jueves, 3 de junio de 2021

Los fraseos de un tartamudo llamado Rafelin

Mayo 27 del 2021
2-de-3
 
 
Serbia (Srbija, o tierra de los serbios) es un país soberano, con un gobierno tipo república parlamentaria, está situado en la península balcánica, en el sureste de Europa, sin costa; limita con Hungría al norte; con Rumania y Bulgaria al este; con Macedonia del Norte y Albania al sur; y con Bosnia y Herzegovina, Croacia y Montenegro al oeste.
archiduque Francisco Fernando


 
El nombre de Serbia le viene dado por sus más antiguos pobladores eslavos, los srbi (serbios; en serbio cirílico: Срби), cuyo origen es incierto. De acuerdo con la Crónica de Néstor, historia del primer Estado eslavo oriental, los serbios se encuentran entre los cinco primeros pueblos eslavos que fueron conocidos por su nombre moderno. La guerra no ha sido ajena a Serbia; desde el siglo VI, cuando los eslavos se asentaron en esa región de los Balcanes, el territorio serbio ha servido como teatro de operaciones a numerosos conflictos bélicos. Al principio la lucha se libró entre clanes hasta que la dinastía fundada en el año 1169 por Stefan Nemanja (abril del 1113 en la localidad de Nemanja, Podgorica, Montenegro; Feb.13.1199 en el Monasterio de Hilandar, Moni Chilandariou, Grecia), señor de la ciudad de Raska (gran župan de Rascia, y fundador de la dinastía Nemanjić), antiguo nombre de la actual Novi Pazar, amplió en el XIV sus dominios hasta el río Danubio y el corazón de Grecia y consolidó el llamado esplendor serbio.
 
Serbia fue un reino medieval que evolucionó hasta convertirse en un imperio que alcanzó su máxima extensión en el siglo XIV. En el siglo XV su territorio fue conquistado por el Imperio otomano, la decadencia se fraguó desde Jun.15.1389 cuando los turcos otomanos derrotaron en la Batalla de Kosovo al zar eslavo Lazar, al que perteneció hasta el siglo XIX, el triunfo del poder musulmán empezó a resquebrajarse tres siglos más tarde a consecuencia de los ataques austrohúngaros en las riberas del Danubio, los serbios volvieron a escuchar tambores de guerra en los albores del siglo XIX, cuando decidieron independizarse. Dieron el primer paso en 1829 tras la guerra ruso-turca, una vez se reconoció a Serbia como principado autónomo turco pero bajo protección de Moscú. En 1872, los serbios hicieron su sueño realidad: obtuvieron la secesión, momento en que Serbia recuperó su independencia y expandió su territorio.
 
Tras concluir la Primera Guerra Mundial, desencadenada en Jun.28.1914 con el asesinato en Sarajevo (Bosnia-Herzegovina) del archiduque austriaco Francisco Fernando (en alemán: Franz Ferdinand Carl Ludwig Joseph Maria), Dic.18.1863 en Graz, Austria; Jul.28.1914 en Sarajevo, archiduque de Austria, príncipe imperial de Austria, príncipe real de Hungría y Bohemia y, desde 1896 hasta su muerte, el heredero al trono austrohúngaro), Serbia formó junto con otros territorios balcánicos el Reino de Yugoslavia, conformado por el rey dictador Alejandro I. Llegó la Segunda Guerra Mundial, Alemania invadió el territorio de los Balcanes, la resistencia de los serbios estuvo bajo el liderazgo de los partisanos, que con el apoyo de Washington, Londres y Moscú trajo la liberación de Yugoslavia en 1944. Concluida la Segunda Guerra Mundial, jefe partisano, el mariscal croata Josip Broz, Tito (en serbo-croata cirílico: Јосип Броз, May.07.1892 en Kumrovec, Croacia; May.04.1980 en Liubliana, Eslovenia), se hizo entonces con el poder y gobernó a Yugoslavia que pasó a ser la República Federal Socialista de Yugoslavia, hasta su muerte en 1980, transformó a la nación en el estado más liberal del mundo socialista, un equilibrista entre Washington y Moscú: fue absolutamente independiente del Kremlin y siempre contó con el respaldo de Occidente. La desaparición física del mariscal Tito, le dio paso a Slobodan Milošević (Ago.20.1941 en Požarevac, Serbia; Mar.11.2006 en la prisión Scheveningen South/East, La Haya, Países Bajos, presidente de Serbia entre 1989 a 1997, y presidente de Yugoslavia desde 1997 hasta 2000), que exacerbó el nacionalismo serbio y embarcó a su pueblo en otra guerra. Finalmente, Serbia se convirtió de nuevo en un estado independiente en 2006, tras la disolución de la unión de Serbia con Montenegro.
Tito junto a Isabel II de Inglaterra (1972)


Los serbios tienen una consigna: Само слога Србина спашава (Samo Sloga Srbina Spašava; castellanizado: solo unidos los serbios sobreviven).  Ocupan una superficie de 88.361 kilómetros cuadrados, tienen el doble de tamaño que República Dominicana, con 2,026.3 kilómetros de fronteras, y una población de 6,926,705 habitantes, poco más de la mitad que los dominicanos.
 
Además de Belgrado (1,576,124) sus ciudades más pobladas son Novi Sad (299,294), Niš (250,518), Kragujevac (175,802), Leskovac (156,252), Subotica (148,401), Zrenjanin (132,051), Kruševac (131,368), Pančevo (127,162), Šabac (122,893), Kraljevo (121,707), Čačak (117,072), Smederevo (109,809), Sombor (97,263), Valjevo (96,761), Vranje (87,288), Novi Pazar (85,996), Užice (83,022), Kikinda (67,002), y Zaječar (65,000).
 
Ivo Andrić (Oct.09.1892 en Dolac, municipio de Travnik, Bosnia, Austria-Hungría; Mar.13.1975 en Belgrado, entonces Yugoslavia) ganó el Premio Nobel de Literatura en 1961. Entre sus grandes obras se encuentra un Puente sobre el Drina y la Crónica de Travnik; sus escritos trataron principalmente de la vida en su Bosnia natal bajo el dominio otomano.
 
El aeropuerto de Belgrado recibe el nombre de Nikola Tesla (en serbio, Никола Тесла; Jul.10.1854 en Smiljan, Imperio Austríaco, actualmente territorio de Croacia; Ene.07.1943 en New York, New York; se había nacionalizado estadounidense), es también conocido como aeropuerto de Surčin, debido al municipio donde está situado, a 12 kilómetros al oeste del centro de la ciudad capital de Serbia, rodeado de las fértiles tierras bajas de Vojvodina. Tesla, señaló en una ocasión: «en realidad no me preocupa que quieran robar mis ideas, me preocupa que ellos no las tengan».
Tito (1942)


Pensar en una respuesta coherente de López Guillen, dirigente dominicano, ante los planteamientos tácticos de Igor Kokoškov (Igor Stefan Kokoškov, Dic.17.1971 en Banatski Brestovac, antigua Yugoslavia) director técnico de los locales que actualmente está al frente del Fenerbahçe Beko de la Turkish Basketball Super League, es pedir plátanos a un árbol de mangos.
 
Lo que debería ser investigado es el escándalo generado en las oficinas consulares serbias por una solicitud de FEDOMBAL donde requieren se le permita importar un centenar de muñecos de trapo, 500 agujas de 10 centímetros sin ojos, velas y velones (con sal del Himalaya, velones de miel, velones manto protector, velones 2 llaves de la justicia, velas herboleo marca Deseo, velones siete mechas de colores, vela cruz de la espada de San Jorge, velas tipo bujía aromática, velones Santa Martha, velas herborea garrapata, velones coco eleggua, velones amansa guapos con sal del Himalaya, velones riqueza), cigarros, aguas de las siete potencias, aguas de vini-vini, agua de flor de azahar, agua de sándalo, agua de albahaca, agua de ruda, jabones de agua de florida, aceite siete machos, novenarios de san Pancracio, y una larga lista de chucherías.
 
¿A Belgrado se irá a practicar santería o a jugar baloncesto?... también se solicitó visado para un hungan, bokó y zobóp, nombrado Guede Masaka, muy maligno y muy temido por practicar magia negra, experto recitador de conjuros, con la única intención de producir enfermedad o una muerte a distancia.
 
Tristemente, con fanatismo, ignorancia, y supersticiones no se llegará a ninguna parte.
 
Estos serbios que serán los primeros oponentes en la búsqueda de una plaza a los Juegos Olímpicos de este novedoso 2021 son los sucesores de aquellos exitosos equipos nacionales de Yugoslavia, considerada la tercera mejor selección de la historia del baloncesto por el número de medallas alcanzadas, y cinco veces vencedora del Campeonato Mundial de baloncesto (1970 en Yugoslavia; 1978 en Filipinas; 1990 en Argentina; 1998 en Grecia; y 2002 en Indianapolis, Estados Unidos), más tres segundos lugares (1963 en Brasil; 1967 en Uruguay; y 1974 en Puerto Rico) y dos terceras plazas (1982 en Colombia; y 1986 en España).


Ya bajo la bandera de Serbia se hicieron con el cuarto lugar en el Campeonato Mundial del 2010 efectuado en Turquía, y la medalla de plata en el Mundial del 2014 celebrado en España.
 
En el marco de los Juegos Olímpicos, cronológicamente, Yugoslavia fue plata en México, 1968; plata en Montreal, Canadá, 1976; oro en Moscú, 1980; bronce en Los Ángeles, Estados Unidos, 1984; plata en Seúl, Corea del Sur en 1988; plata en Atlanta, Estados Unidos, 1996; y como Serbia, plata en Rio de Janeiro, Brasil, 2016.
 
Dentro del Campeonato Europeo de Baloncesto, Yugoslavia cargó con 17 medallas: 8 doradas, 6 plateadas, y cuatro de bronce; sólo superado por las 21 de la Unión Soviética (14-3-4). Como Serbia acumulan a la fecha dos medallas de plata.
 
El primer oro en el Euro-Basket lo consiguieron en el 1973 cuando en Barcelona, España, se impusieron a los locales 78 por 67; conquistaron otros dos metales auríferos en las versiones de 1975 y 1977; en 1975 teniendo como sede a Belgrado dominaron la competencia en la que no se celebró el play-offs correspondiente, con los soviéticos ocupando la segunda plaza, y más atrás los italianos; en 1977, en Bélgica (Lieja), con pizarra de 74 por 61 se llevaron a la poderosa escuadra de la Unión Soviética.

Necesitaron una espera de 12 años, para en 1989, teniendo como sede a Zagreb, en la propia Yugoslavia, vencieran a Grecia, con pizarra de 98 por 77, con la Unión Soviética haciéndose del tercer lugar. En el Euro-Basket del 1991 en Roma (Italia), repitieron el galardón imponiéndose a los locales, 88 por 72, España ocupó la tercera plaza, y detrás Checoslovaquia.
 
Dos coronas más al hilo: 1995 teniendo como anfitriones a Grecia (Atenas), sobrevivieron a Lituania en el juego por la corona que terminó con un 96 por 90; los croatas se hicieron de la tercera plaza. En 1997, de regreso a Barcelona, se impusieron a Italia con un 61 por 49; los rusos fueron terceros. La última diadema de Yugoslavia en un Euro-Basket llegó en el año 2001 cuando en Estambul, Turquía, superaron a los dueños de casa con un 78 por 69.
 
Medallas de plata: 1961 tras caer en Belgrado ante la Unión Soviética con marcador de 60 por 53; la tercera plaza perteneció a Bulgaria. Cuatro años después (1965), nueva caída ante la Unión Soviética, 58 por 49, pero esta ocasión la sede corrió en Moscú; Polonia se quedó con el bronce. En 1969 el Euro-Basket se efectuó en Nápoles, Italia, los soviéticos se impusieron en la final a los yugoslavos, 81 por 72, y Checoslovaquia terminó ocupando la tercera posición. 1971 en Essen, Alemania Occidental, la Unión Soviética sobrevivió al ataque de Yugoslavia, y el duelo concluyó 69 por 64, los italianos fueron terceros. En 1981, Praga, la hermosa capital de lo que fue Checoslovaquia, sirvió de anfitrión al clásico continental, y nueva vez la Unión Soviética superó a Yugoslavia, 84 por 76, los duelos de casa fueron terceros.
Oro en el Euro-Basket de 1973 en Barcelona, España


Medallas de bronce: 1963 en Breslau, Polonia, los dueños de casa cayeron ante la Unión Soviética, 60 por 53, y los yugoslavos fueron terceros. 

Para 1979 el torneo volvió a Italia, esta vez en Turín, y los soviéticos se impusieron claramente a Israel en la final, 98 por 76; Yugoslavia se adueñó del tercer lugar. En 1987 se jugó en Atenas, Grecia, y el cuadro local derrotó a Unión Soviética, 103 por 101, en un partido que se extendió a tiempo extra, los yugoslavos terminaron con la presea de bronce. Paris, Francia, acogió la última Yugoslavia, para la justa del 1999, y los plavi fueron terceros; la diadema se la adjudicó Italia tras superar a España con pizarra de 64 por 56.
 
Conceptualmente deberíamos tener claro que Serbia es mucho más que un puñado de jugadores excepcionales. Es una forma de entender el baloncesto, de vivir plenamente la disciplina de los aros y los balones. Es una forma de vida. Una religión. Los «azules»', que eso significa «plavi», no serán jamás unos convidados de piedra, menos como locales. No dejarán de creer en sus opciones hasta que el bocinazo final diga que se han consumado todas las acciones. Ellos son serbios, son la nación que ama el baloncesto por encima de todas las cosas, que encontrará la vía de hacer aguas a sus rivales, y si por alguna razón se sienten en peligro habrá sangre y consecuencias a la más mínima adversidad.

 

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