Metros ante un compromiso de envergadura

La Liga Nacional de Baloncesto (LNB), siempre pretendiendo ganar protagonismo, anuncia que junto a la Federación Dominicana de Baloncesto (FEDOMBAL) y la Federación Internacional de Baloncesto (FIBA) presentará en la ciudad de Santiago el “Grupo A” de la Liga de las Américas, entre los días 15 y 17 de enero, por supuesto con la intervención de los Metros representantes del corazón cibaeño. Hasta donde sabía, el evento lo organiza la FIBA, FEDOMBAL es garante y por supuesto, la ciudad que sirve de localía pone una gruesa suma de efectivo, las instalaciones y demás comodidades.

José Vargas y Tim Duncan - McDonald's 1999

En el país no estamos acostumbrados a este tipo de eventos; una serie muy corta frente a equipos de los que no tenemos referencia… he dicho siempre que el baloncesto de acá es escasamente profesional. Nos interesa nada más lo inmediato; el reino de los ciegos donde los vivos hacen creer que son reyes, por ejemplo, el caso de los entrenadores y capataces de la CODEBAL, Melvyn López Guillen y José –Maita- Mercedes Del Rosario, a quienes alguien les dio la oportunidad de exhibirse en el exterior, y nunca más. ¿Por qué?... ¿incompetentes?... ¿sin calidad ni claridad en sus planteamientos para hacerse sentir en un equipo con ambiciones?

En 1999, a la sazón con Julio Subero como presidente de la FEDOMBAL se presentó la Copa de las Américas del Clubes Campeones y recuerdo que actuaban el Club de Regatas Vasco da Gama de Brasil, que tenía en sus filas al dominicano José –El Grillo- Vargas, Sandro Varejão, Helio Rubens Jr. (Helinho), Rogerio Klaeke, Ricardinho Dos Santos, un incombustible Charle Byrd y como director de esa orquesta a Flor Meléndez; también Independiente de Neuquén, equipo argentino que contaba con la presidencia de un pintoresco Germán Vaccaro, quien posteriormente llegó a presidente de la Confederación Argentina de Baloncesto (CABB) y como entrenador a Mario Guzmán.

La actuación dominicana en la Liga de las Américas ha sido deprimente. La última intervención de factura local sucedió en el año 2012 con los Leones de Santo Domingo, quienes terminaron eliminados en la primera vuelta (1 victoria, 2 derrotas), se toparon con los Capitanes de Arecibo, Cocodrilos de Caracas y el brasileiro Joinville; integraron esos melenudos Jonathan Rodríguez, Alexis Montas, Juan Pablo Montas, Juan Coronado, Ricardo Soliver, Manuel Fortuna, Giancarlo Acosta, Eddie Elisma, Manuel Guzmán y los foráneos Casey Wohlleb, Evan Brock y Rogers Washington. Fortuna y Guzmán eran los únicos genuinos representantes de la franquicia. Brock resultó ser el líder en puntos y rebotes del quinteto.

Los Cañeros de La Romana estuvieron en la versión 2010-11, con los hermanos mismos Montas, Soliver, Guzmán, Maurice Carter, Reggie Charles, Andy Williams, Edward Santana, entre otros. En su grupo actuaron los mexicanos Halcones de Xalapa, UniCEUB de Brasilia y los uruguayos de Defensor Sporting, donde ahora está el pívot Eloy Vargas. No conocieron la victoria en tres salidas.

En el clásico 2007-08 estuvieron los Metros de Santiago con Joel Ramírez, Okaris Lenderborg, Julio Solano, Julio Duquela, Ángel Sánchez, el puertorriqueño Joel Curbelo, Aneuris Liriano y paro de contar. Finalizaron en la última posición entre 16 presentes.

Hubo también una vez unos Merengueros, formados a la carrera, para asistir a una pata de la justa que se celebró en Puerto Rico y donde había que tener visado para entrar a territorio de los Estados Unidos. Esta era la condición indispensable para acceder a estar entre los que viajaron a ese evento.

Aunque se nos hablará más de aspectos organizativos y de dinámicos organizadores, el espectáculo lo conforman los jugadores, y a ellos el baloncesto dominicano les está negando su espacio. Esta vez no será diferente. Quizás no haya un líder en los actuales momentos como cuando la memoria suele refrescarnos a Hugo Cabrera, Antonio Sibilio, Vinicio Muñoz, Evaristo Pérez, el propio Vargas, José –Boyón- Domínguez, Héctor –Junior- Gil, Carlos Martínez, Soterio Ramírez. Hoy es mucho Rafael Uribe Vásquez, mucho Eduardo Najri, mucho Micalo Bermúdez, mucho Antonio Mir, pero ninguno de ellos ha tirado jamás una pelota al cesto.

Esta calle al final tiene su nombre 
mi calle errante, de mi barrio triste 
ya no tiene un farol que la ilumine 
todo es sombras y tiniebla…

¡Todo acabó, ya nada existe!

 

Escudo de Malvin (Uruguay)

El equipo que correrá por República Dominicana en pocos días aún se desconoce, pero seguro nos iremos a los golpes, sí a los golpes primero, a los empujones y al juego muy físico, físico en extremo, y después a las individualidades y como diría El Mago Simón Alfonso Pemberton frente a cada largada de una tarde hípica, ¡a correr fanáticos! Volverá a ser el baloncesto dominicano de la ultiman década, un cuadrilátero de boxeo, una mesa de ping-pong y un hipódromo. Primará quien cierre la noche con más puntos y eso será lo que refleje la prensa. Nada más y nada menos.

Hermosa señal la que dejamos después de cada partido, a todas las instancias: golpes, jugadas de ida y vuelta por la falta de planificación y una corredera de un lado a otro de la cancha. Ese espectáculo les brindaremos a los visitantes. Buscaremos sorprender, imponernos a base de malas artes y nada más. Cada vez que un rival nos plante un juego ordenado, firme, con el manejo de los tiempos, entonces no nos sorprenderemos, caeremos aplastados por la disciplina, la seriedad, el compromiso, la ilusión y el orden del rival.

Tendremos un recogido de último minuto, un ven tu, como se le dice popularmente, que quizás entrene tres o cuatro días antes del evento. Como me señaló un conocer del juego: “no debes preocuparte por ello, los Metros saldrán con uñas y dientes a la cancha, y Micalo (Bermúdez) pondrá mucho dinero en juego para que hagan un buen papel”. Así estamos entendiendo el juego los dominicanos; así son nuestras ligas, el que invierta más en la etapa final, después de superar la vuelta regular, tendrá todas las posibilidades de coronarse… ¿y la fiscalización que debería tener FEDOMBAL sobre esas colaboraciones?

En la cita santiagués se verán las caras los locales y los representativos Leones de Quilpué (Chile), Malvín (Uruguay) y Mogí das Cruzes (Brasil).

Los Leones (región de Valparaíso) disputan en la actualidad los cuartos de finales de la Liga Nacional de Chile; su serie es contra el Deportivo Las Animas y en los momentos comandan la misma 2-0, al mejor de cinco encuentros. La dirección técnica está a cargo de Claudio Jorquera, su mejor hombre es el alero norteamericano Stanley Robinson (6’09), secundado por el también foráneo Travele Jones (6’08), completan titularidad Tomas Álvarez (6’01), Ignacio Carrión (6’08), Darrol Jones (6’05), Héctor Gómez (6’02) y el pequeñín Sebastian Figueroa (5’07).

Malvín es un quinteto integrado por jugadores muy veteranos como su capitán Nicolás Mazzarino (6’03), Federico Bavosi (6’02), Samuel Hoskin (6’09), Kenndy Winston (6’07) y el juvenil centro Matías Calfani (6’09, 23 años); Roque Newsone (6’09) y Marcel Souberbielle (6’07). Pablo López es su actual director técnico. Mazzarino fue un referente de la selección charrua y Calfani es una apuesta a futuro del baloncesto oriental (recuérdese que el nombre oficial del país es República Oriental del Uruguay), habiendo tomado sus primeros sorbos en la selección absoluta.

Mazzarino

Los brasileños son paulistas (están en el estado de Sao Paulo; los cariocas son de Río de Janeiro), localizados precisamente en la ciudad de Mogí das Cruzes, están bajo la conducción técnica de Danilo Padovani, y cuentan entre sus figuras con Larry Taylor (6’01), Guiherme Filipin (6’02), Lucas Mariano (6’10, 22 años), Tyrone Curnell (6’08), Shamell Stallworth (6’05), Paulo Prestes (6’11), Jimmy de Oliveira (6’03) y Elio Corazza (6’04). Taylor es el base nacionalizado que ha incluido el director técnico Rubén Magnano en la selección y Prestes y Mariano son candidatos a estar en la misma.

La gran interrogante es que presentarán los Metros sobre el tabloncillo de la Arena del Cibao. Como indicamos, Vargas está en Uruguay, su bastión ofensivo Víctor Liz en Venezuela (Guaiqueries de Nueva Esparta), lo mismo que el delantero Orlando Sánchez (Bucaneros de La Guaira). Robert Glenn está en Chicago esperando cupo de avión para reportarse a la Liga Profesional de Venezuela (Trotamundos de Valencia). Peter John Ramos está en China. Su otro refuerzo Kris Lang también está en Venezuela (Cocodrilos de Caracas) y Willie Reed está en la NBA con Brooklyn Nets.

 

Liz (5) y Ramírez con el balón

La última confrontación de los Metros fue el 2 de agosto, una fecha muy lejana, donde se impusieron a los Cañeros de La Romana y accedieron al título de la Liga Nacional de Baloncesto. Su entrenador era el novel puertorriqueño Carlos González Nieves que para la contienda del Baloncesto Superior Nacional de Puerto Rico estará con los Brujos de Guayama. De la fecha hacia acá, el equipo no tuvo ninguna participación adicional, ni un baile, ni una visita a una escuela o un hospital, con sus principales jugadores fuera del país, y de cara a la competición de enero es muy probable que se arme un equipo únicamente para participar en esta justa.

Así las cosas, los de la ciudad corazón dependerán del armador Joel Ramírez y del alero Amaury Filión, ambos veteranos jugadores, que ya vieron pasar lo mejor de sus habilidades, pero aún con suficiente combustible para encender un petardo. Detrás, el también veterano Osvaldo López (33 años) especialista en disparos de larga distancia, Jonathan Rodríguez, alero de 6’05 de estatura, que podría estar disponible, el también delantero Charlie Rodríguez (37 años), el pequeño delantero Ronald Tineo, de actuaciones recientes en los torneos regionales, y Maurice Carter (nativizado de 33 años).

Carlos González Nieves

Disponibles también, en el país, los veteranos Manuel Fortuna (6’01) y Jack Michael Martínez (6’08), ambos separados de la selección nacional absoluta este verano. El armador José Acosta, el tirador Rigoberto –El Vikingo- Mendoza, de aceptable participación con la selección nacional este verano, el delantero Sandro Encarnación (6’08) y quizás el novato Brian Martínez (6’09), ya invitado a la selección nacional.

Los Metros, sin dirigente aún, necesitan de todo un poco. La aventura podría ser muy dolorosa y si los fanáticos se encuentran con situaciones negativas al momento de mirar los marcadores, podrían apartarse del encerado de manera vertiginosa. Si el equipo de Bermúdez no llega a las finales de esta serie, la Arena del Cibao podría verse totalmente vacía en la fecha final.

La presentación de los Metros en esta Liga de las Américas evidencia el trágico destino del baloncesto donde practicamos la ilusión como base fundamental para satisfacer los aspectos puramente mediáticos; una federación donde se evaden responsabilidades, conste que también fue así con Frank Herasme, con Julio Subero, con Federico Lalane José, en mayor o menor grado, y coincidencialmente con la salida de importantes valores de la actividad como Faisal Abel Hasbún, Alejandro Abreu, Felix Aguasanta, Máximo Bernard Vásquez, Leandro De La Cruz, Humberto Rodríguez y Antonio Tueni, como mentores técnicos. Uribe Vásquez lo único que ha hecho es recoger la rémora de un cupo de ilegitimidades que algunas asociaciones y miembros del Comité Ejecutivo practican en nombre de un falso

Bermúdez

desarrollo.

En la convicción que esos amañados usos deben desaparecer bien vale la identificación de ellos. Así desfilan: la reelección indefinida de los miembros del Comité Ejecutivo de FEDOMBAL, incluyendo su presidente; la integración de ese mismo Comité Ejecutivo por exclusiva voluntad del presidente de turno; la pertenencia en las asociaciones provinciales por el deseo expreso del presidente de FEDOMBAL; la imposición de candidatos en las asociaciones provinciales, extendiéndose ya a los clubes que practican la disciplina y la sin razón de acordar una mayoría ficticia en cada proceso electoral.

La reelección indefinida de quienes encarnan el ejercicio ejecutivo del baloncesto dominicano es penosa experiencia que torna realizable bajo disfraz democrático, la inconcebible figura de un monarca.

En la línea de desaguisados hay quienes, normativa mediante, conciben que los miembros del Comité Ejecutivo de la FEDOMBAL y los presidentes de las asociaciones provinciales sean inanimadas figuras que pertenecen a las líneas de sumisión que se impone desde una cúpula unilateral. Por desgracia esos resabios de ilegitimidad son enormes.

Danilo Padovani

Los Metros serán el fiel reflejo del baloncesto dominicano de la actualidad. Vivimos en un orden donde los clubes formadores de talento están transnacionalizados, se han convertido en figuras anodinas, pueriles, insípidas y parasitas, pero también la misma LNB, tope referencial del baloncesto dominicano, según se nos quiere hacer creer, está en el mismo barril. Estamos lejos de un baloncesto de nivel, no importan los resultados.