miércoles, 17 de marzo de 2021

Basketmania
Cinco criollos en el March Madness, La Locura de Marzo, El Gran Baile
Marzo 15 del 2021
 

Cinco dominicanos estarán en La Locura de Marzo repartidos en cuatro equipos, ellos son Adrien Núñez (6’06, 210, SG, junior, May.14.1999 en Manhattan, New York) con Michigan Wolverines, Chris Duarte (Christopher Theoret Duarte, 6’06, 190, SG, senior, Jun.13.1994 en Puerto Plata) y L.J. Figueroa L.J. Figueroa (Lionel Junior Figueroa Mercado, 6’07, 200, SG/SF, senior, Mar.28.1998 en Lawrence, Massachusetts) con Oregon Ducks, Myles Johnson (6’10, 250, PF, junior, de Long Beach, California) con Rutgers Scarlet Knights, y Darnell Brodie (Darnell Devon Brodie, 6’10, 265, PF, junior, de Newark, New Jersey) con Drake Bulldogs.
 
De paso, entre usted y yo, ahí estaría un buen núcleo para la reestructuración del equipo criollo que asistirá al Pre-Olímpico de Serbia a finales de junio venidero, y donde como pieza fundamental sólo dejaría a Eloy Camacho Vargas, añadiría a James Feldeine para que sirva de catalizador en esa metamorfosis del quinteto local; dije entre usted y yo para que nadie más lo supiera.
 
Sumaría a Joel Soriano (6’11, 250, C, sophomore, Ene.30.2000 de Yonkers, New York) y a Chad Baker (6’07, 190, SF, freshman, Ene.27.2000 en Santo Domingo, República Dominicana), como primeros para el recambio; observaría muy de cerca a Hasahn French (6’07, 245, PF, senior, Abr.09.1998 de Middletown, New York), especialmente por su juego aéreo y su fortaleza dentro del área chica, que mucha falta nos hace; en lo particular me divierta la línea estadística de Justin Minaya (Justin Alexander Minaya, 6’06, 215, SF/SG, junior, Mar.26.1999 de Harrington Park, New Jersey), que no moja pero empapa.
 
Evaluaría el desempeño de muchos de los alrededor de 40 jugadores que han estado en esta versión de la NCAA, fumaría la pipa de la paz por los que han sido defenestrados, y de los que están, trabajaría con Gelvis Andrés Solano Paulino (6’01, 180, SG/PG, Jun.01.1994 en New York, New York; último equipo: Mineros de Zacatecas, México), Rigoberto Mendoza De La Rosa, El Vikingo (6’02, SG, Jul.06.1992 en San Cristóbal), Adonys Henríquez (6’06, 210, SG, de Orlando, Florida, Club Ourense Baloncesto, España), Juan Miguel Suero Castillo (6’04, SF, May.11.1993 en Santo Domingo), Juan Adolfo Guerrero Pozo (6’07, 210, SF/PF, Jul.08.1993 en Santo Domingo), Antonio Peña (Antonio Miguel Peña Wright, 6’08, 235, PF, Jul.20.1986 en Coney Island, New York, residente en Brooklyn, New York; egresado de Villanova University en el año 2011, último equipo Soles de Mexicali, México), y buscaría alguna información sobre Jonathan Araujo Madé.
Chris Duarte

 
Por supuesto, iría por un nuevo seleccionador, rompería con la estructura de la comisión de selecciones nacionales, incluyendo a su director, el técnico de más corta visión que jamás hayamos tenido; voy dejando atrás los sueños, de paso, con esa breve convocatoria bajaríamos cuatro o cinco años el promedio de edad del vetusto colectivo. Estoy seguro que desvelaré a más de un perro payolero, pero yo andaré eternamente con mi estilo y mi elegancia sobre mis espaldas. ¡Ayyyyyyyyyyyyyyy, ahí es que les duele!
 
Núñez con Michigan
El dominicano Núñez es un especialista en lances, con la estatura ideal para la posición de escolta en el plano internacional, que se ha ido diluyendo en un equipo lleno de talento; su entrenador Juwan Howard lo relegó a la banca, después que en la campaña 2019-20 inició los cuatro primeros partidos del conjunto. Los Wolverines con un cuadro repleto de capacidad, aptitud, versatilidad, competitividad, equilibrio y aplomo tienen para hacer una carrera interesante en la burbuja de Indianápolis; están en la conferencia más potente que existe en la actualidad. Han pasado este curso soñando con que pueden capturar su primer campeonato nacional desde que Glen Rice llevó el programa a un título en 1989, están sobre los rieles y sólo le separan seis estaciones de conseguir esa ambrosia.
 
Núñez participó en 9 de los 24 juegos de los Wolverines, dejó apenas 3.6 minutos, un inexistente 0.7 puntos, 0.4 rebotes, sin asistencias, 37.5 por ciento desde el campo (3-de-8) falló sus dos intentos más allá del arco, y no visitó la línea de libres.
 
Hunter Dickinson (7’01, 255, C, freshman, Nov.25.2000 en Alexandria, Virginia), Isaiah Livers (6’07, 230, SF, senior, Jul.28.1998 en Kalamazoo, Michigan), Franz Wagner (6’09, 220, SG, sophomore, Ago.27.2001 en Berlin, Alemania), Eli Brooks (6’01, 185, PG, senior, Oct.14.1998 en Sumter, South Carolina, residente en Spring Grove, Pennsylvania), Mike Smith (5’11, 185, PG, senior, Oct.13.1997 en Burr Ridge, Illinois, una transferencia de Columbia), Chaundee Brown (6’05, 215, SG, senior, Dic.04.1998 en Orlando, Florida, una transferencia de Wake Forest), Austin Davis (6’10, 250, PF, senior, Jul.08.1998 en Adrian, Michigan, residente en Onsted, Michigan), y Brandon Johns Jr. (6’08, 240, PF, junior, Dic.14.1999 en Lansing, Michigan, residente en East Lansing, Michigan), forman el cuadro reguilar del entrenador Howard, brindando una versión moderna y que señala además que aún los buenos equipos se pueden construir en base a un hombre de gran calado.
 
Dickinson no es el jugador más acabado atléticamente, pero es una mole indetenible en la zona pintada. Michigan promedió 112 puntos por cada 100 posesiones (54 por ciento de corta y media distancia, 42 por ciento más allá de la línea de 3 puntos) mientras mantenía a sus oponentes con un 39 por ciento desde el campo, con Dickinson en el piso. Sin embargo, noticias devastadoras podrían cambiar las cosas: Isaiah Livers se perdió el duelo de semifinales del Big Ten en Mar.13.2021 contra Ohio State debido a una lesión en el pie; si el astro colegial no está disponible, este no será el mismo equipo, y esos sueños enfrentarán unos obstáculos importantes.
 
Duarte y Figueroa puntales de Oregon
L.J. Figueroa abandonó Nueva York para estacionarse en Eugene, Oregon, y allí junto a Chris Duarte llevar a los Ducks a un campeonato nacional, en el trayecto el equipo en manos de Dana Altman ha soportado toda clases de vicisitudes  Duarte y Figueroa tuvieron coronavirus; N'Faly Dante (6’11, 230, C, sophomore, Oct.19.2001 en Bamako, Mali ) sufrió un desgarro del ligamento cruzado anterior en diciembre, mientras promediaba 8.2 puntos; y Will Richardson (6’05, 180, PG, junior, Sep.03.1999 en Hinesville, Georgia) estuvo ausente un tramo significativo de esta estación debido a una lesión en la mano, regresando para dejar 11.1 puntos en 14 salidas, 34.9 minutos, 3.4 rebotes, 3.6 asistencias, 1.0 robos de balón, 2.5 bolas perdidas, mientras cristalizaba el 43.4 por ciento de sus lances de campo, incluyendo un 38.9 por ciento más allá del arco, y un 72.5 por ciento desde la línea de libres.     

L.J. Figueroa

    
Duarte (Christopher Theoret Duarte, 6’06, 190, SG, senior, Jun.13.1994 en Puerto Plata), en 24 presentaciones, cubriendo 34.0 minutos, regaló 16.8 puntos, 4.7 rebotes, 2.3 asistencias, 1.9 robos de balón, 0.8 lances bloqueados, 2.3 balones perdidos, con un 52.4 por ciento de efectividad en sus disparos de campo (143-de-273), que incluyen un 43.0 por ciento en sus aventuras válidas para tres (58-de-135), y 80.3 por ciento desde la línea (57-de-71); Eugene Omoruyi (6’06, 235, SF/PF, senior, Feb.14.1997 de Rexdale, Ontario, Canadá, una transferencia recibida desde los Rutgers Scarlet Knight),16.8 puntos, en 26 juegos, donde promedio 30.3 minutos, sumó además 5.2 rebotes, 2.2 asistencias, 1.5 robos de balón, 0.5 tapas, 2.4 pérdidas de balón, y una línea porcentual de 47.0, 38.4, y 76.1; Figueroa (Lionel Junior Figueroa Mercado, 6’07, 200, SG/SF, senior, Mar.28.1998 en Lawrence, Massachusetts), también intervino en 24 ocasiones, con 31.2 minutos, 12.3 puntos, líder rebotero del colectivo con media de 6.1, 1.5 asistencias, 1.6 robos de balón, 0.3 bloqueos, 0.7 balones perdidos, y porcentajes de 47.6 (118-de-248), 37.6 (41-de-109), y 66.7 (18-de-27); y Eric Williams Jr. (6’06, 200, SF, junior, Jul.30.1999 de Port Huron, Michigan),10.4 enteros, en 30.8 minutos, 6.1 rebotes, 1.7 asistencias, 0.6 pelotas robadas, 0.5 tapas, y 1.3 balones perdidos, con 40.5 por ciento desde el campo, incluyendo un 35.7 por ciento en disparos de tres tantos, y 72.1 por ciento en sus visitas a la línea, quienes además de Richardson exhiben dos dígitos ofensivos, en un equipo que se quedó con la vuelta regular de la Pacific-12 Conference, y colectivamente lanzaron para un 37.9 por ciento desde las profundidades (218-de-575), agréguese además un 47.2 por ciento desde el campo (715-de-1515), más un 70.4 por ciento desde la línea (286-de-406).
Duarte

 
Altman trae desde la banca a Chandler Lawson (6’08, 205, SF, sophomore, de Memphis, Tennessee), Amauri Hardy (Amauri Jeremiah Hardy, 6’02, PG, senior, Abr.30.1998 en Detroit, Michigan, una transferencia de UNLV), Aaron Estrada (6’04 207, SG, sophomore, de Woodbury, New Jersey, una transferencia desde Saint Peter’s), y a Jalen Terry (6’00, 165, PG, freshman, de Flint, Michigan).
 
Oregon cuenta con cuatro jugadores que han alcanzado 1,000 puntos en sus respectivas carreras,
Williams reunió ese mítico guarismo en Dic.31.2020 en un encuentro ante California Golden Bears, antes lo habían conseguido Hardy (sumando su desempeño en UNLV) y el dominicano Figueroa (incluyendo su participación con St. John’s), y más recientemente se situó en ese círculo privilegiado Omoruyi, que viene desde Rutgers.
 
Los Ducks y Mississippi (Southeastern Conference) son los únicos dos programas en toda la División I de la NCAA que pueden exhibir a cuatro jugador activos sobre la mágica cifra.
 
Los jugadores de los Rebels que han conseguido reunir 1,000 o más tantos durante sus carreras son Romello White (Romello Da’Quan White, 6’08, 235, PF, senior, May.09.1998 de Atlanta, Georgia) que también militó en Arizona State, Devontae Shuler (6’02, 185, PG, senior, Feb.09.1998 de Irmo, South Carolina), Jarkel Joiner (6’01, 180, PG, junior, May.20.1999 de Oxford, Mississippi), una transferencia desde CSU-Bakersfield; y K.J. Buffen (Kenyon Joseph Buffen, 6’07, 230, SF, junior, May.27.2000 de Gainesville, Georgia).
 
La intimidante presencia de Myles the Monster
Buena parte de las referencias sobre el dominicano Myles Johnson han sido tomadas del articulo More than just a basketball player: The many interests of Rutgers' Myles Johnson, publicado en Nov.02.2020, de la autoría de Brian Fonseca en el portal NJ.com, que reúne trabajos de los diarios The Star-Ledger, The Times of Trenton, South Jersey Times, y The Jersey Journal.
 
Rutgers no es una institución para recordar para varios jugadores dominicanos, que tuvieron que encausar sus carreras solicitando ser transferidos, ahí sobrevivió Jeff Greer (1997-98, 1998-99, 1999-00, y 2000-01), pero pasó con Luis Flores (1999-00 que se marchó a Manhattan, una de nuestras tantas referencias), Quincy Douby (2003-04, 2004-05, y 2005-06, un guard alto sumamente ofensivo), que nadie se aventuró a traerlo en el país, pasó brevemente por la NBA, tres estaciones en Sacramento Kings, y fugazmente con Toronto Raptors; después se marchó a Europa y se estableció como estrella fulgurante con paradas en Turquía (Darüşşafaka, Tianjin Ronggang, Afyonkarahisar Belediyespor), líder anotador en la estación 2009-10, China (Xinjiang Flying Tigers, Zhejiang Golden Bulls, Shanghai Sharks), en Ene.23.2013 encestó 75 unidades en un solo encuentro en la competencia china, España (UCAM Murcia), e instalándose en el Líbano desde el 2017, primero con el Sporting Al Riyadi de Beirut, y donde permanece activo, Manny Quezada (2004-05 que terminó en San Francisco Dons), Mike Rosario (2008-09, y 2009-10, terminó en Florida, que se decantó por Puerto Rico y aquí jamás se le vio un pelo), hay unos pocos más.
 
Quien sí llegó ahí para establecerse sólidamente fue Myles Johnson (6’10, 250, PF, junior, de Long Beach, California), una verdadera mole, de brazos largos, hombros anchísimos, y unas manos enormes, que cada año ha mejorado sus números en las casillas fundamentales: puntos, rebotes, asistencias, tapas, robos de balón, porcentaje en lanzamientos de campo, pero falible de manera absoluta desde la línea de libres. En la actual estación ha dejado 8.3 puntos, 8.7 rebotes, 0.8 asistencias, 2.5 lances bloqueados, 1.1 robos de balón, acertando para un 63.8 por ciento desde el campo, y sus lances libres sería mejor guardarlos debajo de una cobija, apenas 43.1 por ciento, y nunca se aventura con el tiro de larga distancia.
Myles Johnson

 
Más que un simple jugador de baloncesto, Johnson carga muchos intereses; junto a sus compañeros de equipo ha llevado a los Scarlet Knights a sus mejores temporadas en tres décadas. Está involucrado en asuntos sociales, trabaja con niños de color tratando que historias de marginación y limitaciones no se repitan, además lleva su carrera como estudiante de ingeniería eléctrica e informática, siendo por lo general el único estudiante negro en sus aulas, y manifiesta que nunca tuvo un profesor negro en sus clases de STEM (ciencia, tecnología, ingeniería y matemáticas) en Rutgers.
 
Se inmiscuyó en el programa sabatino de ciencias de la Charles R. Drew University of Medicine and Science de Los Angeles (Willowbrook), California, una escuela de post-grado privada e históricamente negra, establecida en 1966  con la finalidad de mejorar el acceso a la atención médica en el sur de Los Ángeles después de los disturbios de Watts en el año de 1965, para ayudar a los niños de color que están fascinados con la ciencia. Además, fundó BLKDev, una organización sin fines de lucro con la misión de informar, inspirar y capacitar a los estudiantes negros interesados ​​en el campo STEM.
 
Mientras crecía, Johnson dedicó su tiempo a numerosas causas: ofrecerse como voluntario en un campamento para niños ciegos, repartir comida en los barrios bajos de Los Ángeles, establecer mesas de votación durante las elecciones de 2016. Como miembro del comité asesor de Estudiantes-Atletas de Rutgers, realizó un viaje de servicio a Puerto Rico con Soles4Souls para distribuir zapatos y ropa a las comunidades devastadas por el huracán María (que tocó la isla en septiembre del 2017).
 
Esos trabajos honoríficos llevaron a algunos entrenadores universitarios a preguntarse ridículamente si Johnson estaba lo suficientemente dedicado al baloncesto: «¿Myles come, duerme y respira baloncesto?... no, no lo hace», respondió su padre Rick Johnson. «Pero le encanta el baloncesto», añadió. El cuerpo técnico de los Rutgers dio la bienvenida a un atleta completo.
 
Para su entrenador Steve Pikiell: «tiene una perspectiva muy clara del mundo. Quiere ser un gran estudiante y quiere participar. Quiere ayudar a la gente. Él también quiere ser un buen jugador de baloncesto. Tiene muchas cualidades únicas y, sinceramente, es realmente refrescante. Él ve las cosas de manera diferente a la mayoría de los niños de su edad. Está pensando en el futuro, y está pensando en cómo puede tener un impacto para hacer del mundo un lugar mejor. Es tan talentoso de muchas maneras, y es agradable, tiene una gran personalidad, es inteligente, es un excelente jugador de baloncesto. Disfruto de sus dones y disfruto de todos sus esfuerzos entusiastas fuera de la cancha. Es realmente un niño divertido con quien estar cerca. Realmente es una bendición poder entrenarlo».
 
¿Cómo aterrizó Johnson en Piscataway?... todo se remonta a una reunión casual en el aeropuerto de Atlanta entre Jay Young, pasado asistente de Rutgers, Jean Bain, pasado entrenador asociado de Columbia, y a quien Young entrenó en Northeastern a principios de los años de 1990. Cuando los viejos amigos hablaron sobre el reclutamiento, Young mencionó que los Scarlet Knights tenían una beca disponible para su clase de 2017 y estaban buscando un gran hombre para desarrollarse. Bain respondió: «hay un niño en California...». En ese momento Johnson estaba jugando en Indianápolis a la mañana siguiente, pero no en el evento de alto perfil de Nike EYBL al que Young planeaba asistir con Pikiell y su asistente Karl Hobbs. Entonces, el personal de Rutgers cambió de rumbo y, a las 8:00 de la mañana estaban observando a Johnson jugar en un evento satélite desde las gradas del gimnasio de una escuela secundaria "frente a nadie".
 
Pronto, Johnson se encontraba de visita oficial en Piscataway. Vio las instalaciones, aprendió sobre el programa de ingeniería e incluso practicó su japonés. Cecilia Vargas, vicedecana de educación de pregrado en la Escuela de Ingeniería de Rutgers, creció en Japón. Charlaron en su lengua materna durante la reunión. En cuestión de semanas, Johnson se comprometió con los Scarlet Knights, y el proceso de lanzamiento de “Myles the Monster”, su apodo, estaba en marcha. Johnson se ríe de la etiqueta: "yo era el monstruo en el entrenamiento".
Ron Harper Jr.

 
Si Myles es el monstruo, el entrenador de fuerza y ​​acondicionamiento de Rutgers, Dave VanDyke, es el Dr. Frankenstein. Johnson estaba muy fuera de forma cuando llegó al baloncesto, todavía recuperado de una rotura de rótula que le hizo perder su tercer año de secundaria. Así que VanDyke puso a Johnson en lo que él llamó el "tren de perder peso" durante su primer año en el campus, lanzándole cambios en la dieta y sesiones de acondicionamiento extenuantes a diario. Luego vinieron entrenamientos igualmente exigentes con Young y Pikiell en la cancha, llevando a Johnson a sus límites físicos.
 
Hay una razón por la que la decano Vargas dijo que es "bastante raro" ver a los atletas matricularse en la escuela de ingeniería; la combinación de un plan de estudios riguroso y las exigencias de un deporte de la División I es increíblemente difícil de asumir. Johnson solo equilibró todo; sobresalió en ambas áreas.
 
La estación 2020-21 de los Scarlet Knights se ha desarrollado como si el conjunto ha estado conviviendo a bordo de un crucero en aguas agitadas en mar abierto; iniciaron con 7-1 (incluidas las victorias sobre Purdue, Syracuse, Maryland e Illinois). Luego perdieron cinco en fila antes de terminar la temporada regular con un recuento de 3-4 en sus últimos siete juegos antes del Big Ten Tournament.
 
El dirigente Pikiell lleva una rotación muy corta, apenas ocho jugadores acumulan más de 15 minutos por salida, pero Ron Harper Jr. (6’06, 245, SG/SF, junior, Abr.12.2000 en Paterson, New Jersey, residente en Franklin Lakes, New Jersey), Geo Baker (6’04, 195, SG, senior, Jul.21.1998 de Derry, New Hampshire), y Jacob Young (6’02, 185, PG, senior, Sep.21.1997 de Houston, Texas) son atletas capaces. Con ellos Montez Mathis (6’04, 210, SG, junior, Ene.03.1999 de Baltimore, Maryland), Paul Mulcahy, Caleb McConnell, y Clifford Omoruyi (6’11, 240, C, freshman, Oct.11.2001 de Benin City, Nigeria).
 
Harper es el líder anotador del conjunto con media de 15.4, agrega además 5.9 rebotes, y 1.6 asistencias, 0.7 robos de balón, 0.6 tapones, y apenas 1.0 balones perdidos, en 25 partidos se administró 31.9 minutos, además lanzó para un 45.6 por ciento desde el campo (141-de-309), incluyendo un 32.1 por ciento en sus aventuras más allá de arco (43-de-134), y 73.2 por ciento en sus viditas a la línea (60-de-82). Young resulto líder en asistencias (3.5) y balones robados (1.8) del equipo, en 26 encuentros dejó 29.9 minutos, sumando 14.4 puntos, con doble figuras en 19 de sus presentaciones, 1.9 rebotes, conectando el 46.9 por ciento de sus disparos de campo (143-de-305), que incluyen un 36.0 por ciento desde los abismos (27-de-75), y 72.6 por ciento desde la línea (61-de-84).
 
Baker dejó hasta estos momentos, 23 choques donde desgranó 31.0 minutos, 10.1 puntos, 3.2 rebotes, 3.1 asistencias, 1.3 robos de balón, 0.5 tapas, 1.6 balones perdidos, y porcentajes de 40.3 desde el campo (89-de-  221), donde se incluye un 30.6 validos desde más allá del arco (34-de-111), y 76.9 en los libres (20-de-26). Mathis estuvo presente en las 26 salidas del equipo, 21.6 minutos, 8.5 puntos, 2.9 rebotes, 0.8 asistencias, 0.7 robos de balón, 0.3 tapas, 1.1 pelotas perdidas, 39.0 por ciento en sus intentos desde el campo (82-de-210), incluyendo un 29.0 por ciento en sus osadías desde las profundidades (20-de-69), y 56.3 por ciento desde la línea de libres (36-de-64).
 
Mulcahy estuvo sobre las duelas por espacio de 27.5 minutos, 26 partidos, 19 en el cuadro inicial, 5.8 puntos, 3.3 rebotes, 2.8 asistencias, 0.7 balones robados, 0.4 tapas, 1.7 bolas perdidas, 46.1 por ciento de aciertos desde el campo (53-de-115), incluye un 36.5 por ciento desde más allá del arco (19-de-52), y 67.5 por ciento desde la línea (27-de-40). McConnell, 18 juegos, 23.1 minutos, 5.3 puntos, 4.0 rebotes, 1.6 asistencias, 1.5 balones robados, 0.3 tapas, 0.8 balones perdidos, y una línea porcentual de 29.3 desde el campo (36-de-123), donde se anexa un 20.9 válidos para tres (9-de-43), y 77.8 desde la línea (14-de-18). Omoruyi en 21 choques regaló 15.3 minutos, 4.0 puntos, 4.0 rebotes, 0.2 asistencias, 0.4 balones robados, 0.8 tapones, 0.4 balones perdidos, mientras lanzaba para un 65.4 por ciento desde el campo (34-de-52), 50 por ciento en metrallazos desde los abismos, aunque realmente solo realizó 2 disparos y encestó 1, y 42.4 por ciento desde la línea (14-de-33).
 
La ofensiva de la tropa de Pikiell no es deslumbrante, apenas 71.0 puntos de media (lugar 195 de la nación), 45.1 por ciento desde el campo (lugar 81), un débil 31.1 por ciento desde lo profundo (lugar 175), y un siempre mejorable 63.2 por ciento desde la línea (lugar 187); súmese 35.3 rebotes por salida (lugar 107), 13.8 asistencias (lugar 88), 7.8 robos de balón (lugar 41), un interesante 5.2 de lances bloqueados (terceros de toda la nación), y 11.3 perdidas (vigésimo quinto equipo con menos perdidas por juego); por lo menos, más asistencias que balones fuera.  Los Scarlet Knight limitaron a sus rivales a 68.2 puntos, aunque cedieron un rebote más por juego que los capturados; donde marcan diferencia es en sus 135 lances bloqueados ante los 85 tiros que les taparon.
 
Y pese a que la fortuna no les acompaño en los lanzamientos, limitaron a sus oponentes a un 42.0 por ciento desde el campo (627-de-1494), 32.1 por ciento desde más allá del arco (171-de-532), aunque le marcaron el 70.4 de los lances libres (349-de-496).
              
Si los Scarlet Knights pueden sacar lo mejor de sí, podrían ser un rival interesante en el incesante y nunca descifrable marzo en la NCAA.
 
Un casi indescifrable Brodie
Darnell Brodie (Darnell Devon Brodie, 6’10, 265, PF, junior, de Newark, New Jersey) se pasó dos años en las profundidades del banquillo de Seton Hall Pirates, tanto que apenas saltó en 5 partidos a la duela en dos estaciones, dueño de un impresionante físico, tomó sus bártulos y aterrizó en el inhóspito estado de Iowa, fichó con Drake Bulldogs, y apenas empezada la campaña se escuchaban voces desde New Jersey señalando que jamás debió abandonar la escuadra de Kevin Willard (Abr.06,1975 en Huntington, New York).
 
Darian DeVries (Darian Dale DeVries, Abr.07.1975 en Aplington, Iowa), su nuevo entrenador, le brindo la confianza necesaria, inició los 29 partidos donde intervino, desgranando 22.7 minutos por salida, promedió 7.7 enteros, 7.2 rebotes (53 ofensivos, 156 defensivos para totalizar 209), regaló 28 asistencias, casi un pase efectivo por juego, perdió sólo 41 balones, quedó con 14 lances bloqueados, total nada interesante, pero conectó para un 57.5 por ciento desde el campo (103-de-179), falló la única aventura detrás del arco que intentó, y cuadro un 62.1 por ciento desde la línea (18-de-29 ). Brodie viene a ser un poco como las lentejas, «usted las toma o usted las dejas», y DeVries lo incluyó, le redondeó su cuadro, y el juego interior de los Bulldogs.
 
Drake logró un inicio de ensueño, llegó hasta 18-0 (9-0 en la Missouri Valley Conference), tanto que en un momento de la campaña Gonzaga, Baylor y los Bulldogs fueron los últimos equipos en mantenerse imbatidos. Pero esa partida de caballo inglés no les acompaño en el cierre donde reunieron un 7-4 en sus últimos 11 juegos.
 
ShanQuan Hemphill (6’06, 195, SF, senior, de Gary, Indiana, una transferencia de Wisconsin- Green Bay), el mejor anotador del colectivo, se perdió tres de esas derrotas por un pie fracturado. Roman Penn (6’00, 185, PG, junior, de Calumet City, Illinois, una transferencia llegada desde Siena), el tercer anotador del equipo, estuvo fuera por dos de ellas también con un pie fracturado. Perder a un par de jugadores indispensable que se combinaron para promediar 25.3 puntos, aumentó la presión sobre Joseph Yesufu (6’00, 180, PG, sophomore, de Bolingbrook, Illinois), quien está apoyado en una media de 12.1 puntos, y registra al menos 39 minutos en cinco juegos consecutivos; además alcanzó 1.7 rebotes, 1.8 asistencias, 1.1 robos de balón, con un 45.3 por ciento de efectividad desde el campo, 37.1 por ciento desde las profundidades, y 80.8 por ciento desde la línea. La buena noticia para los Bulldogs es que Hemphill podría regresar para el NCAA Tournament, y eso ayudaría a todos.
 
Hemphill reunió 14.1 tantos, 6.3 rebotes mientras conseguía el 58.7 por ciento de aciertos desde el campo (122-de-208), no es quien se aventura más allá del arco, sólo tres intentos en toda la campaña, y su huella desde la línea de libres es de apenas un 64.9 por ciento (37-de-57). Penn se exhibió en 24 choques, 26.8 minutos cada vez, 11.2 puntos, 3.3 rebotes, 5.5 asistencias, 1.4 balones robados, 2.3 bolas perdidas, y 45.2 por ciento de acierto en sus disparos, incluyendo un 33.3 por ciento desde las largas distancias, y 70.2 por ciento desde la línea.
 
Detrás de ellos llegaba el respaldo de D.J. Wilkins (6’02, 182, PG/SG, junior, de Merrillville, Indiana) 29 salidas, 29.0 minutos, 10.6 tantos, 1.7 rebotes, 2.1 asistencias, 0.8 balones robados, 0.9 perdidas, 43.1 por ciento en disparos de campo, 41.8 por ciento en lances de larga distancia, y 78.4 por ciento desde la línea; Tremell Murphy (6’06, 210, SF, senior, de Griffith, Indiana) 29 juegos, 27.1 minutos, 10.2 enteros, 5.2 rebotes, 1.2 asistencias, 0.8 robos de balón, 0.9 lances bloqueados, 1.4 balones perdidos, 51.4 por ciento en sus disparos que incluyen un 37.9 por ciento en lances desee los abismos, y un 71.4 por ciento desde la línea; y Garrett Sturtz (6’03, 175, PG, junior, de Newton, Iowa), 29 juegos, 26.0 minutos, 8.4 puntos, 5.6 rebotes, 1.1 asistencias, 1.2 robos de balón, 0.7 bolas perdidas, 56.3 por ciento de aciertos desde el campo, con 33.3 por ciento más allá del arco, y 75.4 por ciento desde la línea.
Darian DeVries

 
Es la primera visita de los Bulldogs al NCAA Tournament desde el año 2008, y quinta ocasión en su historia. Drake llega al March Madness con 25 triunfos en su haber, el tercer equipo con más logros en la campaña 2020-21, solo detrás de Gonzaga y Belmont, y estará enfrentando a Wichita State, un pasado miembro de la Missouri Valley Conference; ambos equipos se han enfrentado en 151 ocasiones previamente.
 
Drake concluyó la estación con 7 partidos jugados en 14 días, y 14 partidos en 32 días; dos de sus cuatro derrotas vinieron a manos del campeón de la conferencia, Loyola-Chicago.
 
Cinco valerosos dominicanos, que buscarán colocar en alto el pabellón nacional en tan exigente instancia.
 
¿Dónde están los 10 millones de fanáticos que deberían estar alrededor de ellos?
 
Me voy, pero me llevo conmigo mi estilo y mi elegancia.
 

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