miércoles, 13 de febrero de 2019


Vuelos hermenéuticos

Febrero 09 del 2019
(estas notas se habían rezagado en el tintero)


Hace ocho días (Feb.01.2019) los celtas celebraron a Imbolc, figura asociada con el ritual de la fertilidad, literalmente significa “vientre de la madre”; en lo que corre el mes hemos conocido de nombres que ya sólo recuerda el almanaque de Bristol (su nombre original es Almanaque Pintoresco de Bristol, y se publica continuamente desde 1832​), Agripano (1), Sigeberto (1), Urso (1), Aproniano (2), Burcardo (2), Flósculo (2), Teófano (2), Azarías (3), Leonio (3), Lupicino (3), Tigrido (3), Wereburga (3), Helinando (3), Aventino (4), Eutiquio (4), Fileas (4), Filoromo (4), Gémino (4), Rabano Mauro (4), Albuino (5), Avito (5), Calamanda (5), Ingenuino (5), Antoliano (6), Brinolfo (6), Renula (6), Vedasto (6), por su parte el día siete era de Nivardo y Ricerio.
Imbloc, versión de Lily Wright

Ayer ocho fue santa Cointa, Honorato, Jovencio, Lacuto, Nicecio; hoy es Ansberto, Marón, Nicéforo, Rainaldo, Teliavo, y el fraile capuchino Leopoldo de Alpandeire.

Así como nombres ya en desuso tiene el santoral católico, así mismo dice tener hijos Rafael Fernando Uribe Vásquez, actual presidente de la Federación Dominicana de Baloncesto (FEDOMBAL), a quien todos conocemos por el quintopatiero mote de Rafelin, ayer fue a Ángel Luis Delgado que mencionó, después de debutar en la NBA, hoy subió una foto con Ronald Roberts y lo llamó “el buen hijo”… así ha pasado con todos los miembros de las selecciones menores del país.

¿De qué galas quiere hacer este Rafelin?... ¿exceso de una testosterona que de seguro no tiene?... quizás la hipertrofia muscular que pretendió adquirir tiempo atrás para parecerse a Fidias lo trastocó, incapaz de sacar pecho o desarrollar otros músculos. Nuestro personaje no es ajeno a que repetidamente se le cuestione su inteligencia y su armonía mental.
Relieves de Fidias en el Partenón

Alfredo Morales fue un pedagogo exquisito, con justa razón un ídolo para todo el que pasó por sus manos, pero el noble hermano de las Escuelas Cristianas estuvo a punto de hacer naufragar mi graduación como bachiller en el Colegio Dominicano De La Salle; allí impartía filosofía y las dos primeras calificaciones me llegaron en números rojos. Al final lo doblegué como jamás el mismo imaginó, por supuesto lo celebré: me libró de los exámenes finales de la materia y terminó llamándome vengativo. En su honor, el Coro Estudiantil, que fundó, ofreció un concierto en Santiago en Feb.08.2019.

En una de sus tantas salidas, ante un aula que resultaba muy traviesa, respondió con una frase, que no decía gran cosa, pero que a mí me pegó: “el que habla de pelota es porque le gusta”. Como desde muy temprana edad me interesaba el tema deportivo no la olvidé.

Así de instantes se llena la vida, breves historias cargadas de imágenes concisas y otras que no lo son tanto, emociones y sentimientos con líneas estéticas comunes que se mantienen para siempre; bandas sonoras que nos seducen sobre planos de episodios vividos, llenos de color y otros de grises interminables, trabajados para taladrar la unidad de los sentidos y reforzar lo único que nos llevamos al pasar la página.
Alfredo A. Morales fsc

Me timbra el teléfono, el sol aún no deslumbraba y recordé: “eran la cinco e’ la mañana, un seminarista, un obrero (un chismoso buscando nombradía, agrego) con mil papeles de solvencia que no les da pa’ ser sinceros”. La última vez que atendí a esa hora fue para recibir una noticia destemplada, en pocos días harán 17 años… en esa fecha, horas después, estaba en los salones de la Funeraria Blandino con un hondísimo penar.

Atendí y una voz lisérgica, quizás envuelta en alucinógenos, quizás constreñían sus cuerdas vocales algún medicamento, porque hasta el tufillo brotaba por el hilo telefónico, antes de soltarme, sin ton ni son: “a Rafelin no le gusta que insinúes que es maricón”.

¡Errrr pipo!”… ¡a este, qué ladilla se le encaramó!... dirían en mi campo, después de esa brevísima, simple y estrafalaria sesión de toreo sin capote: no entendí el motivo, mucho menos la hora; recordé a mi abuela Dorita Pérez Rancier cuando repetía: “todo el malo es cobarde”. Este se escudaba en horas inoportunas e modulaciones y torcimientos vocales.


Acerté a responder, como por iluminación divina: “dígale a esa basurita de hombre que yo no he insinuado jamás que lo sea, tampoco he estado de almohada en sus tropelías para afirmarlo, pero como aquel artículo que usted mismo me remitió (porque atiné a reconocer la voz del impresentable interlocutor, a pesar de sus inflexiones), hermenéuticamente para mí no es un maricón, es un mariconazo con mayúsculas y en negritas” (http://pensandoendominicana.blogspot.com/2014/04/la-hermeneutica-del-mamaguebo.html).

No sé si el mensaje le llegó al manoseado Rafelin, pero cuestionarse eterna e íntimamente sus preferencias sexuales a estas alturas de la vida, proclamar sus vacilaciones menudeadas veces da para tomar caldo de cabeza; ello nos muestra un individuo de escasa estabilidad en sus emociones (la doble moral y el replicado accionar perenemente vigentes en cada uno de sus pasos) y así considera que “tirando manteca a los tejados” tiene ganado un asiento a la diestra del Padre. Lecturas y expectativas acerca de lo “femenino” y “masculino” que a mí no me preocupan. En la construcción de ese pedazo de carne con ojos y boca y poca cosa más, algo falló o podemos afirmar sin muchas elucubraciones que es un ser viviente fallido.

En mi concepto las preferencias sexuales se respetan, es un principio rector, pero en este país que pretende colocarse una etiqueta primer mundista sin resolver los problemas fundamentales de las mayorías, sin educación y con un 18 por ciento de sus habitantes obrando en letrinas en pleno siglo XXI, hay gente honesta que por una preferencia sexual alternativa tiene que mantener una lucha constante en frentes misceláneos, porque el resto priorizamos clientelismo, servilismo, caciquismos, impunidades y otras muchas perversidades, adláteres de revoluciones inexistentes que se protegen entre sí y que sólo han servido para dejarnos históricamente un país renco.
Gato en viaje lisérgico

Existe homofobia entre nosotros frente a los colectivos homosexuales, imperan actitudes de desprecio y discriminación, cuando lo que realmente tiene que salir del armario, desde este mismo instante,  es la estructura pseudo institucional que vive República Dominicana; toda una enorme mentira dispuesta para que los funcionarios de turno saqueen, desvalijen, defrauden, asalten, el país.

Se continúan fomentando climas de intolerancia y discriminación, para vivir entre gente cuya cotidianidad es el silencio, la soledad y un entorno hostil. Descartamos toda información que nos faciliten referentes homosexuales positivos. Sin embargo, escucharemos continuamente mensajes de odio, burla, sarcasmo y rechazo hacia los homosexuales.


Los que no se atreven a más nada, se burlan de sus congéneres, adoptando posiciones hipócritas, descartando que sean maricones, maricas, mariquitas, locas, bugarrones (del italiano buggerone), mariposas, maripositas, ninfos y filenos (aquellos que de improviso suelen pasar de maricón a simplemente asexual). Existe la tendencia actual de los discriminados que se han convertido también en discriminadores. ¿Sentirá nuestro personaje plumofobia?... la plumofobia es el miedo y rechazo a los hombres afeminados

Como apareció en El Mundo (Madrid, España) en Jun.27.2018: “el italiano Andrea Puggeli, otro activista, profundiza en este asunto y sostiene que "la plumofobia va en contra de aquellas personas que se salen de sus roles de género: contra las mujeres que no hacen lo que tienen que hacer las mujeres y contra los hombres que no hacen lo que se supone que deben de hacer los hombres". Una reflexión que enlaza directamente con el cada vez más mediático concepto de heteropatriarcado, entendido como sistema socio-político en el que el género masculino y la heterosexualidad gozan de una supremacía latente y donde el binarismo de género hombre / mujer y sus desequilibrados roles son los que configuran la realidad social”.


En El Universal de México apareció la siguiente descripción (Jun.22.2018): “Mariquita es la feminización de maricón; mariposas se usa para llamar a alguien muy flamboyant, un gay muy obvio, muy femenino; ninfos viene seguramente de ninfas o tal vez de nefando, hay una novela de José Tomás de Cuellar que se llama Chucho el ninfo (1871). Marica: desde una visión muy machista un poeta es casi un maricón (porque su labor es cursi), aunque no lo sea. Y Rubén Darío era una “loca” porque pertenece al siglo XIX, un siglo muy camp, muy amanerado, más en un sentido estético que un sentido sexual: camp, según Susan Sontag, es algo estéticamente afeminado, como las películas de Visconti, donde la escenografía es evidente de una loca, llena, saturada de arreglos y ornamentos, justo como la poesía de Darío. Finalmente, le dije, sería interesante consultar la versión al inglés de la novela de Bolaño (Roberto Bolaño Ávalos, Abr.28.1953 en Santiago de Chile; Jul.15.2003 en el Hospital Universitario Valle de Hebrón, Barcelona, España. escritor y poeta chileno, autor de más de dos decenas de libros, entre los cuales destacan sus novelas Los detectives salvajes, ganadora del Premio Herralde en 1998 y el Premio Rómulo Gallegos en 1999) para ver cómo resolvió el traductor ese párrafo sin usar gay u homosexual (seguramente usó faggot, queer, faeries, flamboyant, queens…). Por fortuna, me dijo ella, tenía un hijo gay que con la descripción podía ayudarla a encontrar las palabras exactas”.
Roberto Bolaño Ávalos

Aquí hay demasiados personajes que quieren mostrar un exceso de la hormona sexual masculina que es segregada especialmente en el testículo, y que tiene efectos morfológicos, metabólicos y psíquicos, pero tienen el tanque vacío, “hombres de pelo en pecho” siendo barbilampiños.

La sociedad cohíbe y atenaza, empezando por la cúpula católica o nada más elocuente que aquella frase de Nicolás de Jesús López Rodríguez (Oct.31.1931 en La Vega, hoy cardenal emérito): “debajo de esta sotana hay un hombre”. Por eso salir del armario es cosa de altísima osadía; algunas mariquitas prefieren viajar allende nuestras fronteras y esconderse de amigos y familiares para que no se conozcan sus espasmódicas debilidades, sus tropelías, acompañarse del amante de ocasión donde pocos descubran sus instintos y sus verdaderas pasiones.

Por cierto, Rafelin calló, enmudeció, se escondió, miró a otro lado, se hizo “el chivo loco”, cuando desde Santiago, miembros de una organización deportiva con la que vive una eterna relación de amor/odio, publicaron unas caricaturas señalando descarnadamente que había salido del armario.

Hay otros que sólo están sobre la faz de la tierra para llevar y traer chismes, disfrazándose de mansos corderos, pero todos hemos ido conociendo la caladura de estos pelafustanes. Cuentistas a los que le asignan coronas, murmuradores, cizañeros, carroñeros, habladores, indiscretos, liantes, alcahuetes, enredadores, correveidile, metomentodo, liosos, embrolladores, mentirosos, necios, trapisondistas, badajos, e incapaces. Pretendidos filósofos sesohuecos, inhábiles de pensar por sí mismos, porque un esfuerzo resulta tremendamente agotador y los pueden patear.


Un servidor no se esconde, no usa artificios ni escribe bajo pseudónimos; el presidente de FEDOMBAL sabe perfectamente lo que pienso sobre él y sus actitudes, todas malsanas perjudiciales, venenosas, desfavorables, enfermizas, insalubres. Él que aún lo ignore, sólo tiene que revisar lo que he escrito; quizás demasiado para un carajo tan ruin, pero que cada vez ofrece un punto más absurdo que el anterior.

En El Inmortal (1947) Jorge Luis Borges, usa la figura de un legionario romano (para describir a un desertor, personaje que se repite en sus cuentos) que encuentra un río que le da la inmortalidad, y después de dos mil años, ya cansado de la condición, toma agua de otro río que le devuelve la condición de perecedero; se encuentra con un troglodita analfabeto que resulta ser el sempiterno Homero, que con el paso de los siglos se había olvidado de que era el autor de La Odisea, los recuerdos del legionario se confunden con los de Homero: "cuando se acerca el fin, ya no quedan imágenes del recuerdo; sólo quedan palabras. Palabras, palabras desplazadas y mutiladas, palabras de otros, fue la pobre limosna que le dejaron las horas y los siglos".

A mí me crían dándome pela con manguera… y eso me enseño que problema se le da a cualquiera…  tranquilko fiera, siéntate, prende un cigarro; si el papel no pega le damos un doble de catarro… pa' ensuciarme la mano contigo mejor me la embarro”… la realidad es que alrededor de Rafelin hay demasiados que habría: “que machetearlos pa’ que boten cachup del Victorina” (frase modificada, el texto señala: “tu va a machetear pa’ que bote cachup del Victorina”, (Cría perico...pa' que tenga cotorra del urbano Químico Ultra Mega).
Jorge Luis Borges

Acabo de enterarme que en la fecha está de cumpleaños Rafelin, vaya coincidencia, el beatón sonriente, dueño de todas las verdades, según él, pero como lo definió un amigo: “personaje extraño; ambicioso; perverso; sin afecto natural. Perseguidor de objetivos a como dé lugar. Elemento opaco. Amigo de la ilegalidad. Un chantajista, que no le importa quitarle el trabajo a uno de sus dependientes. Persona no confiable. Sin amigos; solo relaciones interesadas a través de la prebenda. Una especie de rey Midas, que en vez de convertir en oro todo lo que toca, lo corrompe. Un personaje que pasará a la historia, como el aniquilador del baloncesto dominicano. Sorprende que llegó a cobrar sin trabajar el salario de cinco médicos dominicanos, en el Ministerio de Salud Pública, sin funciones conocidas. Uno de los dirigentes más impopulares; sin carisma; sin discurso; sin recursos para la oratoria; ni la transmisión del pensamiento a través de la escritura. La cualquierización convertido en dirigente. Una especie de Frankenstein, nacido del préstamo y la usura. Parido por sus antecesores dirigentes que vieron en sus préstamos una buena ocasión para conseguir dinero. Para concluir: Un tipo excluyente, que utiliza a las personas y que se ha empeñado en borrar la historia del baloncesto dominicano. El que ha puesto el negocio por encima del deporte”.

Ahí no cabe un piropo más. ¡Jesusantiiiisimo!


Yo prefiero a mil veces más a un ser productivo y honesto como Juan Carlos Alvelo (como coloca en sus redes sociales: Juan Carlos Albelo, @jcalbelo… hijo de Yolanda Arvelo, hermano de Prenda y Pablo, amigo de muchos, enemigo de otros, productor de televisión y radio, ultramaratonista, comunicador, intenta ser honesto, y gay), para colocar un ejemplo, quien para mi gusto ha producido uno de los mejores programas de la televisión dominicana actual, que no se esconde y da la cara por su comunidad, para poner un ejemplo, que a un Rafelin, con aires de suficiencia, y que más allá de su pretendido éxito, debido a conexiones políticas y según las malas lenguas, debido a otras muchas malas artes, quien aún no ha demostrado como se le mueve el slider o el knockerball.

A este Rafelin apenas Mario Guerrero Heredia, Manny López, El Yipi (Junior Alexander Páez Atez), Israel Eduardo Altagracia Mariano, Enmanuel Trinidad Puello, Danilo Darío Díaz Vizcaíno, Nelson Saldivar López, Melvyn Miedlop López Guillen, Fernando Arturo Teruel Capri, David Zabala, Elka Jiménez Garrido, Jaime David Fernández Mirabal, José Esteban Borromé Frías, Milton Díaz, Fausto Julián Suero Bueno, también conocido como La Reina del Bochinche (¿reina?... ¿no es otro de los que se vive jactando de tener pelo en el pecho?), Fernando Gómez, a quien todos conocen como Piraña (¿qué dotes carnívoras tendrá este sujeto?... por supuesto dependerá de que familia de Serrasalminae pertenezca), Juan Elpidio Matos Pérez, y el entrenador del mote añingotado, Maita, José Mercedes Del Rosario lo ven como aguacate en patio ajeno, la única verdad es que perdió por lejos ante otros tantos que pretendió llevar a su redil y no cayeron en sus perversidades.


La mitad de los nombrados hace 10 años, para ser misericordiosos, no contaban en el mundo del baloncesto dominicano. Patagotitan mayorum, impuestos por Rafelin.

Como diría un mexicano: ¡un puto que algún día se lo llevará la calaca!


No hay comentarios:

Publicar un comentario