Dudas y expectativas para Caracas (1 de 5)
Había escrito la mayoría de estas líneas antes de
que el domingo Jul.07.2013, muy discretamente, se anunciara la convocatoria
para la selección nacional de baloncesto de cara a los compromisos de este
2013. Me he visto en la necesidad de hacer algunas correcciones, pero la
esencia de la minuta permanece.
Por
decir algo, diré que quedé descosido, apabullado, aturdido, desconcertado, al
escuchar a Alfred Joel Horford Reynoso conversar sobre la selección nacional de
baloncesto frente a un grupo de periodistas (ESPN Radio, Jul.01.2013, 14:55
horas). “Hay muchas incertidumbres”, señaló el jugador, buque insignia del
conjunto que este año estará en manos del ex-jugador y asistente técnico de la Universidad de
Kentucky, el dominicano Orlando Antigua.
![]() |
Orlando Antigua |
El
equipo nacional absoluto encarará en Caracas, Venezuela, el Pre-Mundial que
otorgará 4 plazas para la cita española del año 2014 y para ello restan menos
de 60 días. Allí otras nueve selecciones estarán buscando el mismo logro, unos
con mayores posibilidades y otros un poco más rezagados. El Poliedro es una
facilidad ya conocida por los dominicanos, estuvimos ahí hace un año en busca
de un lugar para los Juegos Olímpicos de Londres y por poco accedemos a esa
aventura, además, varias de nuestras figuras se han hecho habituales en los
eventos venezolanos; este año jugaron allí Yack Michael Martínez, Luis Flores,
Manuel Guzmán, Kelvin Peña y Gerardo Suero.
Hay
quienes otorgan lauros previos a argentinos y brasileños, dejando sólo dos
posiciones disponibles para España, pero cierto es que nadie tiene una bola de
cristal para predecir cual será el escalafón final de la competencia. El evento
se librará día tras día y todos parten con idénticas inquietudes; cada día, por
9 fechas se jugarán 4 partidos de 40 minutos cada uno. Canadá, Jamaica, Puerto
Rico, República Dominicana, Uruguay y Venezuela, por orden alfabético, lucen
con posibilidades. Más atrás, México y Paraguay.
República
Dominicana estará compartiendo grupo con Argentina, Venezuela, México y
Paraguay y en ese mismo orden desfilarán como rivales. El calendario nueva vez
nos sitúa sin días de descanso y con rivales de fuerza las dos primeras fechas,
en menos de 24 horas se definirá la categoría de nuestro equipo de acuerdo a
los cruces; parecería que no nos representó nadie en el sorteo o que la agenda
fue realizada por nuestros más acérrimos enemigos.
En
los momentos que corren, el equipo dominicano vuelve a ser un enigma. Quizás
sólo para sembrar las mismas dudas y expectativas de siempre; ha sido así casi
toda la eternidad: dejar que los fanáticos se hagan las más variadas preguntas,
que cada quien se forme su propio equipo en la cabeza, pero al final siempre se
han puesto las mismas fichas sobre las duelas; la movilidad dentro de la
plantilla dominicana ha sido forzosamente lenta.
Si
alguna vez hubo algún premio cantado fue la ausencia de Marlon Martínez en los
equipos que conformó Héctor Báez a partir del año 2003 por las indisciplinas
del jugador.
La
nomina de los invitados confirma mi pálpito de que no habrá variaciones en la
ruta a la capital venezolana. El compromiso está próximo y el grupo que trabaja
de cerca con la gerencia de Eduardo Najri es opuesto a novedades, a lances
atrevidos, a una contingencia llena de juventud, a sabiendas que ese grupo le
ha envejecido en sus propias narices. Así como los jugadores se ejercitan y
preparan para la competencia a este cuerpo de asesores técnicos bien le haría
falta un poco de ejercicio neuronal.
Horford
anunció que en dos semanas daría a conocer su decisión de si asiste o no, hay
muchas velas encendidas y muchas invocaciones a la Virgen de la Altagracia ;
Karl-Anthony Towns muy posiblemente no esté porque se someterá a trabajos
recomendados por el entrenador John Calipari de la Universidad de
Kentucky, a donde asistirá a partir de la campaña 2014-15. La una o la otra
abren un hueco a Eloy Vargas, ex–jugador de los Wildcats, que aún necesita probar una inmensidad de cosas sobre la
cancha.
![]() |
James Feldeine |
To be or not to be con Josh Asselin y Charlie Villanueva, drama que se vive desde el
2009; mientras se lanza una carta de amor hacia James Feldeine Padilla, después
de su gran año en España y quien ha manifestado que “el próximo objetivo es
hacer que su madre se sienta orgullosa al verme defender los colores de
República Dominicana”. Muy temprano el espigado Villanueva declinó
elegantemente la invitación. Si hay un “nacionalizado” invitado, la posición debería
ser de Feldeine, a menos que prime la idea de negocios y sortilegios para Asselin
estar. El caso de Sammy Mejía parece haber quedado en un limbo, aquel lugar a
donde van los inocentes no bautizados.
“Muchos preguntan
si voy a jugar para la selección RD... quiero mi país mucho...pero estaré
enfocado en mi juego en Estados Unidos, este es un año importante para mí...
solo estoy concentrado en mi familia y carrera en los Estados Unidos”, escribió
Villanueva. “El año pasado, según el dirigente de la selección John Calipari,
Villanueva fue sometido a algunas pruebas para determinar su condición física
lo que el jugador desmintió” (Listín Diario, Jul.09.2013).
Encontré
las siguientes palabras en el muro de Facebook de un entrenador dominicano,
donde se muestra la indignación popular sobre el manejo del equipo: “mucha
gente quiere cuestionar la decisión de Villanueva en el NO a la selección dominicana
de basket, pero lo que no saben es que el otro año, ni se molestaron en
invitarlo, porque no era necesario, ahora lo llaman, cuando ya está en forma de
nuevo. Yo apoyo la decisión de Villanueva en decirle no a Rafael Uribe y su
grupo de lambones en la selección de
baloncesto de República Dominicana. Busquen un grupo de niñas animadas de
Europa o Estados Unidos”.
Causó
extrañeza la no inclusión de Sean Ogirri Then (6’02), jugador del Breogan de Lugo
en España (9.3 puntos, 1.9 rebotes y 2.3
asistencias en la 2012-13) y de los Metros de Santiago en la Liga Nacional de Baloncesto
(LNB), por demás sobrino del flamante entrenador, que se caracteriza por su
buen manejo del balón, visión de juego y capacidad anotadora.
En la
punta hay que admitir que Edgar Sosa es lo que más se parece a un armador.
Tiene estatura promedio
![]() |
Francisco García |
Detrás,
mucha gente que es más ofensiva que organizadora, un puñado de hombres con cuerpos de base que sólo pueden ejercer medianamente
la posición. Adris De León, Amaurys Fermín, Juan Coronado, Ronald Ramón (jugó
en Caracas 14.4 minutos por noche), Kelvin Peña, Manny Quezada, Víctor Liz y
Luis Flores. Sosa, De León y Coronado estuvieron en Puerto Rico, en el
baloncesto superior, pero ninguno terminó con sus equipos: Santurce, Bayamón y
Guayama, respectivamente.
Como
acompañante, Brandone Francis, un proyecto interesante (6’04, 205 libras ) que ya se
comprometió con la
Universidad de Florida para la estación 2014-15 y muchos lo sitúan
como un jugador de la posición dos. Su presencia allí se debe mayormente a Julián
Suero, actual gerente de los Huracanes de Puerto Plata y a la formación atlética
que le brindaron Kelly Horford y Héctor Báez.
Hay
muchas incógnitas: la condición real de Sosa (2 juegos en España y 31 partidos
en Puerto Rico antes de ser despachado, con 7.5 puntos, 1.5 rebotes y 2.6
asistencias, 46 por ciento de campo, 36 detrás del arco y 65 desde la línea).
Coronado, que parece ser una ficha segura, pese a no ser un consumado
interprete de los fundamentos (36 juegos con Guayama, 11.8 puntos, 5.0 rebotes
y 7.8 asistencias con 45-35-64), armó el juego en Caracas con enormes
responsabilidades, agotó 28.6 minutos por partido pese a las diferencias idiomáticas
con el entrenador de entonces. Quezada (33 juegos con el Juventut de Badalona,
8.6 puntos en 20 minutos de acción, 1.8 rebotes, 1.7 asistencias y 41-29-84).
![]() |
Manny Quezada |
Dudo
mucho que De León sea una pieza para la selección (5’11), siempre se ha
distinguido por ser una especie de showman
del deporte, con capacidad anotadora. Fermín no pudo sacar la cabeza en una
competencia menor, Centro-Basket, 2010, de su progreso nadie ha manifestado una
sola nota. Ramón ha sido pieza fija desde hace varios años y asistió a todas
las concentraciones de Calipari; su trabajo en Brasil ha sido estable y fructífero.
Liz acusa la falta de tamaño (33 juegos con San Germán, 10.6 puntos, 4.0
rebotes y 1.1 asistencias con 47-37-72), “un demonio ofensivo” lo calificó Alex
Rodríguez (Listín Diario, Jul.09.2013). Flores anunciará su baja al igual que
Villanueva, aunque este está recuperándose de un accidente domestico.
Kelvin
Peña (33 años) arrastra una serie de complicaciones físicas que lo tornan muy
frágil; aparentemente sufre una deshidratación aguda en los partidos y necesita
asistencia inmediata. Estuvo fuera de los equipos de Calipari, pero ha sido
pieza fundamental en el engranaje Julio Toro/Pedro Pablo Pérez, muy
especialmente para los equipos venezolanos. Viene de anotar 22.3 puntos, líder
del circuito profesional, con los Toros de Aragua y antes fue pieza importante
de los Guagueries de Nueva Esparta, para el mismo dirigente.
Algún
chusco mencionará a Trevor Ariza cuya nacionalidad nunca ha sido confirmada,
pese a estar dando vueltas en las cabezas termocefalas de ciertos “amigos del
baloncesto”. El delantero inclusive fue selección en el draft de jugadores de nuevo ingreso de la Liga Nacional de Baloncesto
(LNB) en el año 2012-
La posición
dos debe ser de Feldeine, a menos que los negocios con el agente de Asselin
vuelvan a primar. Para los especialistas españoles el jugador cada vez se
parece más a lo que ellos llaman un killer
(matador), siempre que el entrenador le brinde toda la confianza. Es un
atacante neto, consistente e incombustible. Puede asumir la ofensiva en
solitario cuando las defensas absorben a los compañeros y además de anotar con
extrema facilidad tiene un alto porcentaje de aciertos (44-35-82.6); con el
Fuenlabrada (donde antes había fracasado Peter John Ramos) compiló 15.9 puntos,
2.6 asistencias en 36 juegos. Pese a que afinó su puntería de larga distancia
en la segunda parte de la competición ibérica (saltó de un 24 a un 35), es un hombre que
por el instinto ofensivo pierde muchos balones (2.4), pero compensa con sus
recuperaciones (1.3). En la temporada muerta es pretendido por el Barcelona,
donde ya una vez brilló el dominicano Antonio –Chicho- Sibilio.
Manuel
Fortuna, quien viene de una aceptable actuación con los Leones de Ponce en
Puerto Rico, resultó el shooting-guard
más usado hace un año, después de ser ignorado en Mar del Plata. En Caracas
estuvo 21.2 minutos, añade mucha intensidad sobre la pista y junto a Yack Michael
Martínez es el jugador que más veces ha estado dentro del equipo en esta
camada. Hay que ver la disponibilidad de Liz, De León y por supuesto, la
estrella emergente del baloncesto nacional Gerardo Suero Castillo. El problema
de Fortuna, De León y Liz es que miden “una cuarta del talón al culo” y para el
nivel de competencia resultan muy pequeños. Suero Castillo es impetuoso pero
necesita mejorar su lance de distancia, algo que tienen sus rivales en la
posición; es el único de los jugadores dominicanos de la punta que mide más de
1,90.
Francisco
García es titular de la posición tres (30.3 minutos en Mar del Plata/31.0 en
Caracas) pero puede ayudar en la punta con efectividad; refirmó con Houston
Rockets dentro de la NBA
(Asociación Nacional de Baloncesto, por sus siglas en inglés), situación que le
brinda respiro a sus posibilidades de estar. Su salida del escenario nos ha
convertido siempre en un equipo muy pequeño.
No se
ha trabajado en formar un verdadero tres en el país y los que han podido
hacerse de la posición han visto truncadas sus posibilidades ante la falta de
política de la
Federación Dominicana de Baloncesto (FEDOMBAL) para con sus
jóvenes valores. Antes y ahora ha existido el material para ello, pero es más fácil
no hacer nada. Los dominicanos pensamos que “el trabajo lo hizo Dios como
castigo”, como dice uno de los merengues tradicionales del país cantado por
Alberto Beltrán. No han aparecido los bueyes que surquen el campo del
baloncesto dominicano. Por eso, aunque nos cueste la vida, hay que seguir
buscando donde poder encontrar esos cabestros. Cuando nos hayamos redimidos
ante nuestras labores, no habrá más llantos, ni más tristezas, ni más dolores.
Detrás
de García podría estar el regreso de Orlando Sánchez, que es polivalente,
esperando una oportunidad en la
NCAA por St. John’s en la cuidad de Nueva York; se ignoró una
vez más a Ronald Roberts, delantero de St. Joseph’s en la ciudad de
Philadelphia; y se incluyó Luis David Montero (6’07), debido a los intereses
recientes, mercuriales todos, que se tejen a su alredor. Ninguno es un tirador
consumado, por lo que es una baza en contra del equipo dominicano. Resucitar a
Amaury Filión después de una carrera que prometía tantísimo debería ser también
una tarea para aquellos que le prometieron villas y castillas pero que lo han
dejado en el ostracismo después de su infortunio.
Montero
(6’08) está actualmente en Wilbraham & Monson Academy, una preparatoria en Wilbraham,
en las cercanías de Boston (Massachusetts), y podría convertirse en una
referencia para el baloncesto dominicano, su proyección no deja de ser
interesante, pero más de uno ha dejado escapar que es un hombre jugando contra
niños. Su experiencia en Santo Domingo es de todos conocida y el mundo entero sabe
de su capacidad, quizás quien mejor lo conozca sea uno de sus mentores, Onésimo
Acosta Lafontaine; es un tres atlético y para el futuro siempre y cuando las
carencias en sus años de formación no le pasen factura como ha acontecido
tantas veces. En su caso cabe recordar que su arribo a los Estados Unidos
produjo ciertos escarceos entre “buscadores de oportunidades”. Uno había
arreglado todos los papeles, buscó la escuela y de repente apareció la mano
omnipresente de Pedro Pablo Pérez.
La
inclusión de Giancarlos –El Gato- Acosta (6’06) no deja de sorprender, estuvo
en la concentración del 2011 pero rápidamente fue despachado. Está realizando
una gran campaña con los Cocolos de San Pedro de Macorís en la LNB , con medias de 10.2
puntos, 4.0 rebotes, 1.0 asistencias y porcentajes de 45.2 desde el campo, 23.5
detrás del arco y 90.0 desde la línea, en una escuadra donde hay demasiados
actores ofensivos y donde precisamente no es la primera opción. Es un jugador
pimentoso que imprime una carga emocional positiva importante a sus compañeros.
No hay comentarios:
Publicar un comentario