viernes, 8 de enero de 2021

Basketmania
Chamuscados por excesos de protagonismos fingidos; e incumplimiento en las obligaciones
Enero 03 del 2021
uno-de-dos
 
 
En Dic.31.2020 escribí una breve nota sobre Hugo Rafael Cabrera Lora y la situación de salud por la que atraviesa. Ello forma parte de un artículo más extenso, anecdótico, que aún no he publicado; las información de primera mano me las brindó Bernardo Antonio Castellanos De Moya, Nano, amigo de toda una vida, sin ser íntimos, y quien formó parte del Comité Organizador del Centro-Basket de 1975, siendo apenas un mozalbete… para mi, una joya que se perdioo la disciplina.
 
Posteriormente recibí una llamada (Dic.31.2020) de alguien que prefiero mantener en el anonimato avanzandome que José Joaquín Puello Herrera, en su condición de médico, y pasado presidente del Comité Olímpico Dominicano, el periodista Roosevelt Comarazamy Medina y Francisco Marcial Romero Castillo, pasado miembro de la selección nacional de baloncesto y secretario de la Fundación Virgilio Travieso Soto, se encontraban moviendo cielo y tierra para tener una reunión con Luis Rodolfo Abinader Corona, Presidente de la República.
 
No tengo santos en pedestales, ahora hay quienes merecen algún tipo de respeto dependiendo de la labor que estén realizando, y cuando considero que: «los muchachos debemos hablar cuando las gallinas orinan», doy un paso al costado.
 
Me sorprende lo actualizado que clínicamente está el doctor Puello Herrera (Sep.25.1940 en San Juan de la Maguana); Comarazamy Medina es considerado el más versátil de los periodistas dominicanos dedicados a la actividad deportiva, arrastra una sólida formación académica, amigo de sus amigos, lasallista al igual que un servidor, también pasado miembro de la selección nacional de baloncesto, aunque tengo la pñercepcion  de se disgustó conmigo cuando le enrostré algunas verdades a Luis Rafael Mejía Oviedo, Luisin, actual presidente del Comité Olímpico Dominicano, no me lo señaló pero así lo sentí, guardó el silencio de los dioses terrenales por decencia y educación; y el inexorable tiempo terminó dándome toda la razón. Romero Castillo es con quien menos he accionado, pero me luce de una reciedumbre inagotable. Ante tantos oficiales con galones superiores, sólo apunté: «considero que es más accesible Raquel Arbaje, la Primera Dama».
doctor Puello Herrera

 
Quizás modestamente crea y considere que se me escuchó. Ahora, tampoco me voy a mandar las partes, porque posiblemente esas conversaciones pudiesen haber estado adelantadas; doblando la curvita de la Paraguay.
 
En 48 horas se consiguió la ayuda del Estado Dominicano para un inmortal del deporte dominicano con letras mayúsculas, en negritas y subrayadas. Quien de paso, debemos recordar fue vilipendiado y ninguneado por Jaime David Fernández Mirabal cuando este pasó por la secretaria de estado de Deportes y Recreación, ya convertida en ministerio.
 
El ex vice-presidente de la República, ex-ministro de Medio Ambiente y Recursos Naturales, ex-pre-candidato presidencial por su organización política, el partido de la Liberación Dominicana (PLD), ex-senador por la provincia Salcedo, ahora Hermanas Mirabal, ex-miembro de la Junta Monetaria; una estrella que paso a paso el mismo se encargó de apagar. ¡Buche y pluma na’ ma’!
 
Un nombre adornado por un pasado no propio, pero más que lo que él pudo labrar dentro de un pretérito ajeno, porque las protagonistas históricas fueron sus tías, Fernández Mirabal nos resultó un tipejo con muchos preteritos en su haber, y entiendo que escasísimo porvenir, siendo generoso; bueno en nada excepto en la holgura financiera que debe haber acumulado para bufonearse de quienes no van de acuerdo a sus criterios y los menos favorecidos económicamente, cargó contra un sinnúmero de deportistas de primer nivel, ya en retiro, ante la mirada cómplice de sus sub-secretarios que callaron como cobardes. Pero nos dejó tatuado en el ministerio a una corte de eunucos, empezando por Reyes Aníbal Portorreal Capellán, quien sin saber de ninguna disciplina, sin conocérsele un mínimo pasado en actividades deportivas, y expediente como funcionario público lleno de manchas e indelicadezas, llegó como vice-ministro administrativo, y con Díaz Vizcaíno fue cuatro años vice-ministro técnico. ¡Sólo en República Dominicana, el país de las maravillas!
 
En la noche de Ene.02.2021, Romero Castillo colocó en las redes sociales: «ahora si es bueno el mandar a orar por Hugo (Hugo Cabrera), a darse golpes en el pecho, con todo esto; porque todo esto solo es para la gloria de Dios, que ayudará con la salud de Hugo… perdonando al ministro de Deportes, tengo a bien pedirles que no le quiten los méritos a la primera dama doña Raquel Arbaje de Abinader, pues es ella quien está resolviendo el caso de Hugo Cabrera. Que nadie busque protagonismo frente a la labor que ella está realizando… cuando Sergio Taveras, no lo hicieron, y ahora le quieren quitar a la Primera Dama los méritos, quien está laborando junto a Roosevelt Camarazamy».
 
¡Virgensantísima!... ¡Jesusantísimo!... ¡Cristo de la Sangre!... si la fe mueve montañas, el amor en Cristo toca lo inalcanzable. Luis Rafael Mejía Oviedo, Luisin, y Rafael Fernando Uribe Vásquez, Rafelin, el primero presidente del Comité Olímpico Dominicano (COD) y el segundo de la Federación Dominicana de Baloncesto (FEDOMBAL) han abusado de muestras fervorosas de catolicismo sin fe, uno más que el otro, queriendo enrostrarnos a todos que por medio de ellos también se llega al reino de los cielos. Olvidan que a ambos les espera el más ardiente de los hornos donde sólo se escuchará el mayar de Luzbel.
 
Aquí hay quienes quieren correr más que la propia pelota. Gente que en realidad son únicamente extracto de vertedero, destilados de los más finos lixiviados, que pretenden aprovechar todo espacio donde se mueva dinero contante y sonante, o un funcionario de alto nivel sin importar que sea un depredador más, dispuesto a desprenderse de algunas calderillas, y colocarse a sus pies.
 
¿Hay quienes están buscando pescar en este mar de solidaridad?
 
Vivimos rodeados de demasiados actores secundarios que tienen el abdomen lleno de callos, de tanto arrastrase; y encima de ello se consideran triunfadores. Serpentinas de excremento de felino doméstico, que como unos embelesados purrucos de El Conde, la historia borrará, no los absorberá, repelerá, y se perderán para siempre en el olvido más desconsiderado.
 
Todos los aportes, incluyendo el estatal deben de ir directamente a las cuentas bancarias dadas a conocer por diferentes medios, y que están bajo la potestad de Ayanna Cabrera-Cook, uno de los hijos de nuestro más celebrado canastero, residente en Cedar Hill, Texas. El abrazo de la solidaridad no guardó espacio para la timidez, los aportes empezaron a fluir, algunos, el listado es público, de sus antiguos compañeros y rivales en las batallas dentro de las duelas. Ausentes sí, todas las autoridades de FEDOMBAL, a nivel personal como tampoco de manera institucional.
 
Increíblemente, yo con una perdida estrecha y extremadamente reciente, cuando terminó el 2020 y dio paso al año que empezamos a vivir pensé en Hugo Cabrera, no lo hice en mis hijos, en mi familia, en mis compañeros de toda una vida, tampoco en mi mamá con 12 días de haber pasado a otras dimensiones. Sorpresivamente este 2000 vete que tanto nos ha golpeado nos dejó la novedad de que los tratamiento a los que era sometido El Inmenso no cumplían totalmente con los beneficios que debían ofrecer.
 
Ese Hugo Cabrera que La Guadaña ha pretendido sentársele en las cercanías, entregó su vida y sus momentos más rutilantes al baloncesto dominicano, y bastaron pocos gestos para que fuese al que todos quisiéramos emular, ya con la camiseta de la selección nacional o con los colores del San Lázaro, después paso por el Naco (Nacional de Construcciones) y Los Mina. Cautivó a una audiencia multicolorida a base de fundamentos, su copiosa capacidad anotadora y su enorme versatilidad, porque además de todo lo que se pueda rememorar, podía tener vigencia en las cinco posiciones sobre el tabloncillo. Utilizó su candor a la hora de perseverar en nuestros triunfos nacionales, y nos enrutó hacia un desarrollo deportivo que resultó sostenible hasta que llegaron las apetencias económicas de terceros, generalmente ajenos a la actividad, quienes se sirvieron de ella y aún continúan haciéndolo.
 
Primer dominicano llamado en el draft de la NBA, primer dominicano en firmar un contrato con la NBA, pero no llegó a pisar la madera dura del Madison Square Garden. Hasta el mismísimo The New York Times dedicó un amplio reportaje sobre su condición de hispano en el equipo de la Capital del Mundo, los New York Knicks (Knicks Trying Cabrera's Latin Touch in Backcourt, Ago.08.1978 bajo la firma del periodista Sam Goldaper). Para que no lo olvidemos, una ciudad fundada por un criollo dominicano.
 
Para los que llevan anotaciones, otro dominicano fundó la ciudad de Chicago. Aunque detesto con todas mis fuerzas a Kinito Méndez (José del Carmen Ramírez Méndez, Nov.18.1961 en
Padre Las Casas, provincia de Azua), replicaré aquí una de sus frases: «¡aaaaah, que paisito que le gusta a la gente este!».
 
¿Cuál es el melao que llevamos dentro que no podemos pasar desapercibidos ante las miradas de propios y extraños?... así desde mucho antes de pretender ser nación, grado que aún no hemos alcanzado, y nos quedamos atascados en un país a punto de colapsar, en el límite de lo fallido, muchísimas veces esquilmado, con un liderazgo nacional, desde nuestra separación de Haití, que jamás ha podido desprenderse el rotulo de montañitas de excremento.


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