sábado, 23 de enero de 2016

¿Monstruos en los sueños del beatón sonriente?

Más de uno me preguntó mi opinión sobre la puesta en escena de la Liga de las Américas que se celebró el pasado fin de semana en la ciudad de Santiago (Ene.15/17.2016) y la respuesta fue siempre la misma: para mi fue todo ganancia. La justa sirvió para congregar a mi núcleo familiar por completo, por primera vez en año y medio, e igualmente importante encontrarme con amigos entrañables y recorrer los lugares que guardan mis primeros recuerdos en mi ciudad natal.


Además de presenciar los partidos en que intervino mi hijo Rodrigo con el representativo Leones del Quilpué, estuvimos hospedados en uno de los iconos urbanos más llamativos de todo el país, el emblemático Hotel Matum, conservado como una joya, visité también mi primer hogar en la General Cabrera (casa número 40), esa leyenda obsequiosa llamada Casa Bader, el cementerio de la 30 de Marzo (ahí, en la misma entrada reposa mi tía y madrina Mirtha Campillo Pérez y más allá mi médico y mejor amigo Franklin Betances Vargas, como últimos afectos que pasaron a otras dimensiones), el Monumento a los Héroes de la Restauración, la Catedral Santiago Apóstol, Iglesia de la Altagracia donde fui bautizado e hice mi primera comunión y el simbólico Centro de Recreo. Amen de un recorrido gastronómico de primer orden.

Por supuesto, en la Arena del Cibao pude ver y confirmar que las cosas poco cambian en el baloncesto dominicano; quizás muchos quieren que permanezca estático y viva en un limbo de proporciones aún no cuantificadas. Una mujer morena / resuelta en luna / se derrama hilo a hilo / sobre la cuna // Ríete, niño / que te tragas la luna / cuando es preciso (Nanas de la Cebolla, Miguel Hernández, 1939).

Cualquier animal de dos patas tenía una acreditación de prensa; el tufillo a azufre que dejaba a cada paso el presidente de la Federación Dominicana de Baloncesto (FEDOMBAL), Rafael Fernando Uribe Vásquez, también conocido por el alias de Rafelin; comprobé que hay quienes quieren vestirse de sedas y de reina y eternamente serán monas, como aquel coprófago incapaz de procurarse recursos a base de trabajo que sigue lambiendo y arrastrándose (la noche del sábado, para más señas, suplicaba a varios amigos que le dieran un pa’ lo’ pie’ en un hotel de los Jardines Metropolitanos).


Muchas caras deambulaban por las graderías; componentes y productores de los programas que se difundían en ESPN-Radio Dominicana y que por falta de calidad quedaron fuera del dial. De esa programación sólo sobrevivió La Voz del Fanático, aunque me gustaría encontrar el regreso casi inmediato de Nación Deportiva y Futbol Sólo Futbol. Nadie jamás ha cuestionado la responsabilidad de César Rosario, primero en el fracaso y posteriormente en la negación de un remanso deportivo a los fanáticos del país; con sus adefesios, que los había por pi’pa’ y buenos programas; además de la repetición los últimos meses de un programa aburrido y sin contenido llamado A los Golpes.

Recordé también un anuncio que corre cuando usted entra en los supermercados Pola: “hay una vaca en el pasillo siete exigiendo sus derechos de autor”, mientras intentaba definir si miraba indubitablemente a un rumiante o a un cronista deportivo de Santo Domingo; el tipo daba la impresión que quería salirse de su butaca ante su inmensidad corporal, pero tampoco dejaba de engullir. El impresentable valentón de los sainetes que ladra como perro pero de morder, nada. Todo el malo es cobarde, decía mi abuela.  Y un vomito ambulante llamado Ezequiel Sosa, repugnante personaje, con pinta de conductor de voladora, quizás como la mayoría de ellos sin el quinto de básica aprobado, que pretendía dictarme normas conductuales.

Toda esa pestilencia me la tuve que tragar, como el tiburón podrido de Danilo Medina Sánchez, pero el gozo fue mayor. Comprobé también la observación que ya me habían hecho varios amigos: los dueños de los equipos de la LNB (Liga Nacional de Baloncesto) por un lado, en camaradería, y el beatón de Rafelin tratando de colocarse cerca, como para que los capitanes lo vieran. No estaba Najri (Eduardo Najri) o por lo menos no lo divisé, para ratificar lo que pasó en España, pero seguro que si Micalo (Micalo Bermúdez) o Machoncito (Máximo Martín Gómez Villanueva) le picaban un ojo, ahí hubiera estado, con el rabito entre las piernas, sonriente y presto al servilismo.

¿Qué decir del Bello Andino del presidente de la FEDOMBAL?... ¡vaya comparación!... su confidente, su cómplice, el conocedor de su absoluta intimidad, no debe sentirse muy a gusto, siempre detrás como un perrito faldero, sin identidad. El tipo se burla hasta de los más cercanos, hasta de su sombra, ¡hasta de su Bello Andino!... su incapacidad para discernir lo vuelve perverso, cobarde, cínico y de poco valor. Alondra de mi casa / ríete mucho // es tu risa en los ojos / la luz del mundo // Ríete tanto / que en el alma al oírte / bata el espacio (Hernández, obra citada).

Llegó la hora de las despedidas y el partido final entre Malvin de Montevideo y Metros de Santiago otorgaba el pase a la segunda fase de la Liga de las Américas, ¡una putada!

Nicolás Mazzarino que debutó con la selección charrua en el 1997 en el marco del Pre-Olímpico de Montevideo hizo de las suyas.

Se me preguntó que quien quería que ganara y la respuesta: “no tengo banderías, vine a apoyar a mi hijo, este montaje es importante para el baloncesto dominicano, pero a los Metros le conviene que gane el rival de esta noche, no se si mucha gente pueda entender esta posición”.

La explicación: el formato de la justa implica que de los Metros pasar a la segunda hora deberán permanecer en el dique seco por lo menos cinco semanas, mientras se debaten los grupos restantes y se eligen los escenarios siguientes. En ese tiempo estarán iniciados los torneos de Santiago y del Distrito Nacional, por lo que la plantilla sufriría nuevos cambios. Tampoco se estará a tiempo para que Víctor Liz, Orlando Sánchez, Eloy Vargas y otras figuras puedan retornar. De este grupo, ya se anunció que Yack Michael Martínez estará en Puerto Rico con los Caciques de Humacao. Tu risa me hace libre / me pone alas // Soledades me quita / cárcel me arranca // Boca que vuela / corazón que en tus labios / relampaguea (Hernández, obra citada).

Las malas lenguas señalan que la fortuna de Micalo Bermúdez es inagotable, pero de todas formas sería un gasto innecesario, más allá de los antojos o sueños de niño.

Tampoco se que tanto sabe Bermúdez de baloncesto pero la imagen de César St. Hilaire como ejecutivo de los Metros deja mucho que desear. Es la misma que arrastra desde la Copa de las Américas del 2009, donde fue co-gerente con Uribe Vásquez, ambos sin preparación ninguna, y aquello es una comedia de muy mal gusto; no hay diferencias entre lo que muestra en escena Boca de Piano (Fausto Mata) o Pachulí (Tony Pascual) y el trabajo a lo externo de este personaje.


François-René, vizconde de Chateaubriand (1768-1848), recalcó el término “mal del siglo” en tiempos tan pretéritos como el siglo XIX para referirse a una crisis de creencias y valores que impregnaba a la sociedad occidental; parecería que el baloncesto dominicano no ha superado esos espacios. En el siglo pasado vivimos la era de las ansiedades, pero en este siglo XXI vivimos la sociedad depresiva. Las ilusiones parecen arquearse, se pretenden nuevos proyectos sobre las cenizas de los anteriores, colapsa la egolatría y las inquietudes se exceden. El estrés, el hastío, la falta de ideales marcan diferencias entre una persona que se siente apta para el futuro y aquellos lastrados por la nostalgia.

El oportunismo deportivo dominicano, en el que la avidez, la avaricia, la procacidad, la desfachatez y la desvergüenza van de la mano, debe ser detallado desde una perspectiva más amplia que la de las motivaciones y las consecuencias que provocan quienes lo practican. El desgaste de quienes sacan provecho personal de las situaciones que les presenta la vida pública y que con admirable adaptación prosperan tanto en un régimen ideológico como en otro tiene un efecto corrosivo no sólo para la imagen de las instituciones, sino también por la manera en que degradan el vínculo de confianza de la sociedad con sus representantes. El presidente de la FEDOMBAL es un excelente ejemplo de esto.

Al practicar el populismo mediático como un subproducto de la política deportiva Uribe Vásquez no hace otra cosa que degradarla. Más aún, relega la misión trascendental que ésta tiene, como lo es conducir a las distintas disciplinas, fortalecer las instituciones y administrar el patrimonio del baloncesto dominicano. Es tu risa la espada / más victoriosa // Vencedor de las flores / y las alondras // Rival del sol // Porvenir de mis huesos / y de mi amor (Hernández, obra citada).


Los nuevos dogmas pretenden afirmar que todo ha cambiado; reconocer la diferencia entre escenario y utopía suele implicar sufrimiento. La moral y la felicidad, que eran agua y aceite, hoy son cómplices. Hemos pasado de valorar el deber a estimar los placeres, a apreciar lo profano. En vez de abnegación, integridad y virtuosismo, escapismo tenaz; en vez de privacidad, violencia mediática y frivolidad.

Las depresiones y las manías, como la onicofagia, son la cara oscura de la intimidad contemporánea, son algo más que una reacción química, hay muchos vectores que inciden y efectivamente hay un desequilibrio neuroquímico; muchas de esas manías se clasifican también como acciones delictivas. La clínica nos coteja con sufrimientos diversos: oscilaciones de la autoestima, identidades borrosas, hipocondría, trastornos del sueño y del apetito, ausencia de proyectos, crisis de ideales y valores, ataques de pánico, adicciones y trastornos somáticos diversos.

La degradación de los valores colectivos repercute sobre los valores personales. El vale todo ético que desde siempre ha pretendido instaurar la torrecilla de la FEDOMBAL no puede sino hacer tambalear su propia autoestima, identidad y estados de ánimo. Desperté de ser niño // Nunca despiertes // triste llevo la boca // Ríete siempre // Siempre en la cuna / defendiendo la risa / pluma por pluma (Hernández, obra citada).

Toda agenda tiene sus exigencias, entre ellas, institucionalizar el proceso de toma de decisiones. Respetar el proceso de elección interna de las asociaciones provinciales, la búsqueda de consenso y del diálogo, la aceptación de que esos instrumentos deberían ser el mejor sistema de representación de los trabajadores del baloncesto. Las prácticas maliciosas y clientelares quedarán relegadas en una sociedad que ya demostró, con la asistencia de las nuevas tecnologías, la rapidez con la que puede cambiar la adhesión de los encargados a brindar una mejor disciplina.


Observando los actores del baloncesto dominicano es innegable que estamos más cerca del padre simio que la del hombre evolucionado. Si Georg Wilhelm Friedrich Hegel (1770-1831), revolucionario de la dialéctica, estudiara la historia y desarrollo reciente de la actividad en el país estaría en la necesidad de variar muchas de sus posturas: “en la historia las cosas suceden cuando no hay más remedio y tienen que suceder”. El avance progresista ha venido debilitándose desde Frank Herasme, pero está en su punto culminante con el torpe y mostrenco Rafelin.

Al final, yo feliz. Me gustó lo que vi de mi hijo dentro de una cancha, pese a ser una adición de último momento en el combinado chileno. Ahora, con más fe puedo sacarles la lengua a todos los hijos de las remil putas que no creyeron en su presencia ni en su capacidad dentro de la selección nacional de República Dominicana. Vuela niño en la doble / luna de pecho // Él, triste de cebolla // Tú, satisfecho // No te derrumbes // No sepas lo que pasa / ni lo que ocurre (Hernández, Obra citada).

Uribe Vásquez, Eduardo Najri y todos sus secuaces y lambiscones se cagaron lejos de las instalaciones sanitarias; Joaquín Balaguer Ricardo (1906-2002) dijo una vez: “se hicieron pupú fuera del cajón”, estos quedaron visualizados en esa frase.


Para mí, son y serán eternamente unos mal paridos.

Aunque ya más de uno empezó a llorar temprano, dizque porque tenía la lágrima profunda.



 Ilustraciones de Geninne D. Zlatkis

1 comentario:

  1. jajajaja usted lo que es un ridiculo rodrigo no tiene ni tendra para formar parte de la seleccion nacional dominicana solo tiene tamaño mas nada pero es un manilon usted lo sabe arrazando en esa liga chilena que es un torneo inferior hasta a los superiores que se juegan aqui es cierto que uribe es un loco y que najri no sabe de basket pero entienda que rodrigo no tiene suficiente talento para formar parte de la RDSeleccion pase buenas

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