40 minutos para la gloria
Para Rosendo Ledesma, amigo desde aquellos tiempos donde nos teníamos
nada, donde los intereses no se interponían entre las almas, donde la ciudad
era más chica y menos golpeante, y la solidaridad se multiplicaba.
La mañana me sorprende con unas afirmaciones de
Antonio –Chicho- Sibilio que son para analizar y pensar: “ustedes están a 40
minutos para que 10 millones de almas lean su historia”. Aquello hay que
tomarlo grafía a grafía ya que El
Monstruo de Haina no es la persona más locuaz sobre la faz de la tierra,
siempre desearíamos más de sus criterios y es uno de los dos dominicanos que ha
estado en las competencias de baloncesto de unos Juegos Olímpicos. El otro lo
fue Carmelo Travieso. Agregó además: “nadie sabe en que manos está el pase a
Londres”.
Concluidas todas las instancias sólo restan 40 minutos
para la conclusión del Pre-Olímpico de Caracas, donde ya Rusia y Lituania
alcanzaron su cometido. El avión de 12 puestos tiene 11 ocupados y aún hay dos
pasajeros en la sala de espera; ambos esperan la decisión de abordar para ir
tras la quimera, para los dominicanos será la primera ocasión en una cita
olímpica, para los nigerianos sería alcanzar su sexta Olimpiada de manera
consecutiva.
Nunca un equipo africano en este clásico había pasado
de la primera ronda, Nigeria se alzó con sus clasificaciones siempre de manera
directa. Ello habla de la historia de una nación y de las clasificaciones de
todo un continente que nos hemos empeñado en negar. En el repechaje pasado,
Puerto Rico sufrió la más punzante de las posibilidades, quedar entre los
cuatro y perder dos veces. Historia que nadie jamás quiere redundar, pero que
siempre transcurrirá.
![]() |
Rosty Ledesma |
Muy
temprano en la mañana recibo una notificación de esa leyenda del baloncesto
dominicano, no precisamente como jugador, que responde al nombre de Rosty
Ledesma, solicitándome mi opinión y posibilidades de derrotar a esos “morenos”.
Ledesma es uno de los personajes más gratificantes de todo lo que envuelve la
actividad, una bendición en un mar plagado de lobos. Le solicité un poco de
tiempo, porque la noche no había sido muy agradable.
La
única verdad es que no hay vuelta atrás. Esta noche se ocupará la última plaza
para estar en Londres, sin ninguna otra peripecia. Es quizás el partido más importante
que haya tenido que librar el baloncesto dominicano en toda su historia, una
victoria sería importante; una derrota abriría un mar de conjeturas, pero de
todas formas hemos llegado a instancias jamás soñadas.
Hay
que saltar con todo a la cancha y ejecutar sin cesar, ejecutar una vez tras
otra, sin desmayos, sin temor. Nadie espera la imposición de los más
exacerbados principios que se reclaman, la noche caerá serena sobre Caracas,
sobre el puente de los leones, el Monumento a Carabobo en El Paraíso, sobre el
Ávila, por la avenida Los Próceres, La Pastora , Chacao, en El Cafetal, en Montalbán, las
Colinas de Vista Alegre, los Palos Grandes, La Vega ; el único anhelo es ver el pabellón tricolor
más arriba, más arriba, mucho más.
![]() |
Ike Diogu |
Quizás
buena parte de lo que deseamos se queda en las letras de la canción Caballo de
Patas Blancas que cantaba Antonio Aguilar y que fue éxito en los tiempos de
nuestros padres: “caballo de patas
blancas, con herradura de acero, hay que brincar las trancas antes de que salga
el lucero, y vas a llevar en ancas a la mujer que yo quiero”.
Nigeria,
esa de jugadores tan negros como nosotros, intentó en años anteriores con dos
técnicos con experiencia NBA, Sam Vicent y John Lucas. El primero de
recordación para la tropa de los Leones de Santo Domingo y Eduardo Najri, quien
adujo una infección gastrointestinal y se marchó del país (ello le abrió las
puertas en la conducción del equipo a José –Maita- Mercedes). Ahora están en
manos del local Ayodele Bakare, señalado como un maestro en el movimiento de
sus fichas.
Llama
la atención que 9 de los jugadores de la escuadra nacieron en los Estados
Unidos; de todo estar correcto, tienen un sistema de reclutamiento muy
efectivo. Hay chicos de estos que han jugado en Wake Forest, Arizona State,
George Mason, Maryland y Nebraska, todas instituciones de primer nivel.
En
Caracas los nigerianos perdieron en su debut frente a los locales, por apenas 2
tantos, pero se recuperaron para superar a Lituania, en un partido donde todo
el mundo pensó que cumplirían y se marcharían a casa. Se especula que también
los lituanos prefirieron no toparse con los griegos en los cuartos de finales.
Lo cierto es que estas Águilas Verdes
pasaron por encima de los helenos, por la minima, en un partido donde todos
suponíamos estaba de un solo lado; así llegó la sorpresa mayúscula del Pre-Olímpico.
Ayer
el esfuerzo no fue suficiente para doblegar a los rusos y hoy están en estas
instancias frente al combinado dominicano. Quizás con la ventaja única que han
estado en todos los grandes escenarios mundialistas.
Bakare
trata de insuflar confianza y serenidad a sus dirigidos todo el camino. No
desmaya en su accionar y cuenta con un equipo altamente atlético. Podrían
alegar que el quinteto no está completo, podría incluirse a un Salomon Alabi
(7’01, C, 1988, Toronto Raptors), pero de que tienen un arsenal ofensivo, lo
tienen. En la competencia el combinado acumula porcentajes interesantes: 45.9
desde el campo, 34.4 detrás del arco y 76.9 desde la línea.
![]() |
Al-Farouq Aminui |
Una
de las primeras opciones a la hora de las ejecuciones es el delantero Al-Farouq
Aminui (New Orleans Hornets), egresado de Wake Forest University, con 6’09 y 200 libras . Habilidoso,
seguro, juega generalmente en la posición tres, pero busca los rebotes y
comparte con el resto de la escuadra. Sobre la pista
se transforma en una máquina de hacer puntos y jugadas para la historia. No hay
récord que se le resista. El
tirador Adeola Dagunduro (6’05, 200, SG, University of Nebraska) fue una bomba
a su paso por el colegial en los Estados Unidos y aquí fue un verdugo contra
los griegos, “una metralleta para ser descubierta”.
Ekene
Ibekwe (6’09, 220, PF, Jul.19.1985) no las ha tenido todas consigo esta vez,
pero es atlético, habilidoso y cumple a ambos lados de la cancha. Pasó por la Universidad de
Maryland donde escribió una historia fascinante, es apenas el cuarto jugador de
esa institución, brillante por demás y plagadas de nombres con aureola, que reúne
mil puntos, 700 rebotes y 200 lances bloqueados.
Debajo
de los tableros el obstáculo es Ike Diogu, 6’08, 250 libras de peso,
egresado de Arizona State, refuerzo de los Capitanes de Arecibo en Puerto Rico,
actualmente en China con los Xinjiang
Flying Tigers con toda una historia detrás para un hombre nacido en
Sep.11.1983 en la ciudad de Buffalo (Nueva York), de donde es Willie –La
Boa- Jones. El hombre no sólo ha sido
dominante en la zona pintada, también ha aportado en este periplo 11.6 tantos
por juego.
Anthony
Skinn es el armador (6’01, 175, Feb.08.2983), encargado de poner la pelota en
manos de los demás, tiene cierta virtud ofensiva que trata de aprovechar en
beneficio de los propios. Pasó por la modesta George Mason University.
Pero
Nigeria también necesita de su banca, hoy como nunca, y el juego tiene que
pasar por las manos del otro Aminu, de Obasohan, de Oguchi y de Oyedeji.
Apellidos que no se escriben fácil, pero tampoco se pronuncian de manera
expedita para nosotros.
Aminu
(6’10, 1987), hermano del de New Orleans, estuvo en Georgia Tech donde en sus
últimos dos años condujo con autoridad a esa institución en una conferencia tan
fuerte como la SEC ,
actualmente juega para el Elain Chalon en Francia con muy buenos números.
Derrick Obasohan fue este mismo año refuerzo de los Cocodrilos de Caracas
(6’07), es un arma letal desde la media cancha, estuvo en la Universidad de Texas
en Arlington. Chamberlain Oguchi (6’06, 1986) es un delantero pequeño que pasó
por la Universidad
de Oregon y terminó su elegibilidad académica en Southern Illinois University. Olumide
Oyedeji (6’10) fue draft de Seattle
Supersonics, es un veterano de cientos de batallas y un trotamundos del
baloncesto.
A
grandes rasgos esos son nuestros rivales de ocasión. Es un conjunto que juega
en equipo, maneja el balón, sabe golpear, tiene un juego interior sólido y
puede brindar una sorpresa. La selección de este equipo casi “made in USA” en
su versión para el clásico caraqueño tiene muchos matices, pero el más
importante es que es un grupo de hombres curtidos en la actividad, con
excelentes marcas en el plano internacional, relativamente joven y con ganas de
mostrar que están cerca de los grandes, al hálito de una mirada, aún a las
puertas de la gloria deportiva.
Decía
Lucila Godoy Alcayaga, a quien todos conocemos como Gabriela Mistral, chilena y
premio Nóbel de literatura, que: “la experiencia es un billete comprado después
del sorteo”. Esta vez trataremos de adquirir experiencia con ganancia de causa,
ese es nuestro sueño.
Desde
el 1978 jamás habíamos vuelto a estar en una competencia con equipos de todo el
mundo, esta será una semana para recordar y guardar.
No hay comentarios:
Publicar un comentario