejor novelista de la época victoriana. Sus obras gozaron de una popularidad sin precedentes durante su vida, y en el siglo XX, críticos y estudiosos habían reconocido a Dickens como un genio literario. Sus novelas y cuentos todavía son muy leídos hoy y se adaptan habitualmente al cine). Oliver Twist se publicó originalmente como novela por entregas de aparición mensual en la revista Bentley's Miscellany, dirigida por el propio Dickens, entre febrero de 1837 y abril de 1839.
Un Jabba el Hutt, en inglés:
Jabba the Hutt, es personaje ficticio de la serie La Guerra de las
Galaxias. Apareció por primera vez en la película Star Wars.
Para muchos de nosotros, Donald Trump (Donald John Trump, Jun.14.1946 en
New York, New York; cuadragésimo quinto presidente de los Estados Unidos de América)
es exactamente igual al personaje descrito en las punzantes señalizaciones
ofrecidas por el ingenioso y elocuente White, a quienes sus opositores señalaron
que había producido un escrito lleno de remordimientos. Pese a ello, ha sido el
segundo candidato a la Presidencia de los Estados Unidos más votado, en la
historia electoral de la nación norteamericana, solamente superado por Joe
Biden (Joseph Robinette Biden Jr., Nov.20.1942 en Scranton, Pennsylvania, ejerció
como el cuadragésimo séptimo vicepresidente de los Estados Unidos de 2009 a
2017. Fue senador de los Estados Unidos por Delaware entre 1973 y 2009) en
Nov.06.2020.
El tope máximo de Trump se produjo frente a Biden, el mismo día que
este resultó favorecido en las urnas, y que lo convertirá en el cuadragésimo
sexto presidente de los Estados Unidos de América.
Monstruo de su propia creación: Donald Trump es el cuarto presidente
desde el fin de la Segunda Guerra Mundial que no alcanza la reelección. El caso
más reciente fue el también republicano George W. Bush, quien perdió ante Bill
Clinton. Un total de 12 presidentes en la historia de Estados Unidos no han
logrado reelegirse.
Sus decisiones le pasaron cuenta: pasó de ser contagiado por covid-19 a
imponer una magistrada en la Corte Suprema de Justicia, por encima de todos los
pedidos de que postergara esa decisión; dejó su rol de mandatario a un lado
para involucrarse casi a tiempo completo en su campaña en pos de la reelección;
y, finalmente, falló en el último tramo en su intento por permanecer en la Casa
Blanca. Después, vino la pérdida de compostura, ganándose paulatinamente el
silencio del Partido Republicano, pese a que seguirá haciendo todo lo posible
para impugnar las elecciones en las que más de 70 millones de estadounidenses
le cobraron tres años y 10 meses de un gobierno polémico.
Pasó que en Arizona, la última victoria de un demócrata se fechaba en 1996,
con la reelección de Bill Clinton. Desde entonces, el estado sureño se había
teñido de rojo. No obstante, un hijo de Arizona, fallecido en Ago.25.2018,
marcó la diferencia desde la ausencia; John McCain (John Sidney McCain III,
Ago.29.1936 en Coco Solo, zona del Canal de Panamá; Ago.25.2018 en Cornville, Arizona),
candidato presidencial en el 2008, y líder republicano indiscutible, tuvo una
tensa relación con su partido por la forma en la que le permitían acciones a
Trump. La huella de Biden en Arizona es de las grandes en un feudo
republicano.
Pasó que en Georgia, otro muerto ilustre, John Lewis (John Robert Lewis,
Feb.21.1940 en Troy, Alabama; Jul.17.2020 en Atlanta, Georgia), congresista
demócrata afroamericano que estuvo en la Cámara de Representantes desde 1987,
murió por cáncer de páncreas, y su ausencia se determinó en que en las ciudades
clave de Georgia el voto demócrata emergió hasta desbalancear la historia de
que allí, en lo que va de siglo, siempre se tiñó de rojo republicano. El
periódico The Atlanta Journal
Constitution reseñó cuando Trump le pidió a Lewis que «arreglara su horrible distrito de Atlanta». En la elección de la
semana pasada, Atlanta fue desequilibrante y el irrespeto de Trump le pasó
factura.
Pasó además que en el Cercano
Oeste (Midwest) se convirtió en un lugar de protestas y disturbios por la
violencia racial durante la primavera y el verano del año en curso. En la zona
norte, hace cuatro años, Trump había ganado Wisconsin; Minnesota ha sido un
cuartel demócrata e intentó conquistarlo, pero falló. La muerte de Jacob Blake,
en Kenosha (Wisconsin) y de George Floyd en Minneapolis (Minnesota) le cobró su
incoherente política para la igualdad racial. En Michigan, Trump se jugaba una
ruleta; ganó el estado en 2016 con una ventaja de solo 0.3 por ciento por
primera vez para un republicano desde 1988. Trump falló en los suburbios de las
ciudades más importantes, como es el caso de Detroit, y le cobraron que la
recuperación económica que tanto promovió, nunca llegó. Esta vez Biden hizo una
intensa campaña en casi todo el alto Midwest: Minnesota, Wisconsin, Illinios y
Michigan se colorearon del azul de Biden.
La derrota de Trump en estados clave diferentes a Ohio o Florida, donde
ganó desde temprano en la noche electoral, también fueron un plebiscito a su
forma de ver el país, a la manera en la que quiso atropellar en los debates
presidenciales y el querer dominar siempre la retórica.
Es necesario entender que en una democracia compleja como la
estadounidense, donde el voto popular nacional no tiene peso, pero sí marca el
resultado de cada estado, todo sufragio cuenta. Conquistar condados terminará
por inclinar un estado y agregar delegados electorales para el candidato del
caso. Existen decenas de estrategias para ganar electorado de manera focalizada
y así se ganan elecciones. Por eso, los candidatos celebran sus reuniones de
campaña en pequeñas poblaciones, en lugar de las grandes metrópolis. Sin
embargo, cuando la cuenta falla en un estado, suele desatar un efecto dominó
que puede terminar por arruinar el camino a la Casa Blanca.
A Donald Trump habría que cantarle aquella canción, a ritmo de merengue apambichado, que popularizo Rafael Solano & Orquesta en los primeros años de la década de 1970, en la voz de Rico López, de la autoría de Dionisio Mejía (Guandulito, Mar.23.1911 en La Güizara, Higüey, provincia La Altagracia, para entonces común de la provincia de El Seibo; Jun.1979 en Santo Domingo): «mi compadre está muy grave y no lo puedo avistar, en miedo a que si muere, a mí me quiera llevar; váyase en paz, mi compadre, váyase en paz».
«Por ejemplo, no tiene clase, ni encanto, ni frialdad, ni credibilidad, ni compasión, ni ingenio, ni calidez, ni sabiduría, ni sutileza, ni sensibilidad, ni conciencia de sí mismo, ni humildad, ni honor y ni siquiera gracia, toda cualidades, curiosamente, con las que su predecesor Obama
La reina, entonces con 90 años, a paso forzado |
presidente de los Estados Unidos de América) parezca inteligente».
es la segunda novela del autor inglés Charles Dickens (Charles John Huffam Dickens, Feb.07.1812 en Landport, Portsmouth, Inglaterra; Jun.09.1870 en Gads Hill Place, creó algunos de los personajes de ficción más conocidos en el mundo y muchos lo consideran el mejor novelista de la época victoriana. Sus obras gozaron de una popularidad sin precedentes durante su vida, y en el siglo XX, críticos y estudiosos habían reconocido a Dickens como un genio literario. Sus novelas y cuentos todavía son muy leídos hoy y se adaptan habitualmente al cine). Oliver Twist se publicó originalmente como novela por entregas de aparición mensual en la revista Bentley's Miscellany, dirigida por el propio Dickens, entre febrero de 1837 y abril de 1839.
A Donald Trump habría que cantarle aquella canción, a ritmo de merengue apambichado, que popularizo Rafael Solano & Orquesta en los primeros años de la década de 1970, en la voz de Rico López, de la autoría de Dionisio Mejía (Guandulito, Mar.23.1911 en La Güizara, Higüey, provincia La Altagracia, para entonces común de la provincia de El Seibo; Jun.1979 en Santo Domingo): «mi compadre está muy grave y no lo puedo avistar, en miedo a que si muere, a mí me quiera llevar; váyase en paz, mi compadre, váyase en paz».
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